El actor estadounidense Richard Gere ha visitado el barco del Open Arms para mostrar su apoyo a las 121 personas rescatadas que se encuentran bloqueadas en el Mediterráneo Central desde hace una semana. “No estáis solos”, reza una pancarta desplegada en el yate en el que se ha trasladado al buque humanitario.
A iniciativa propia, el cineasta, que se encontraba de vacaciones en Italia, viajó este jueves a la isla de Lampedusa con el objetivo de apoyar a la ONG Open Arms, cuyo buque humanitario lleva más de una semana abandonado en alta mar sin un puerto donde desembarcar. Gere ha visitado al barco junto con el presidente de la organización, Óscar Camps, con el objetivo de llevar víveres para la tripulación y los pasajeros.
Open Arms espera desde la semana pasada cerca de la isla italiana de Lampedusa (sur de Italia), hoy a unas 29 millas (unos 50 kilómetros) a que se le asigne un puerto seguro para poner a salvo a 121 inmigrantes rescatados en el mar en dos operaciones distintas.
El actor se encuentra en la cubierta del Open Arms conversando con las personas rescatadas. “Este es mi hijo. Tiene seis meses”, le ha contado Gere a un hombre señalando al bebé que guarda entre sus brazos mientras le muestra la foto de su hijo.
Tras ocho noches en alta mar, la tripulación trata de hacer más amena la estancia a las personas rescatadas, buena parte de ellas víctimas de tortura y abusos a su paso por Libia. La música y el cariño ha marcado la mañana de su octavo día en alta mar, con el objetivo de evitar que la frustración de la incertidumbre haga mella a bordo del Open Arms.
El primer rescate fue el jueves, cuando fueron salvados 55 inmigrantes, entre ellos dos bebés mellizos y una mujer embarazada, justo cuando su embarcación estaba “a punto de naufragar, segú la ONG, Óscar Camps. El segundo se dio en plena noche del viernes y fueron socorridas y acogidas a bordo 69 personas. Desde entonces, sólo tres mujeres, dos de ellas embarazadas, han sido evacuadas a Italia.
Destde entonces, Italia y Malta se niegan a abrir sus puertos a los migrantes rescatados. Por su parte, ningún país europeo se ha ofrecido a acoger una parte de los migrantes a bordo de cara a un posible acuerdo que facilite el permiso de entrada a los puertos más próximos.
España, el Estado de bandera del buque, se ha negado a solicitar a la Comisión Europea la coordinación del mecanismo de desembarco: “No tenemos por qué hacerlo”, ha dicho la vicepresidenta Carmen Calvo. Por su parte, además de al Gobierno español, la ONG ha solicitado su intervención ante Bruselas a Francia y Alemania, que por el momento no han respondido.