El Banco de España urde un cambio legal que le permita emitir DNI, sellos y certificados digitales
El Banco de España tiene un plan para arrebatar más competencias a la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre, después de haberle arrebatado en 2015 la emisión de los billetes de euro. Lo ha puesto por escrito en una propuesta de modificación legislativa que ha remitido al Ministerio de Economía y Hacienda y en la que el regulador bancario plantea que la sociedad mercantil que controla con el 80% de sus acciones, Imprenta de Billetes SA (Imbisa), pueda asumir otros trabajos distintos a la emisión de papel moneda.
La redacción de la ley que plantea el Banco de España facultaría a la nueva empresa –creada supuestamente para dar cumplimiento a una normativa europea– a asumir trabajos que viene realizando desde siempre la Casa de la Moneda: emisión de DNI, fabricación de chips, certificados digitales o incluso billetes para terceros países.
En el documento interno, al que ha tenido acceso eldiario.es, el Banco de España pide al Gobierno modificar la Ley 13/1994 que regula su propia autonomía e introducir una nueva disposición adicional que cambie el actual objeto social de Imbisa. En su redacción actual la ley “impide una posible actuación en el mercado o realizar otras actividades relacionadas con la fabricación de billetes”.
El regulador bancario explica así el cambio legal planteado al Gobierno: “La incorporación de actividades distintas a la producción de billetes de euro que permitiría optimizar la capacidad productiva distribuyendo los costes fijos entre un mayor volumen de actividad de impresión de billetes u otras relacionadas, al tiempo que se rentabilizarían las inversiones en nuevas instalaciones y maquinaria que tiene previsto acometer la empresa en los próximos ejercicios. La mejora de la eficiencia redundaría en una reducción de los costes de producción de billetes mejorando la competitividad de Imbisa frente a otras empresas internas”.
Imbisa nació en 2015 con un capital de 50 millones de euros y un accionariado repartido entre las dos instituciones: el Banco de España mantiene el 80% de la sociedad y el 20% restante está en manos de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre. El plan pactado es que en 2018 el regulador bancario se hará con la totalidad de esa empresa pública de carácter mercantil, que ya asumió en 2015 una parte importante de los trabajadores de la Fábrica de Moneda, y que desde entonces produce 700 millones de unidades de billetes al año.
Consultado por la propuesta de cambio legislativo, el Ministerio de Economía confirma su existencia pero niega que haya tomado una decisión todavía. Fuentes próximas al Banco de España explican que su petición “persigue ampliar las actividades de la compañía que serán complementarias a la producción de los billetes de euros y rentabilizar la futura fábrica de producción que se instalará en 2020”.
Todas las fuentes consultadas sostienen que la verdadera intención del Banco de España es meterse en el lucrativo negocio de la emisión de documentos oficiales, carnés y certificados digitales, que hasta ahora monopoliza la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre.
Desde esta institución, también evitan hacer comentarios sobre si conocían las intenciones del regulador bancario, que hasta 2018 seguirá siendo su socio en Imbisa. “La política de esta Real Casa es nunca comentar las decisiones empresariales ajenas, en este caso de Imbisa. Igualmente, tampoco podemos proporcionar datos de los productos servidos a nuestros clientes nacionales o extranjeros. No obstante, con el inicio de la impresión del billete de euro tuvimos que dedicar toda nuestra capacidad productiva al mismo”, responde un portavoz oficial de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre.
Mientras esta pierde personal, Imbisa -que se rige por el derecho privado aunque el 100% de su capital es público- tiene en marcha un nuevo plan de expansión que incluye la construcción de una fábrica a las afueras de Madrid.