Glovo sugiere a sus repartidores que recurran el alta de la Seguridad Social tras una actuación de la Inspección de Trabajo en Barcelona
- La compañía envía correos a sus trabajadores solo un día después de sufrir su primera derrota en los tribunales, con una sentencia que declara falso autónomo a un mensajero en Madrid
El cerco de la Inspección de Trabajo sobre Glovo se intensifica. La empresa catalana de repartos a domicilio ha mandado correos electrónicos este jueves a sus repartidores en Barcelona en los que les informa de que la Tesorería de la Seguridad Social les habrá anunciado su “alta en la Seguridad Social a cuenta de Glovoapp23 SL”, pero les avisa de que la compañía está en desacuerdo con esa decisión y va a impugnar las altas “para que sean anuladas”. La empresa recuerda a los mensajeros que “están en pleno derecho de impugnar el alta individualmente (es decir, que tú, personalmente, rechazas su validez)”. La compañía envía los emails solo un día después de sufrir su primera derrota en los tribunales, con una sentencia que declara falso autónomo a un mensajero en Madrid.
Según los mensajes a los que ha tenido acceso eldiario.es la investigación de la Inspección de Trabajo cubriría, como mínimo, desde marzo de 2016 hasta la actualidad. Ese mes de marzo es el primero que figura en las comunicaciones de alta de la Seguridad Social de varios repartidores a las que ha tenido este medio, en las que la Administración les informa vía SMS de su inclusión en el Régimen General.
Carlos (nombre ficticio) fue repartidor de Glovo “un año y ocho meses”, hasta que le 'desconectaron' a mediados de 2017, como denominan en el sector cuando la plataforma les extingue el contrato. Este jueves ha recibido dos mensajes de la Seguridad Social: de alta y de baja en la empresa catalana, desde junio de 2016 hasta que dejó la compañía. El mensajero va a acercarse a una oficina de la Seguridad Social para preguntar por qué no se le ha incluido todo el periodo trabajado: “No sé si es un error”.
Fuentes de Glovo explican a eldiario.es que la Inspección todavía no les ha notificado las actuaciones que está llevando a cabo, pero que “varios colaboradores les habían informado que había recibido un mensaje de la Seguridad Social”. Aunque han mandado el correo electrónico con el nombre del trabajador, desde Glovo aseguran que no saben determinar a cuántos mensajeros han enviado la comunicación sobre la postura de la compañía. “No estamos de acuerdo con la posición de la Seguridad Social porque no se ajusta a nuestro modelo de negocio. Por este motivo impugnaremos la decisión y les decimos a los colaboradores que también lo pueden impugnar ellos personalmente”, sostienen.
Carlos no se plantea impugnar el alta porque considera que existe una relación laboral entre la empresa y los mensajeros. En breve, apunta, habrá juicios en la ciudad condal de trabajadores que han denunciado su condición de falsos autónomos y “vamos a hacer ruido”. En su opinión, no cree “que nadie vaya a impugnar”, apunta, “la gente sabe cómo es Glovo y a lo mejor de un día para otro se quedan en la calle sin ningún derecho”.
Oriol Alfambra, miembro de RidersxDerechos y el sindicato IAC (Intersindical Alternativa de Catalunya), puntualiza que el aviso automático del alta por parte de la Seguridad Social a los repartidores “ya ha ocurrido en Barcelona con Deliveroo antes y es consecuencia de la investigación de la Inspección de Trabajo. Ahora están dando de alta a repartidores de Glovo, como pasó en Zaragoza y Valencia”. Además, DiarioSur informó de que la Inspección también estaba dando de alta a mensajeros de Glovo en la ciudad de Málaga.
Alfambra subraya la relevancia de las comunicaciones de alta de la Seguridad Social. “Esto muestra que la Inspección está llegando al final del proceso de la investigación a Glovo en Barcelona. En los otros casos, al final del proceso, se ordena de oficio a la Seguridad Social que haga las altas de los trabajadores que ha dictaminado que son trabajadores y no autónomos. Las altas de ahora significan que el informe de la Inspección va a salir en breve”.
Esta resolución de la autoridad laboral no será la primera sobre Glovo en la ciudad condal. En el debate sobre su modelo laboral, la empresa siempre se aferra a que la Inspección de Trabajo en Barcelona validó su negocio basado en repartidores autónomos en 2016.
Glovo sugiere ahora a los repartidores que ellos mismos impugnen el alta en la Seguridad Social ya que el Gobierno socialista impidió con una modificación legal que las empresas pudieran dar de baja a los trabajadores cuando la Inspección ordenaba el alta de oficio tras concluir que eran falsos autónomos. Esta práctica, recuerda Mercedes Martínez Anso, portavoz de la Unión Progresista de Inspectores de Trabajo (UPIT), era muy común en el caso de la industria cárnica.
Martínez Anso explica que, cuando la Inspección da de alta de oficio a un trabajador, la empresa solo le podrá dar de baja “tras solicitar un informe a la Inspección, no puede ser inmediato, y será la Inspección la que determinará si procede o no dar la baja”.
La portavoz de UPIT subraya además que el pasado diciembre el Ejecutivo aprobó una nueva infracción por “comunicar la baja en un régimen de la Seguridad Social de trabajadores por cuenta ajena pese a que continúen la misma actividad laboral o mantengan idéntica prestación de servicios, sirviéndose de un alta indebida en un régimen de trabajadores por cuenta propia”. Es decir, que Glovo no podría dar de baja como asalariado a un mensajero y que esta persona se dé de alta de nuevo como autónomo para cumplir con las mismas funciones.