Lo que se ve:
1. Se ve cómo antes de que amanezca un grupo muy numeroso y coordinado de personas baja corriendo la loma en terreno marroquí que desemboca en la frontera de Ceuta y se dirige por un pasillo al puesto fronterizo con intenciones evidentes de cruzar a España. Caen objetos sobre ellos [entre el minuto 1'33“ y 1'41”], justo cuando más entrecortada está la edición.
2. Se ve que los inmigrantes llevaban flotadores puestos en la cintura desde el primer momento. Esto desmonta otra mentira oficial: el director de la Guardia Civil dijo el pasado sábado que era imposible que sus agentes pincharan nada disparando al agua con bolas de goma, como han sostenido los inmigrantes, porque "los inmigrantes no llevaban ni manguitos ni flotadores".
3. Se ve cómo, una vez que es de día, y cuando los ánimos están claramente ya calmados y los inmigrantes se retiran, hay un grupo –en la imagen no son más de 10 de los 400 que había en la zona– que hace intentos de alcanzar lanzando piedras la zona española.
4. Se ve que hay al menos cierta coordinación entre la policía marroquí y la Guardia Civil. Los agentes marroquíes hacen señas desde su terreno hacia la parte española [2'26“].
Lo que no se ve:
1. No se ven los códigos de tiempo, ni las horas de grabación del vídeo. Es una información relevante para saber, por ejemplo, cuánto tiempo hay entre los planos de la llegada y los planos de las piedras.
2. No se ve el uso confirmado de material antidisturbios por parte de la Guardia Civil por parte de la Guardia Civil. No se ve si sucede únicamente dentro de terreno español ni se ve qué tipo de material usaron, ni se ve si lo usaron contra el cuerpo de los inmigrantes o sólo dispararon al aire.
3. No se ve qué pasa en el minuto 1'33“, cuando la policía marroquí (casco blanco, vestimenta verde, chaleco reflectante) comienza a cargar con porras contra los inmigrantes. La cámara, manejada manualmente desde el puesto de control fronterizo español, se desvía inmediatamente, pero hay un frame que se le escapa al montador del vídeo:
4. No se ve si los inmigrantes salen del pasillo fronterizo antes de que la policía marroquí cargue de nuevo contra ellos, como se ha publicado.
5. No se ve en qué momento ni cómo acceden los inmigrantes al agua (a la izquierda de las imágenes) ni en qué condiciones de hostigamiento o coordinación.
6. No se ve el momento en que más de 10 personas mueren ahogadas o aplastadas intentando cruzar.
7. No se ve de qué manera cumple la Guardia Civil los protocolos humanitarios que fija la ley. Tampoco cómo hacen las devoluciones inmediatas al terreno marroquí que muestran otros vídeos.
En la teoría de la comunicación audiovisual está bien descrito el Efecto Kuleshov: la percepción del público de cualquier imagen está condicionada por lo que sus ojos hayan visto justo antes, hasta el punto de que el significado cambia por completo.
En este caso, la imagen final del grupo de inmigrantes lanzando piedras no produce el mismo efecto sobre el que la mira si inmediatamente antes está la de la carrera de cientos de personas hacia la frontera, como es el caso, que si hubiera estado la de las condiciones en que murieron al menos 10 personas. Justo lo que el montaje de Interior no enseña.