Estas son las convocatorias de cada sindicato para la huelga feminista del 8M
Dejar el puesto de trabajo el 8M. El año pasado España vivió la primera huelga feminista, para combatir la desigualdad y la violencia que afrontan las mujeres en diferentes ámbitos de sus vidas, pero no se trató de un paro al uso. La movilización se orquestó en torno a cuatro ejes, que se mantienen en la convocatoria de este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer: laboral, estudiantil, de cuidados y de consumo. En el mundo del trabajo, el movimiento feminista ha llamado a que las mujeres abandonen sus puestos durante todo el día, pero en los diferentes sindicatos –que son los que legalmente registran la convocatoria de huelga– han optado por varias modalidades de paros y llaman a que mujeres y hombres secunden.
Lo primero que debe saber cualquier persona con una relación laboral que desee secundar el paro laboral este 8 de Marzo es que puede ausentarse de su centro de trabajo a lo largo de todo el día, dado que hay organizaciones que han registrado huelga de 24 horas en todos los sectores de actividad. No es necesario que la trabajadora o el trabajador esté afiliado a un sindicato, ni que en el centro de trabajo exista representación sindical. Si el comité de empresa de un centro defiende una modalidad concreta de paro, eso no quita para que cualquier persona pueda secundar la que considere.
Los motivos para que la movilización feminista del 8M irrumpa también en el terreno laboral son múltiples. Destacan las denuncias de la brecha salarial, el techo de cristal que impide que las mujeres accedan a los puestos de dirección y decisión, el acoso sexual y otras violencias machistas en los centros de trabajo, la infravaloración de las trabajadoras por el hecho de ser mujeres y las penalizaciones en sus carreras profesionales por estar cargadas mayoritariamente con las tareas de cuidados, entre otras.
Las convocatorias de este año van desde una hora de paro parcial, en el caso de CSIF, a las 24 horas de huelga general de organizaciones más pequeñas, como CNT, CGT o la Confederación Intersindical, entre otras. Las organizaciones más representativas a nivel estatal optan de nuevo por los paros parciales, aunque con opción de ampliarse según los casos, mientras que varios sindicatos autonómicos con una fuerte representación en sus comunidades se decantan por la huelga durante todo el día.
UGT y CCOO: dos horas y posibilidad de ampliar
Los dos sindicatos mayoritarios, Comisiones Obreras y UGT, han repetido este año una estrategia conjunta, aunque con algunas diferencias entre sí. En 2018 ambas centrales convocaron paros parciales de dos horas, para los turnos de mañana, tarde y noche, y este año han habilitado la opción de que estas convocatorias se amplíen en determinados casos.
La llamada general de CCOO y UGT consiste en parar dos horas a nivel estatal: de 12h a 14h para las jornadas partidas y continuadas en turno de mañana, de 16h a 18h en las jornadas continuadas en el turno de tarde, y durante las dos primeras horas del turno nocturno para los empleados durante la noche. Estas franjas pueden modificarse en determinados “ámbitos, sectores o empresas” en las que se notifique expresamente un horario distinto.
Además, el sindicato dirigido por Unai Sordo permite ampliar los paros dentro de la organización en sectores específicos, “porque estén muy feminizados o existan grandes brechas de género”, explica Elena Blasco, secretaria de Mujeres e Igualdad de CCOO. En el sindicato explican que no tienen el listado completo de estas federaciones y sectores que convocan más de dos horas, ya que la organización de la huelga para el 8M está siendo “muy descentralizada”. Entre los sectores de los que sí tienen constancia que se han ampliado los paros a las 24 horas figuran la Federación de Enseñanza, el sector de los Contact Center, y “en algunos medios de comunicación, como RTVE”.
