El futuro bono para fomentar el alquiler entre los jóvenes no estará ligado a inmuebles cuyo coste ronde los 600 euros, como ha indicado, en un primer momento, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en la rueda de prensa en la que se han presentado los criterios generales de los próximos Presupuestos Generales del Estado.
“Va a estar acotada, también, por el precio del alquiler, en torno a los 600 euros, o sea contratos de alquiler que se suscriban en esa escala de precios”, ha asegurado Montero en Moncloa.
Una escala de precios que dejaría fuera gran parte del parque de viviendas de ciudades como Barcelona o Madrid, donde los precios del alquiler están más tensionados.
Sin embargo, fuentes del Ejecutivo matizan que el bono no tendrá esa limitación de precios. Esos 600 euros a los que se ha referido la ministra hacen referencia a las ayudas al alquiler que se incluyen en el Plan Estatal de Acceso a la Vivienda para 2022-2025. Ese límite puede ampliarse, en función de las circunstancias, hasta 900 euros.
Eso no significa que el bono al alquiler joven no tenga límites. El presidente del Gobierno ya adelantó el martes que podrían beneficiarse de él ciudadanos de entre 18 y 35 años con rentas de unos 23.000 euros.
Exigencia, tener trabajo
Montero ha precisado que el bono de 250 euros, sus detalles, no vienen contemplados en los Presupuestos, sino que estos constituyen el “paraguas legal para que el programa se pueda poner en marcha”.
“Claro que hay que tener un trabajo para poder acceder al bono de emancipación. Una de las condiciones es que la persona esté trabajando y se encuentre dentro de un dintel de cobro de unas retribuciones que se puedan considerar vulnerables en relación con el IPREM”. Es decir, con el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples, que se emplea como referencia para la concesión de ayudas o subvenciones.
“Lo que vamos a hacer es facilitar, con ese complemento, completar la parte de su sueldo que un tipo de salario de este tipo permite destinar al alquiler”, ha matizado.
Además, la ministra ha indicado que este “programa de emancipación”, cuenta con un partida presupuestaria de 200 millones de euros y que “corrige algunos de los elementos que se podían producir en iniciativas similares para que no se incremente el precio del alquiler y no haga efecto indirecto”. Esa es, precisamente, una de las críticas de los expertos a este bono, que puede tener un efecto inflacionario.
Eleva un 46% los presupuestos para vivienda
Montero también ha ahondado en que los nuevos presupuestos, que el próximo miércoles llegarán al Congreso de los Diputados, elevan en un 46% los recursos destinados a Vivienda.
De esta forma, alcanzarían los 3.000 millones de euros, cuando, en los anteriores presupuestos se situaban en 2.253 millones.
Además, los presupuestos también recogen Vivienda dentro de las partidas a las que se destinarán los fondos europeos. Un 9% de estos se vinculan a 'Acceso a la vivienda y fomento de la edificación'.
En cuanto a los componentes del plan de recuperación, más de 2.800 millones corresponden al Plan de Rehabilitación de Vivienda.