Un total de 17 refugiados sirios, entre ellos cinco menores, han muerto este domingo al hundirse su embarcación en aguas turcas del Egeo cuando se dirigía hacia Grecia, según han informado las autoridades turcas. La barca, de ocho metros de eslora y con 37 personas a bordo, naufragó al poco de partir de las cercanías de la localidad turística turca de Bodrum, según indicó a la prensa Amir Çiçek, gobernador de la provincia de Mugla, donde se encuentra esa ciudad.
Los guardacostas turcos rescataron los cadáveres de 17 personas, mientras que los 20 supervivientes pudieron salvarse al llegar a nado a la isla turca de Çavusadasi, situada a unos tres kilómetros de la península de Bodrum.
Según la agencia de noticias Dogan, las víctimas se ahogaron al no poder salir de la cabina de la embarcación, mientras que los supervivientes, que estaban en la cubierta y contaban con salvavidas, pudieron arrojarse al agua y alcanzar tierra firme. “Treinta y siete personas subieron a una embarcación de ocho metros de largo. Los guardacostas rescataron a 20 personas y ha encontrado los cuerpos de 17”, ha asegurado Çiçek.
El gobernador señaló en un primer momento que la embarcación se dirigía a la cercana isla griega de Kos, pero el testimonio de los supervivientes indica que el destino era la isla de Leros, situada a más de 40 kilómetros de la costa turca.
Este sábado la Guardia Costera turca interceptó dos embarcaciones con un total de 31 refugiados sirios y afganos que se dirigían a Kos, a unos cinco kilómetros de Turquía.
En lo que va de año los guardacostas turcos han rescatado a más de 53.000 personas, aunque no pudieron evitar que otras 274 muriesen tratando de llegar a Grecia, según el diario Sabah.
Más de 488.000 refugiados e inmigrantes han llegado en 2015 a Europa a través del Mediterráneo, mientras que 2.873 han muerto en el intento, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). La mayoría sigue llegando a Grecia, por donde han entrado aproximadamente 257.000 personas, de las que 175.000 son sirios.