En UGT la opción de ampliar la convocatoria de huelga no se ha estructurado de manera tan clara en torno a los sectores de actividad, explica Cristina Antoñanzas, vicesecretaria general del sindicato. “Lo que se planteó dentro de la organización es que había centros de trabajo, no solo sectores, que querían hacer la de 24 horas y que querían hacerla con su cobertura de su sindicato, así que UGT mantiene a nivel estatal los paros de dos horas, pero presta cobertura de 24 horas para las personas que deseen hacer huelga todo el día”, sostiene.
El sindicato liderado por Pepe Álvarez tampoco tiene un listado de las empresas y sectores en los que UGT llama a la huelga de 24 horas, aunque hay algunos ejemplos que destacan, como Canarias, donde la central ha extendido la llamada a parar en las islas durante toda la jornada del 8M, al igual que Catalunya o en Andalucía, donde se ha registrado una convocatoria de paros de dos horas por turno y de huelga durante toda la jornada laboral, y también en varios sectores madrileños junto a CCOO, como la sanidad pública y privada madrileña, la educación y las residencias de tercera edad, entre otros.
Desde ambos sindicatos han argumentado la convocatoria de estos paros parciales por no tratarse de una “huelga al uso”, con muchas formas de reivindicación que no se concentran solo en la laboral y que limitarla a ese escenario puede difuminar el conjunto de movilizaciones (cuidados, estudiantil y de consumo). Consideran que esas dos horas permiten a los trabajadores reflexionar sobre las reivindicaciones del 8M y advierten de que todavía en muchos sectores y empresas no existe la predisposición a parar durante toda la jornada. “Hemos analizado la capacidad real de la convocatoria de huelga”, apunta Elena Blasco, “la opción que hemos planteado es la que garantiza la máxima participación posible y que la convocatoria sea un éxito”.
La secretaria de Igualdad de CCOO subraya también que en algunos trabajos supone un esfuerzo económico muy grande para muchas mujeres parar durante toda su jornada. Secundar una huelga implica perder el sueldo y la cotización correspondiente: de todo el día si se abandona el puesto de trabajo la jornada completa y de la parte proporcional que se ausente la trabajadora o el trabajador en el caso de los paros parciales.
Adrián Todolí, profesor de Derecho del Trabajo de la Universidad de Valencia, recuerda que “hay libertad de reanudar el trabajo cuando se quiera”, de modo que una persona podría iniciar la huelga convocada de toda la jornada y regresar a su puesto de trabajo a las cuatro horas (aunque no haya una convocatoria expresa de ese periodo). En ese caso, solo se perdería el salario y la cotización del periodo en el que se ha ausentado de su puesto. “Lo que se podría considerar un abuso es que después de abandonar la huelga se quisiera volver” a parar, advierte.
CSIF rectifica este año: sí convoca paro (de 1 hora)
El sindicato CSIF destacó el año pasado por no sumarse al 8M con ninguna convocatoria de huelga, frente al resto de organizaciones sindicales, y se desmarcó de las convocatorias porque tenían “tintes políticos”, en palabras de su presidente nacional, Miguel Borra. Este 2019 ha cambiado de postura y ha convocado una hora de paros, en el turno de mañana, tarde y noche.
“Hemos tenido que hacer una reflexión y rectificar porque hay que estar sensible a todo lo que está ocurriendo”, reconoce Mª Ángeles Mur, secretaria de Igualdad CSIF, que apunta que “creemos que es una responsabilidad como agentes activos de la sociedad civil” dar cobertura a los paros laborales, “no podemos estar indiferentes ante el movimiento de la sociedad”.
Debido a que el sindicato tiene más presencia en el sector público, CSIF considera que sus paros de una hora son una oportunidad de “parar la Administración” y demostrar que también en las instituciones hay discriminación. “Las administraciones públicas deberían ser un ejemplo y hoy no lo son: queremos denunciar que las mujeres también sufren acoso y otras discriminaciones”, explica Mur.
