La compra del City National Bank de Florida supuso para Caja Madrid pérdidas millonarias. Y su adquisición, que se produjo en 2008, en pleno estallido de la crisis, se llevó a cabo sin valoraciones independientes que la avalaran.
En una carta que envió en abril de ese año el entonces presidente de Caja Madrid, Miguel Blesa, al presidente de la Comisión de Control de la entidad, Pablo Abejas, que le había solicitado información sobre la compra del banco, Blesa reconoce que “no existe” valoración de terceros sobre la operación. Previamente, Blesa hizo llegar esa carta por correo electrónico a dos de sus colaboradores, Matias Amat y Enrique de la Torre, para que hicieran los comentarios que consideraran oportunos.
En el acta de la reunión que mantuvo el consejo de la entidad el 14 de abril de 2008, así como en varios emails, tanto Blesa como otros directivos de Caja Madrid defendieron que la compra del City era una operación que resultaría favorable para la caja. “Las razones para proponer esta inversión se basan en que Florida es un mercado atractivo para Caja Madrid; el banco es solvente y con capacidad para crecer; cuenta con un buen equipo gestor con experiencia y relación con clientes; el precio es razonable y ofrece rentabilidad y es un buen momento de entrada”, dijo Rafael Sánchez Lozano, alto directivo de la entidad, en la reunión del 14 de abril.
Durante aquel encuentro, prácticamente todos los consejeros mostraron su conformidad con la operación. Antonio Romero (PSOE) y José Antonio Moral Santín (IU) ayudaron a Blesa a convencer al resto del consejo. Fue Estanislao Rodríguez Ponga (secretario de Estado de Hacienda durante el mandato de Rodrigo Rato en el Ministerio de Economía) quien señaló la conveniencia de pedir una valoración externa, algo que Francisco Baquero –representante de CCOO– respaldó, si bien calificó la compra como “muy importante” para la imagen de Caja Madrid.
Blesa insistió en que la intervención de un tercero para contrastar la operación era “extemporánea”, ya que Caja Madrid contaba con el asesoramiento del Deutsche Bank, aunque sin un estudio formal. Finalmente, el Consejo de Administración aprobó por unanimidad la propuesta de inversión y el desembolso de 927 millones de dólares (618 millones de euros).
Un día después, el 15 de abril de 2008, Miguel Blesa enviaba varios correos en los que mostraba su satisfacción. “Es una gran operación. Esto no ha hecho más que empezar”, decía en uno de ellos. “Muchas gracias por tu felicitación. Estamos muy satisfechos con esta operación y seguros de que será un gran éxito”, señalaba en otro.
El juez Elpidio Silva, que ordenó el ingreso en prisión de Miguel Blesa por la compra del City Bank, cifró en 500 millones de euros el agujero que la operación abrió en la entidad. Silva ha dicho que precisamente “la mala gestión penal o criminal” de Caja Madrid pudo conducir al rescate bancario.
Semanas antes, mientras se gestaba la operación, el director financiero, Ildefonso Sánchez Barcoj, le escribía a Miguel Blesa para hablar del Consejo de Administración del City Bank. “Hay que poner un consejo 'potente' y el banco de España, feliz. Si rematamos con una incorporación ejecutiva hispana de nivel, miel sobre hojuelas. Esto marcha”, le decía Sánchez Barcoj.
Caja Madrid valoró otra compra en EEUU
Un año después, Miguel Blesa valoró también la compra total o parcial de una división del Mellon Bank en Florida, uno de los bancos más importantes de EEUU y competidor en Miami del City National Bank de Florida. En un correo, Carlos Martínez Martínez, directivo de Caja Madrid, le insta a analizar la operación y le informa de que han recibido la documentación facilitada por Credit Suisse sobre la posible venta. Valoraron la adquisición de 1.479 millones de dólares en depósitos, dos sucursales en propiedad y 13 en alquiler.
“Nos podrían interesar exclusivamente la compra de las oficinas y los depósitos, no así los activos. En las oficinas puede haber alguna duplicidad con Citiy Nacional Bank y se podrían ahorrar gastos al consolidar su actividad con la de City. No lo sabremos hasta recibir más información mediante la documentación sujeta al acuerdo de confidencialidad. Sus depósitos permitirán un crecimiento sustancial y consolidar la posición de City Nacional Bank en los tres condados de influencia donde está”, le dijo a Blesa en otro correo a Carlos Martínez.
La operación, finalmente, no se llevó a cabo.