Como acto simbólico en el año del décimo aniversario de la caída de Lehman Brothers y sus consecuencias globales, una veintena de organizaciones sociales y plataformas ciudadanas han creado la campaña 10 Años de Crisis Estafa cuyo foco principal es el control democrático de las finanzas y una transición energética adecuada con el objetivo de crear conciencia para evitar otra crisis.
La organización convoca desde este lunes 28 de mayo asambleas y movilizaciones que tendrán lugar hasta el 15 de septiembre, fecha simbólica en la que el gigante financiero Lehman Brothers aceleró la crisis mundial declarándose en bancarrota.
El actor Alberto San Juan ha sido el encargado de presentar el manifiesto sobre el control ciudadano de las finanzas que propone la campaña, haciendo énfasis en el impacto negativo que provocan los mercados financieros a corto plazo en la sociedad, “alimentado la desigualdad social, la pobreza, la escasez de servicios públicos y el cambio climático”. Exigen una mayor participación política ante “un sistema neoliberal en el que prevalece el beneficio privado por encima de los derechos humanos”, sostiene San Juan.
Ecologistas en acción también ha abierto la veda de propuestas, exigiendo un marco legal claro para la transición energética que “mitigue el cambio climático y la deuda ecológica” y que sin embargo, “se está eludiendo”, indica Lucía Barcena, portavoz de Ecologistas en Acción. En este contexto, la Ley de Cambio Climático fue anunciada por primera vez por el presidente del Gobierno tras el Acuerdo de París en 2015 –en precampaña electoral– y a día de hoy no se conoce el texto que debe detallar por escrito la estrategia de España para luchar contra el cambio climático.
Ante una situación de movilizaciones constantes de distintos colectivos “a los que las finanzas afectan por igual” –la última ha tenido lugar pasado domingo 27 de mayo, convocada por No+Precariedad– Cuca Hernández, coordinadora de ATTAC España, grupo de presión a favor de la introducción de una tasa a las transacciones financieras internacionales, advierte sobre el peligro de “volver a inflar la burbuja financiera”. Y en este sentido añade que las “finanzas arruinan a los países, producen hambre y especulan con materias primas”, por ello, señala que habría que eliminar el artículo 135 de la Constitución, prueba tangible de las “prioridades” del Gobierno.