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El niño inmigrante que apareció muerto en una playa de Cádiz pudo estar en una patera que se hundió el día 12

Sobre las 8 de la mañana del pasado 28 de enero un vecino de la localidad de Barbate (Cádiz) alertó a los servicios de emergencia de que había divisado el cadáver de un niño subsahariano en la playa de El Roqueo de los Caños de Meca (Barbate). El cuerpo, de un menor de unos seis años, fue recogido por la Guardia Civil de la localidad, pero la Subdelegación del Gobierno no ofreció un comunicado de prensa.

Hasta el momento, colectivos como Caminando Fronteras han enviado toda la información a la Guardia Civil que se ha hecho cargo de la investigación, pero la ONG apunta a que el cuerpo del niño podría corresponder a Samuel, aunque todavía no ha podido ser identificado. El niño había desaparecido en la balsa que naufragó en aguas del Estrecho en la madrugada del 12 al 13 de enero, cuyos cuerpos fueron hallados en las playas gaditanas el sábado 14.

Samuel desapareció junto a su madre Veronique entre las costas de España y Marruecos. Su madre había huido de la República Democrática del Congo hace varios años. Su objetivo era cruzar desde Marruecos a Europa para continuar un viaje que le permitiera ponerse a salvo. Sin embargo, su balsa se perdió en el Estrecho y, pese a que Salvamento Marítimo inició su búsqueda, esta se suspendió al hacerse responsable Marruecos de la operación.

Los cuerpos de al menos seis subsaharianos aparecieron en las costas de España, entre ellos el de la marfileña Larissa, compañera de viaje de Veronique y Samuel. Pero Veronique, la supuesta madre del menor que ha aparecido en las playas de Barbate, continúa desaparecida.

Rafa Lara, de la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía, denunció que la Subdelegación del Gobierno había ocultado la información del hallazgo del menor “pese a que se encontró el viernes, y la información no se comunicó hasta el domingo”. El subdelegado del Gobierno, Agustín Muñoz, sí habló del suceso el viernes 27 en la visita a dos pueblos afectados por el temporal.

La APDHA cree que es “sorprendente y denunciable” que no hubiera ningún comunicado hasta el domingo.

Caminando Fronteras, por su parte, cree que España “no lo ha ocultado, sino que al tratarse de un menor no ha querido difundirlo en medios, por respeto a las familias que lo están pasando muy mal”, ha detallado Helena Maleno, portavoz de la ONG. Maleno explica que, desde la aparición del pequeño, se han mantenido en contacto con las autoridades españolas, que ya cuentan con el listado de familias y están colaborando con el objetivo de identificar el cuerpo.

El secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto, ha asegurado este lunes en una rueda de prensa que “se va a hacer toda la investigación” sobre el hallazgo del cuerpo sin vida del menor, según informa Europa Press.

En relación al hecho de que el cadáver se encontrara el viernes y no se comunicara hasta el domingo, el número dos del Ministerio del Interior ha aseverado que no tiene constancia, “pero en cualquier caso, los trámites que se seguirían son los que establece la ley”.“Habrá garantías que preservar durante el tiempo, son los profesionales los que saben cuándo se tiene que dar a conocer y qué cosas se tienen que realizar en ese trámite”, ha respondido Nieto.

La APDHA y asociaciones locales van a mostrar su repulsa y condena ante esta “continua tragedia y la indiferencia” con una concentración este martes 31 ante el Ayuntamiento de Barbate a las 7 de la tarde.

RECTIFICACIÓN. Una primera edición de esta noticia llevaba el titular: “El Gobierno ocultó durante dos días la noticia del hallazgo del cadáver de un inmigrante en una playa de Cádiz”. La información no era correcta, porque el subdelegado del Gobierno, Agustín Muñoz, habló del suceso el viernes 27 en una visita a Conil de la Frontera y Vejer de la Frontera a causa del reciente temporal. En un encuentro con la prensa local, Muñoz informó que ese día había aparecido muerto “un menor de aproximadamente seis años” y que el fallecimiento se produjo “hace una semana o semana y media”. La hipótesis que se manejaba era que tuviera que ver “con aquellos cadáveres que aparecieron el 13 y 14 de enero”.

La APDHA mantiene su denuncia con el argumento de que el gobierno no hizo público ningún comunicado y que la información se trató de ocultar: “El domingo nadie lo sabía. Si lo ha dicho (el subdelegado) ha sido en un pueblo de Cádiz a saber con qué audiencia”, ha dicho Rafael Lara. “Es un modo de tratar de que no se difunda la noticia”. Lara comenta que “medios nacionales llamaron a Subdelegación y no le confirmaron la noticia”.