Grande-Marlaska asegura que las concertinas estarán completamente retiradas en 2020 de las vallas de Ceuta y Melilla

La retirada de las concertinas de las vallas que separan España y Marruecos fue una de las medidas estrella anunciadas por el recién estrenado Gobierno de Pedro Sánchez, pero aún no la ha acometido. Este lunes, el ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, ha asegurado en una entrevista en Telecinco que las obras en las fronteras de Ceuta y Melilla habrán concluido “para 2020”.

El Consejo de Ministros aprobó el proyecto el pasado enero, pero, de momento, el alambre de cuchillas sigue coronando ambas alambradas. Este lunes, El País ha informado, citando fuentes del departamento que dirige Grande-Marlaska, de que las concertinas desaparecerán en el último tramo del año y cita la “complejidad” del proyecto como el principal motivo para que el Gobierno aún no la haya llevado a cabo.

Durante la entrevista, el ministro ha evitado precisar fecha concreta, señalando que “no hay ninguna novedad”. “Siguen las obras y concluirán para 2020. En el 2020, el conjunto de las obras estarán completamente materializadas”, ha agregado. Lo mismo aseguran fuentes del departamento a este medio, que recalcan que “se sigue trabajando” en el proyecto aprobado y que “no hay fecha cerrada” para la sustitución de estos elementos.

A su llegada al cargo, Grande-Marlaska convirtió la retirada de las concertinas en una de las grandes banderas de su gestión. “No me gusta dar plazos porque muchas veces conducen a frustraciones pero va a ser con carácter inmediato”, subrayó en julio de 2018 el titular de Interior. En una visita a Ceuta a finales de febrero, anunció que las obras iban a comenzar en las “próximas semanas”.

Estas incluían actuaciones para elevar el vallado un 30% hasta los 10 metros “en aquellas zonas por las que se han producido más entradas” y sustituir todas las cuchillas “por un elemento que coronará el perímetro fronterizo y que garantizará la seguridad de forma no cruenta en todo el vallado”. A lo largo del año 2019, el Gobierno acordó también instalar un nuevo sistema de circuito cerrado de televisión (CCTV), es decir, tecnología de videovigilancia, en el perímetro fronterizo de Ceuta, así como una “mejora de la red de fibra óptica y la ampliación” del sistema de videovigilancia en la frontera de Melilla.

En el mes de abril, el Gobierno todavía no había comenzado a retirar las cuchillas, tal y como confirmaron a Europa Press fuentes de Interior. Un mes después, en mayo, fuentes de este departamento aseguraron que no tenían previsto empezar a quitar las concertinas al menos hasta que pasara el verano.

Hasta la fecha, según han explicado desde Interior a eldiario.es, se ha actualizado el circuito cerrado en el perímetro de Ceuta y el sistema de reconocimiento facial tanto en Ceuta como en Melilla. “Se trata de una remodelación muy compleja que no solo incluye la retirada de las concertinas, sino la modernización de la frontera terrestre. Toda esta transformación estará lista en 2020”, señalan.

Para la aprobación del proyecto de retirada de las concertinas, el Consejo de Ministros concluyó que estos elementos “no están siendo hoy en día un obstáculo de relevancia para impedir las entradas irregulares y, sin embargo, suponen un alto riesgo para la integridad física de las personas”. No obstante, Marruecos ha construido una nueva cerca coronada con ese mismo tipo de cuchillas que rodea el perímetro de los ocho kilómetros de las otras verjas existentes en Ceuta. “Interior nunca ha opinado de posibles infraestructuras, obras o lo que sea de otros países”, se limitaron a responder fuentes oficiales del departamento a eldiario.es.

Este lunes, el responsable de Interior ha reiterado que se llevará a cabo una remodelación del perímetro fronterizo, pero “siempre para mayor seguridad”, porque “queremos generar unas fronteras del siglo XXI”. Grande Marlaska ha recalcado que el objetivo es crear una frontera donde “la humanidad y la seguridad no estén disociados”.

El alambre de cuchillas cubre las vallas fronterizas de Ceuta y Melilla desde octubre de 2005, cuando el socialista José Antonio Alonso lideraba el Ministerio del Interior. En 2007, la vicepresidenta María Teresa Fernández ordenó la retirada de este material cortante de determinadas zonas de la alambrada melillense debido a las profundas lesiones que provocaba. No retiró todas las cuchillas, solo aquellas que, a su juicio, provocaban un mayor riesgo.

En 2009, una persona murió desangrada por las lesiones provocadas por las concertinas, en su intento de sortear la frontera de Ceuta, donde las cuchillas nunca habían sido retiradas.

Hace cinco años, el Gobierno del Partido Popular decidió colocar más concertinas en la zona superior de la valla de Melilla, la más peligrosa, lo que provocó numerosas críticas por parte de ONG, expertos, la Iglesia y toda la oposición, incluido el PSOE. En su último programa electoral, Pedro Sánchez incluyó la retirada de las cuchillas de las alambradas como uno de los compromisos electorales.