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Los abusos sancionados en los almacenes de Primor: cesión ilegal, temporales en fraude, horas extra sin pagar

Ilustración sanción al almacén de Primor.

Laura Olías

21 de agosto de 2023 22:25 h

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La ristra de infracciones laborales detectadas en China Red SL, almacenes proveedores de las perfumerías Primor, va mucho más allá de vulnerar la dignidad de sus trabajadores obligándoles a coserse los bolsillos para evitar “robos”. Tras más de dos años desde el inicio de las pesquisas de la Inspección de Trabajo, la autoridad laboral de la Junta de Andalucía ha impuesto a la compañía –en manos del imperio familiar de Primor– una multa de más de 1,7 millones de euros por numerosos abusos laborales, gran parte de ellos “muy graves”, según la documentación a la que ha tenido acceso elDiario.es.

Además de esa sanción de 100.006 euros por vulnerar la dignidad de los trabajadores, considerada muy grave y en su grado máximo, como adelantó este lunes elDiario.es, la lista total de irregularidades suma un total de 1.742.512 euros de multa.

Sobre todo, por abusos salariales y en las modalidades de contrato, como multitud de empleados temporales fraudulentos y una cesión ilegal de trabajadores generalizada a través de subcontratas.

“En cuanto te sale algo, te vas de ahí. Hay muchísima rotación de trabajadores por las condiciones y por el trato. Solo aguanta más la gente mayor, que tiene miedo a que no le salga otra cosa, o los jóvenes que están empezando, sobre todo sin estudios”, cuenta un trabajador que estuvo más de dos años empleado en distintas empresas que trabajan para Primor.

China Red va a recurrir la sanción ante los tribunales, ya que niega “rotundamente” las infracciones detectadas, ha explicado a elDiario.es un representante legal de Juan Ricardo Hidalgo Domínguez, consejero delegado de Primor y que respondió ante la Inspección como “apoderado” de la empresa, según la documentación a la que ha tenido acceso este medio.

La empresa desmiente las irregularidades constatadas por la autoridad laboral, pero en cualquier caso –“de haberse hecho”– señalan a las múltiples empresas subcontradas que operan en el almacén, negando la responsabilidad de China Red y sobre todo de Primor. Más allá del activo papel del CEO de las perfumerías en el expediente sancionador, el administrador único y máximo accionista de China Red es su padre, Juan Ricardo Hidalgo Aguilera, anterior cabeza de la empresa familiar malagueña.

Los vínculos familiares y empresariales, que se comunican en una gran maraña de empresas tras las perfumerías Primor, queda reflejado en una “anécdota” de una de las visitas de los inspectores al almacén de Málaga. Dentro de la nave, en la zona cercana a la garita de control, observan a un hombre “realizando tareas de limpieza de un coche, marca Porsche”.

Preguntado por su categoría profesional, se trataba de un mozo de almacén, al que “le han indicado que proceda a la limpieza del coche propiedad” de Estefanía Salazar Ramírez, “actual cónyuge del Sr. Hidalgo Domínguez” y “administradora única de la mercantil LADY MACAN S.L. que posee una tienda que gira bajo la marca PRIMOR y de alta como empleada en diversas sociedades también poseedoras de tiendas que operan bajo dicha marca”.

En la empresa defienden que se trata de una “persecución” de un inspector, al que intentaron recusar sin éxito en varias ocasiones. La misma estrategia que repitieron contra otros dos empleados del organismo público vigilante de la legalidad laboral que participaron en las pesquisas y que también fueron respaldadas por la Inspección de Trabajo. Contra todos ellos, la empresa además emprendió acciones legales, dice la defensa de Juan Ricardo Hidalgo Domínguez.

Cesión ilegal de trabajadores

La multa más cuantiosa corresponde a 1,46 millones de euros de sanción por cesión ilegal de trabajadores con una docena de empresas, a través de las que China Red subcontrata a la mayoría de los empleados del almacén. Estos relataron a los inspectores que “periódicamente les cambian de la empresa enterándose, en ocasiones, con posterioridad al cambio”, por ejemplo, a través de SMS de la Tesorería de la Seguridad Social. Sus tareas no cambiaban, ni tampoco la organización del trabajo en la nave.

Uno de los trabajadores entrevistados afirmó a los inspectores desconocer la empresa en la que estaba contratado en ese momento y uno de los jefes de la nave dijo no conocer una compañía por la que le preguntaban los actuantes, la misma en la que estaba dado de alta, según el acta a la que ha tenido acceso este medio.

“Antes de la reforma laboral te hacían contratos por seis meses y cuando pasaba un tiempo te cambiaban de empresa, te van pasando de unas a otras, todas vinculadas a Primor”, dice a elDiario.es un exempleado en la nave de China Red en Málaga, que muestra su vida laboral en la que figuran cuatro compañías distintas en menos de tres años.

Los inspectores desgranaron una estrategia de subcontratación a varios niveles, con empresas intermediarias entre China Red y la docena de contratas finales (empleadoras en última instancia del personal), que “solo tiene como finalidad la de eludir responsabilidades de índole laboral”.

Concluyen que la compañía sancionada era la verdadera empleadora y organizadora de los trabajadores (al frente de las propias entrevistas de trabajo, la dirección de tareas, la organización de turnos y vacaciones, por ejemplo) mientras el resto de compañías cumplen la mera función de poner los empleados a disposición del almacén de Primor.

Se trata de una práctica irregular, como prevé el artículo 43 del Estatuto de los Trabajadores, que se denomina cesión ilegal de trabajadores y que los inspectores recuerdan que suele tener consecuencias como, “entre otras, la degradación de las condiciones de trabajo o la disminución de las garantías cuando aparecen empleadores ficticios insolventes”.

