Este jueves debuta en el Mercado Alternativo Bursátil (MAB) Torbel Investment 2015, la socimi número 53 que cotizará en el mercado secundario español, destinado principalmente a empresas de pequeña capitalización o en crecimiento. Es, además, la cuarta inmobiliaria de este tipo propiedad del fondo buitre Blackstone y, en esta ocasión, estará controlada a través de las Islas Caimán.
Blackstone es el accionista mayoritario de la sociedad, ya que cuenta con el 97,83%, mientras que el resto corresponde a 20 accionistas minoritarios. Esta es una de las condiciones que tiene que cumplir una socimi para poder beneficiarse del régimen fiscal que tienen estas sociedades de inversión inmobiliaria. Sin embargo, la propiedad de Blackstone no es directa y se realiza a través de una intrincada red de sociedades.
En concreto, tal y como figura en el folleto de admisión de Torbel, ese 97,83% es propiedad de una sociedad luxemburguesa llamada Empire (SOCIMI) Holdco S.à r.l.. Esta es a su vez propiedad al 100% de Empire Pledgeco S.à r.l., que depende al 100% de Empire Topco S.à r.l. igualmente propiedad de BRE/Europe 8NQ S.à r.l. Todas estas sociedades tienen su sede en Luxemburgo.
Por último, BRE/Europe 8NQ tiene como único accionista a BREP Investment 8NQ S.à r.l., una empresa que tiene su sede en George Town, la capital de las Islas Caimán. Este país ha sido considerado un paraíso fiscal por distintas organizaciones como Oxfam Intermón. La Unión Europea lo tiene incluido en la conocida como lista gris, que está compuesta por países que, siendo fiscalmente opacos, se han comprometido a mejorar su funcionamiento.
Torbel es una sociedad creada tras la compra por parte de Blackstone de una cartera de 4.000 viviendas procedentes de Banco Sabadell. La socimi debutará en el MAB con 2.495 activos, principalmente viviendas, aunque también plazas de garaje, destinados al arrendamiento procedentes de la cartera de la entidad catalana. La inmobiliaria llega al mercado con un valor de 92,2 millones de euros a un precio de 11,45 euros por título.
La empresa está presidida por Eduardo Mendiluce, a su vez directivo de Anticipa. Ésta es la principal sociedad de Blackstone en España y dará servicios de gestión inmobiliaria a la nueva socimi. Fuentes de Anticipa señalan que aunque “el beneficiario último” está afincado en Islas Caimán, Torbel “está domiciliada en España, sujeta a la regulación e impuestos españoles, de acuerdo con la normativa fiscal”.
Islas Caimán, Delaware y viviendas sociales
No es la primera ocasión en la que Blackstone opta por las Islas Caimán para una operación de este tipo. Hace unos meses cerró la adquisición del 51% del ladrillo procedente de Banco Popular al Banco Santander. La nueva sociedad conjunta creada, Project Quasar, estaba igualmente controlada por otra firma de Blackstone, BREP Investment 9NQ LP, domiciliada también en George Town.
Las otras socimis del grupo, Fidere, Albirana y Corona Patrimonial, también cuentan en su accionariado con relaciones societarias complejas entre fondos propiedad de Blackstone. La mayoría de ellos tienen sede en Luxemburgo y alguno en Delaware, que aunque no es un paraíso fiscal, está considerado un territorio de muy baja fiscalidad.
Blackstone es una gestora de inversiones, especialmente inmobiliarias, conocida como fondo buitre, por el modelo de inversión que practica. La compañía adquirió fama en España cuando compró una cartera de más de 1.800 viviendas sociales de propiedad municipal en Madrid, entonces gobernada por Ana Botella. La operación fue realizada por Fidere, una de las socimis de Blackstone, y el actual equipo de Gobierno, dirigido por Ahora Madrid ha intentado revertirla, sin éxito.
El fondo se ha convertido en uno de los principales propietarios inmobiliarios en España, gracias a la compra de carteras de activos del sector financiero y a la reciente opa sobre Hispania, una socimi especializada en hoteles. La compañía cuenta con cerca de 18.000 millones en activos en España.
El principal directivo de Blackstone en España, Claudio Boada, presidente de Anticipa y asesor senior del fondo buitre, acudió recientemente al Congreso de los Diputados a la comisión de investigación sobre la crisis financiera. En su intervención, el directivo defendió que la gestora llegó a España “para generar riqueza” y destacó la aportación fiscal que hace en el país, pese a tener sociedades en paraísos fiscales. “Pagamos impuestos y van creciendo según vamos ampliando nuestras inversiones en España”, defendió.