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BBVA suma casi uno de cada dos despidos en la gran banca en 2020 mientras prepara nuevos recortes para este año

Un cajero del Banco BBVA.

Diego Larrouy

3 de febrero de 2021 22:40 h

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Año de transición en cuanto a empleo en el sector financiero, entre los grandes ERE de 2019 y los importantes recortes previstos para 2021. Pese a ello, son 2.355 empleados de banca los que han perdido sus puestos de trabajo a lo largo del pasado año, aunque no había grandes procedimientos de despido colectivo abiertos. Un papel protagonista en la destrucción de empleo lo ha tenido BBVA. La entidad que preside Carlos Torres terminó el pasado año con casi uno de cada dos despidos en el sector bancario en España: 953.

El grupo es conocido en el sector por no haber abierto en ningún momento durante los últimos años un ERE, algo que sí han hecho el resto de entidades bancarias del país, como Santander, CaixaBank o Bankia. El banco ha apostado por realizar salidas continuadas durante los últimos años, aunque ha acelerado en 2020. En 2019 salieron 55 empleados; en 2018, 246; y en 2017, 867. El consejero delegado del banco, Onur Genç, explicó en otoño en la presentación de resultados del tercer trimestre que estas salidas obedecen a una “gestión dinámica” de la plantilla de la entidad. Teniendo en cuenta el conjunto de los mercados en los que opera BBVA, el recorte de empleo ha sido en el año 2020 de 3.799 puestos de trabajo.

El banco ha soliviantado en los últimos días a los sindicatos por la gestión de los recortes de plantilla. Todo comienza cuando la pasada semana, en la presentación de resultados del año completo de 2020, Genç informa, primero a analistas y luego a la prensa, de que la entidad prepara un plan de ajuste de costes que afectará, principalmente, a los servicios centrales y a la filial en España, un mensaje que se entiende como un recorte de plantilla y de sucursales. “Estamos comprometidos con ajustar la estructura de costes, analizamos todas las alternativas y definiremos un plan que empezará en la primera mitad del 2021”, señaló Genç, quien apuntó que todavía era pronto para dar detalles porque no estaba desarrollado.

Este anuncio levantó la incomodidad en los representantes de los trabajadores y CCOO, primer sindicato del banco, emitió un comunicado a la plantilla preguntándose: “¿Se plantean una reestructuración y la plantilla debe enterarse por la prensa?”. “Sus declaraciones han causado una profunda preocupación en el personal, especialmente castigado por todo lo ocurrido en 2020 y que ha respondido y está respondiendo, dando la cara por el banco”, señalaba la nota. “Hacer este tipo de declaraciones a la prensa sin haberlo comunicado previamente a la Representación Legal de los Trabajadores, es un desprecio hacia lo que representan las personas que conforman la plantilla de BBVA”, concluía.

El otro banco que ha hecho un recorte relevante en su plantilla en España durante 2020 ha sido Banco Santander. La entidad, que este miércoles ha presentado unas pérdidas históricas de más de 8.000 millones de euros, cerró el año de la pandemia con 669 trabajadores menos que al cierre de 2019. La entidad hizo hace dos años un ERE tras la integración con Banco Popular para 3.200 empleados y acordó con los sindicatos al cierre de 2020 otro para 3.570 empleados, con las salidas produciéndose durante los próximos meses.

La presidenta de la entidad, Ana Botín, ha señalado este miércoles que el recorte de plantilla se ha producido por adaptarse a “lo que piden los clientes”, que demandan más atención por los canales digitales. “Si nos quedamos atrás, no seremos viables”, ha enfatizado. En el conjunto de los mercados donde opera la entidad, el recorte de puestos de trabajo ha sido de 5.230 durante el año de la pandemia. El país más afectado ha sido Brasil, seguido de Reino Unido y Estados Unidos.

Tras los dos grandes bancos se sitúan Sabadell y CaixaBank, que en 2020 han eliminado 311 y 302 puestos de trabajo respectivamente, atendiendo a los informes financieros del pasado ejercicio presentado estos días por las entidades. En el caso de Sabadell, el banco acordó con los sindicatos la salida voluntaria de 1.800 empleados de mayor edad, proceso que ya comenzó al cierre de 2020. En lo que se refiere a CaixaBank, la entidad tendrá que afrontar un fuerte ajuste de empleo esta primavera, una vez concluya la absorción de Bankia. Por el momento, este plan no está cuantificado, pero se espera que afecte a varios miles de empleados.

Las cifras son menores entre las otras dos grandes entidades españolas: Bankia y Bankinter. El banco rescatado ha cerrado su último ejercicio como entidad independiente antes de ser absorbida por CaixaBank con 85 empleados menos que en 2019. Por su parte, la entidad que dirige María Dolores Dancausa terminó el ejercicio con 35 trabajadores menos en plantilla.

Con todo esto, los seis principales bancos españoles sumaron 2.355 despidos en el último año, una cifra que, con total seguridad, será superada con creces durante el ejercicio actual. En la lista de las seis principales entidades del país entrará en unos meses Unicaja, una vez sume a Liberbank. Estos bancos suman 530 puestos de trabajo menos durante el año pasado, debido principalmente al recorte que se ha producido en la entidad andaluza.

Buena parte de los despidos se han producido al mismo ritmo que el cierre de sucursales bancarias, a medida que los bancos están acelerando el ritmo de transformación de su negocio hacia las plataformas digitales. Esta transformación se ha visto incrementada por la pandemia, con un uso muy restringido durante buena parte del año de las oficinas bancarias. Las seis principales entidades del país suman 1.224 cierres de sucursales durante el año 2020. Al igual que ocurre con el ajuste de plantilla, esta cifra será sensiblemente superior durante este año.

Todos salvo Sabadell entregarán dividendo en 2021

La presentación de resultados de la banca, que ha traído consigo el peor resultado desde la crisis financiera por las provisiones frente a la pandemia y las pérdidas históricas de Santander, ha constatado que todos los grandes bancos españoles volverán a entregar dividendo este año, dentro de las limitaciones a las que obliga el Banco Central Europeo. Todos salvo Sabadell. La entidad catalana acabó el año con un beneficio de apenas dos millones de euros y ha asumido que este año, al igual que en 2020, no entregará dividendo a sus accionistas.

Bankia tampoco entregará dividendo, ya que antes de que termine el primer trimestre del año se integrará en CaixaBank. Por tanto, los accionistas de la entidad rescatada, fundamentalmente el Estado, ya participará en el reparo de los 216 millones de euros que va a dar el grupo a sus accionistas, de los que 34 millones corresponderán al FROB.

Santander ha anunciado este miércoles, en base al beneficio ordinario del grupo que sí fue positivo, el reparto de 2,75 céntimos por acción, lo que supondría unos 476 millones de euros. Por su parte, BBVA entregará 5,9 céntimos por título, lo que suma 393 millones. Y, por último, Bankinter entregará 45 millones. Si finalmente en otoño el BCE levanta las limitaciones, alguna de estas entidades se abre a entregar un nuevo dividendo.

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