El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, ha presentado el proyecto del nuevo Centro de Internamiento para Extranjeros de Algeciras cuyo diseño, ha asegurado, quiere que se replique en otros CIE de España. La única novedad consiste en distribuir a los internos por “sexo, procedencia, nacionalidad y religión”. Sin embargo, no ha mencionado ningún detalle sobre el propio modelo de estos centros, del que dice estar trabajando desde hace un año.
Desde Interior, defienden el nuevo CIE para “acabar con soluciones transitorias como la de [el centro penitenciario de] Archidona”, donde el Ejecutivo trasladó, con autorización judicial, a alrededor de 500 personas tras llegar a las costas murcianas en patera.
El centro de Algeciras sustituiría al actual CIE de la ciudad andaluza tras años de denuncias por sus malas condiciones. Este “nuevo modelo arquitectónico”, como lo ha denominado Zoido, se basa “en la construcción de una nueva planta con edificaciones completamente nuevas, a diferencia de los que están funcionando actualmente que se crearon sobre inmuebles destinados para otros usos, como antiguas cárceles o comisarias”, como era el caso del de Algeciras.
Según Interior, el nuevo centro será “el más grande de España”, ya que contará con 706 plazas, pero en la actualidad existe uno mayor: el de Fuerteventura -con capacidad para más de 900 personas-, que se cerró temporalmente debido a su falta de ocupación.
El ministro de Interior se ha centrado en la estructura física del CIE, pero no ha profundizado en el “modelo” de centros que había mencionado cuando anunció la construcción de tres nuevos en Málaga, Algeciras y Madrid, acordados y presupuestados con la UE desde 2013.
Según ha afirmado, el ministro ha pedido a “todos los partidos políticos que aporten sus ideas y sugerencias a este modelo en el que el Gobierno lleva trabajando este último año”. De esta forma, el Zoido ha presentado el “nuevo modelo” de CIE sin detallar cómo funcionarán estas dependencias.
El ministro asegura que ahora se debe definir, por ejemplo, tanto el papel que deben desempeñar las ONG como el personal que debe encargarse de la custodia de los internos, es decir, “si debe seguir siendo la Policía como hasta ahora o si es preferible que lo haga un cuerpo civil de funcionarios”.
“Para ello, vuelvo a pedir la colaboración y aportación de todos los grupos políticos porque entendemos que si los cambios se afrontan desde el diálogo y el consenso siempre será mucho más válidos y satisfactorios”.
Sin embargo, todos los partidos políticos se mostraron sorprendidos cuando conocieron la convocatoria del acto de presentación del “nuevo modelo” de CIE. Fuentes de Unidos Podemos, Ciudadanos y PSOE criticaban en este medio que el Ejecutivo tan solo mantuvo algunas reuniones sobre estos centros para transmitirles las “decisiones ya tomadas”.
Un nuevo CIE cuando su eficacia está en entredicho
La presentación de este nuevo CIE llega en un momento en el que su eficiencia como mecanismo de expulsión está más en entredicho que nunca, con un porcentaje de internos expulsados que no ha superado el 30% en 2016.
El titular de Interior insiste en que los CIE son “una herramienta necesaria para hacer efectiva la política migratoria de la Unión Europea, particularmente en lo que se refiere a la lucha contra la inmigración ilegal”. Zoido defiende estos centros como herramienta de expulsión de los migrantes en situación irregular, sin embargo, el 70% de los que pasaron por ellos el año pasado no fueron finalmente deportados.
Sobre el nuevo CIE de Algeciras, Zoido ha concretado que “contará con una zona de enfermería, con estancias de consultas y camas hospitalarias”. También tendrá “locutorios y una gran sala de comunicaciones para que los internos se puedan comunicar con sus abogados y con personas ajenas al CIE y con las que tengan algún vínculo”.
Terreno cedido por el Ayuntamiento de Algeciras
Zoido ha estado acompañado por el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, y por el alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce, cuyo consistorio cederá una parcela de 20.000 metros cuadrados para la construcción de un nuevo CIE en esa localidad gaditana, que sustituirá al actual, desarrolla Interior en un comunicado.
“De esos 20.000 metros cuadrados, el Ayuntamiento ha cedido un total de 10.000 metros cuadrados, y los otros 10.000 metros cuadrados restantes lo hará próximamente”, ha añadido.
La mayoría de ONG especializadas en inmigración exigen el cierre de los CIE por ser “una vulneración de derechos humanos en sí misma”, dado que encierran a personas por el hecho de estar en situación irregular, lo que supone una falta administrativa, no un delito.