El acta de infracción destaca que la interposición de varias empresas buscaba que respondan estas –“con nula solvencia patrimonial– y no la empresa que realmente recibe los servicios de las doce cedentes, esto es, CHINA RED S.L.”. La sanción incluye una multa por cada una de las doce subcontratas irregulares, de entre 100.006 euros y 150.000 euros.

El abogado del CEO de Primor, Juan Ricardo Hidalgo Domínguez, afirma que “los Juzgados de lo Social vienen dando la razón sistemáticamente y sin excepción a China Red” respecto a supuestas denuncias de cesión ilegal, por lo que confían en que su recurso a la multa prospere.

Con el mismo argumento y una sentencia de ejemplo, la empresa alegó en contra de la propuesta de esta sanción laboral, que la Viceconsejería de Empleo andaluza rechazó. “La sentencia se pronuncia sobre si existe un grupo de empresas fraudulento, pero nada establece acerca de la posible cesión ilegal de los trabajadores”, apunta la resolución a la que ha tenido acceso este medio.

Salarios inferiores, finiquitos y horas extra sin pagar

Los abusos alcanzan también al bolsillo de los trabajadores, con múltiples incumplimientos en uno de los deberes básicos del empresario: el pago por el trabajo realizado. La Inspección constata sueldos por debajo del salario mínimo interprofesional –en 2020, algunos trabajadores seguían recibiendo el de 2019– y de manera generalizada el abono de salarios inferiores a lo debido, fruto de aplicar el convenio del comercio minorista en el almacén, en lugar del comercio al por mayor que correspondería.

Los inspectores calculan las cantidades adeudadas a la plantilla, con nombres y apellidos, con casos en los que se alcanzan cientos de euros por persona.

También se sanciona el impago de las horas extraordinarias de trabajo, que no eran compensadas en salario ni tampoco con descanso. Aunque China Red impidió a los inspectores acceder al registro obligatorio de la jornada laboral, pese a las visitas al almacén de Málaga y los continuos requerimientos, los trabajadores declararon de forma mayoritaria realizar más de 40 horas a la semana, hecho que los inspectores constataron con los propios horarios del personal. Los turnos ponían horarios más amplios, hasta “41 horas y 30 minutos”.

En los interrogatorios a los trabajadores queda reflejado que, en general, los mozos del almacén de Primer descansaban un día completo a la semana excepto durante la campaña de Navidad, cuando declararon que trabajaban todos los días. Siete de siete, sin parar.

“Durante el mes de diciembre y hasta, al menos, el 5 de enero siguiente, periodo en el que, según declaran los trabajadores de manera abrumadora, se trabajan los siete días de la semana excepto el 25 de diciembre y el 1 de enero”, recoge el acta de infracción. Una exempleada del almacén explica que el personal se ve forzado a hacer horas extra en la campaña más fuerte para las perfumerías: “Porque si no lo hacías, en enero ya no contaban contigo”.

China Red incumplía también de manera mayoritaria el pago de los finiquitos e indemnizaciones al término de los contratos de los trabajadores y, en algunos casos, un pago inferior al que correspondería. La Inspección cuenta como afectados a “127” personas en un periodo en el que la empresa tuvo en plantilla a “193” empleados. Cabe destacar que China Red ni siquiera negó los hechos ante la Junta de Andalucía y apuntó que las cantidades eran “pequeñas”.

Con agravantes por el alto número de trabajadores afectados por los abusos, así como por las cifras de negocio del almacén de Primor,  de 341 millones en 2020, la autoridad laboral impone 90.000 euros de multa por el pago de salarios inferiores a lo debido, otros 70.000 euros por las horas extra sin pagar ni compensar con descanso y 3.000 euros más por el impago de indemnizaciones. El almacén de Primor declaró beneficios de 5,3 millones de euros en 2021, según sus últimas cuentas anuales.

Temporales fraudulentos

La Junta de Andalucía también impone a China Red otros 6.000 euros de multa por “fraude en la contratación temporal”. Se constatan los contratos temporales mayoritarios en la nave, del “76,5%” en el periodo analizado, que no están justificados por ninguna tarea temporal específica y que llevan a la autoridad laboral a incorporar hasta cinco agravantes a la sanción.

Entre ellos, “la intencionalidad del sujeto infractor”, al incumplir la compañía requerimientos expresos sobre diez trabajadores, a los que se siguió contratando como temporales.

De nuevo, China Red no negó los hechos en el procedimiento administrativo, aunque intentó rebatir los agravantes para atenuar la multa. Por ejemplo, la empresa apuntó que “no se constata el perjuicio causado, ya que no se demuestra que los trabajadores hayan disfrutado de peores condiciones laborales que si hubiesen tenido la condición de indefinidos”. La Inspección indica que los trabajadores podían estar “durante años” ligando contratos temporales de supuestas campañas.

La autoridad laboral rechaza los argumentos de la empresa. Recuerda al almacén de Primor que ha privado a los empleados temporales “de los beneficios de otorgarles la condición de trabajadores fijos”, como las consecuencias de los contratos indefinidos “y su régimen indemnizatorio, netamente superior al de los contratos de trabajo temporales o, cuando se han producido varias contrataciones sucesivas, no computar la antigüedad en la empresa”, por ejemplo.

Hasta el total de 1,7 millones de multa, se incorporan otros 3.000 euros de sanción por no tener libro de subcontratación y 4.500 euros por no entregar a los trabajadores con contrato parcial su copia del registro de jornada. Además, en otro expediente, la Junta de Andalucía sanciona a China Red por “obstrucción a la labor inspectora”, infracción calificada como “muy grave” y que supone otros 65.000 euros de sanción económica a la compañía.

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