El Tribunal Supremo de Estados Unidos falló este viernes a favor de la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo en todo el país, una decisión histórica que anula la capacidad de los estados para prohibir las uniones entre homosexuales.
La máxima instancia judicial de Estados ha declarado inconstitucional la prohibición del matrimonio de parejas homosexuales, con el respaldo de la igualdad de todos los ciudadanos ante la ley que reconoce la Constitución de Estados Unidos.
La decisión de los nueve jueces que conforman el Alto Tribunal se dirimió por cinco votos a favor de la legalización y cuatro en contra.
En la actualidad, 36 estados del país tienen leyes que permiten el matrimonio entre personas del mismo sexo. De esta manera y desde hoy, el matrimonio homosexual es un derecho constitucional en Estados Unidos, obligando a los catorce estados del país que aún lo prohibían a permitir que las personas del mismo sexo puedan unirse legalmente.
El fallo no entrará en vigor de inmediato, porque la Corte, máxima instancia judicial del país, otorga al demandante que ha perdido el caso aproximadamente tres semanas para solicitar una reconsideración.
El caso analizado la decisión judicial aludía a los estados de Kentucky, Michigan, Ohio y Tennessee, donde se define el matrimonio como la unión de un hombre y una mujer. Esos estados no han permitido que las parejas del mismo sexo se casen dentro de sus fronteras y también se han negado a reconocer los matrimonios válidos en otros estados del país.
Hace apenas dos años, la Corte Suprema anuló parte de la ley federal contra el matrimonio gay, que negaba una serie de beneficios gubernamentales para las parejas del mismo sexo que habían contraído matrimonio legalmente.
Cientos de personas se han agolpado en las inmediaciones de la Corte Suprema, en el centro de Washington, para celebrar la decisión de los jueces.
El Gobierno del presidente de EEUU, Barack Obama, había respaldado abiertamente su postura a favor del matrimonio homosexual después de que, por primera vez, el propio mandatario declarara su apoyo al mismo en 2012. Su primera reacción ha sido a través de las redes sociales para celebrar el fallo.
“Las parejas gays y lesbianas tiene ahora el derecho a casarse, como cualquier otras. #LoveWins (el amor vence)”, ha dicho Obama en un mensaje publicado en su cuenta de la red Twitter.
La decisión del Supremo era esperada por muchos sectores de la población que exigían la igualdad de derehos de los homosexuales. Según una encuesta de publicada a principios de junio por el centro de investigación Pew, el 57% de los estadounidenses apoya el matrimonio entre personas del mismo sexo, un récord histórico en un país donde hace tan solo cinco años había más ciudadanos en contra que a favor de estas uniones.
La cuenta de Twitter de La Casa Blanca (@WhiteHouse) ha cambiado inmediatamente su avatar de la red social por un dibujo de la casa blanca teñida por la bandera del arco iris.