La adhesión voluntaria al expediente de regulación de empleo (ERE) planteado por MasOrgange solo había sumado hasta este domingo a un total de 217, muy lejos de los 650 empleados de los que pretende deshacerse la compañía. Esto supone una adscripción del 33,34%, mientras el plazo de adhesión, terminará este miércoles, 6 de noviembre, según han informado a Europa Press fuentes sindicales.
A mediados de octubre, la empresa cerró con UGT y Fetico el acuerdo para un ERE que afectará a 650 personas en MasOrange, la compañía de telecomunicaciones fruto de la fusión de Orange y MásMóvil. Esta decisión no contó con el respaldo de CCOO, que rechaza las condiciones pactadas y considera que no iba a ser “estrictamente voluntario”.
MasOrange comunicó el pasado 3 de septiembre su intención de plantear esta medida para un máximo de 795 trabajadores, al detectar “duplicidades organizativas” tras la integración de las plantillas de Orange y MásMóvil. No obstante, en el transcurso de la negociación con los sindicatos, se redujo esa cifra hasta los 650 y se ofrece la posibilidad de prejubilaciones y bajas incentivadas.
Este ERE afecta a seis sociedades del grupo: Orange Espagne, Orange España Comunicaciones Fijas, Xfera Móviles, Lorca telecom Bidco, R Cable, Telecable y Euskatel, operador vasco que fue adquirido por MásMóvil en 2021.
El presidente del comité de empresa de Euskaltel, Javier de Blanco (CCOO), ha denunciado que, entre las personas que se han acogido al ERE, ya hay algunos que son “voluntarios forzosos”. A su juicio, el hecho de que solo se haya alcanzado, hasta ahora, esa cifra es reflejo de que las condiciones establecidas no han invitado a los trabajadores a sumarse de manera voluntaria al ERE. El representante de CCOO, que cree que el ERE se va a acabar “completando con forzosos”, ha indicado que no tienen el desglose de las personas que se han acogido en los distintos centros y, por tanto, desconoce la cifra exacta de trabajadores que se han adherido al ERE en Euskaltel.
Por su parte, desde UGT han manifestado que las adhesiones voluntarias al ERE hasta el momento están “alejadas de las expectativas de la empresa” y que “responden tanto al descontento de la plantilla como a la campaña emprendida por CCOO, como sindicato no firmante, que ha apostado su crédito político a que, como han afirmado, este sea un despido colectivo mayoritariamente forzoso”.
Por ello, UGT ha mostrado su deseo de que haya una incorporación “importante” a la voluntariedad, en el momento en que se demuestre la “falta de coherencia de este sindicato (en referencia a CCOO), ya que mientras hace campaña contra la voluntariedad y el ERE, tres de los cinco miembros permanentes de la mesa negociadora han ratificado su peticiones de adscripción a las condiciones pactadas”. “Esta actitud incongruente se ve reforzada por la adscripción de una delegada que también formó parte de la mesa”, ha agregado UGT.