Coca-Cola Iberian Partners ha presentado este miércoles a los sindicatos el despido de 750 trabajadores y la recolicación de otros 500 dentro de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) y ha comunicado el cierre de cuatro de sus once plantas en España, las de Fuenlabrada (Madrid), Alicante, Palma y Colloto (Asturias), según informó la compañía.
La multinacional, que cuenta con una plantilla en España de 4.200 trabajadores, lleva así a cabo un ERE que afectará a 1.250 empleados.
Coca-Cola Iberian Partners ha subrayado en un comunicado que la nueva organización corporativa está orientada a “eliminar duplicidades e ineficiencias y unificar criterios” en las actividades y procedimientos que se realizan en el grupo.
La empresa ha explicado que en el ámbito productivo se estructurará con arreglo a un nuevo mapa circular, racionalizando así las plantas del Norte de España y de la zona de Levante y Baleares, y capturando sinergias en la zona centro.
Este nuevo modelo industrial que califican de “más eficiente” implicará el incremento de la producción y de la plantilla en siete de las once plantas de producción, como son las de A Coruña, Bilbao, Barcelona, Málaga, Sevilla, Santa Cruz de Tenerife y Valencia.
Pero el proceso de reestructuración conllevará a su vez el cierre de las plantas situadas en Fuenlabrada (Madrid), Alicante, Palma de Mallorca y Colloto (Asturias).
Los trabajadores anunciaron paros
El sindicato Comisiones Obreras anunció hace una semana que iniciarían paros e impugnaciones contra el ERE de Coca-Cola si la compañía finalmente se decidía a dar el paso. Desde el sindicato aseguraron que presentarían “forma inmediata” un conflicto colectivo en el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA) previo a la convocatoria de paros como medida de presión para defender el empleo y las condiciones de trabajo.
El sindicato advirtió de que si la empresa no acreditaba ser grupo laboral, impugnarían el ERE presentado como grupo hasta que quedase resuelto si es un grupo mercantil o laboral, ya que esta cuestión determina la legalidad del mismo.
El sindicato, además, anunció que apostaría por “reforzar la unidad sindical y de los trabajadores en general de las 'begas' ante la agresión al empleo y a las condiciones de trabajo” que plantea la compañía.