USO resta horas a su paro parcial
La Unión Sindical Obrera (USO), es el tercer sindicato en representación a nivel estatal, y este 2019 ha destacado por ser el único que resta horas a su convocatoria de paro parcial del 8M respecto al año pasado. En 2018 la organización llamó a abandonar los puestos de trabajo durante cuatro horas, de 12h a 16h, y este 8 de Marzo su convocatoria consiste en paros parciales de dos horas: de 11.30h a 13.30h en los turnos de mañana y jornadas partidas, de 16h a 18h en los turnos de tardes, y en las dos primeras horas del turno de noche.
“El año pasado queríamos que participaran los trabajadores del turno de mañana y de tarde. Como tuvimos mucha dificultad para que todos los turnos pudieran parar, hemos decidido este año convocar a dos horas por cada jornada. En realidad son seis horas entre unos turnos y otros”, explica Dulce María Moreno, secretaria de Formación sindical e Igualdad de USO. Sobre por qué convocar a que los trabajadores paren dos horas y no toda la jornada, como pide el movimiento feminista, Moreno afirma que “es lo que han decidido los órganos de decisión” del sindicato.
CGT, CNT e Intersindical repiten la huelga de 24 horas
Los sindicatos minoritarios CGT, CNT y Confederación Intersindical reiteran la llamada que hicieron en la primera huelga del 8M: parar durante toda la jornada. Todos ellos subrayan que se sitúan al lado o “detrás” del movimiento feminista, como motor central de las movilizaciones del próximo 8 de marzo. “Nosotras ya lo decidimos en octubre, cuando se reunió el movimiento feminista en Gijón y dijo que quería huelga de 24 horas. Convocamos en apoyo de movimiento feminista”, sostiene Mari Luz González, responsable de la Organización de Mujeres de la Confederación Intersindical.
Estas organizaciones son muy críticas con la convocatoria de los grandes sindicatos, aunque respetan el derecho de las trabajadoras y trabajadores de sumarse a la modalidad que prefieran. “Convocar menos de 24 horas es hacer el ridículo. Perder un día de salario es un esfuerzo, claro que sí, pero ¿es que no lo merece denunciar la brecha salarial? ¿Las violencias machistas? ¿La discriminación general a las mujeres? CGT cree que sí”, defiende Rosa Becerro, secretaria de Acción Sindical del sindicato, que considera que no es real la falta de apoyo en la sociedad a secundar un paro general.
En CNT la situación ideal sería una huelga superior a las 24 horas, apunta Raquel Pérez Brito, portavoz de la organización anarcosindicalista, “pero aún no estamos en esas y lo sabemos”. El sindicato considera que los paros parciales no respetan la esencia de la movilización del 8M. “Si la idea es que el mundo se percate del papel que hacen las mujeres, porque falten dos horas nadie se va a dar cuenta. Podrían estar simplemente en un descanso”, argumenta Pérez Brito.
Grandes sindicatos regionales amplían a las 24 horas
Varios sindicatos sectoriales regionales con gran implantación en sus comunidades autónomas han registrado la convocatoria de huelga general durante todo el 8 de marzo. Es el caso de ELA, el más representativo en Euskadi, y LAB, que le sigue, han ampliado este 2019 la convocatoria de huelga a las 24 horas, después de que el pasado año se concentrara en un paro parcial de dos horas por turno.
La Confederación Intersindical Galega (CIG) también ha pasado de las dos horas del año pasado, inspirada también en el movimiento internacional que llamaba a parar en lugares como Argentina, a la jornada completa para este 8M y a convocar solo a las mujeres. “Hemos tenido mucho debate interno tras el pasado 8M, que fue muy potente, Galicia se desbordó”, explica Margarida Corral, secretaria de Mujeres de la CIG. Corral reconoce que, en su opinión, los paros parciales de dos horas son los que pueden garantizar un mayor respaldo de participación, “por la precariedad que hay, muchas mujeres no se pueden permitir parar todo el día y los paros garantizan que se sumen más”.
Sin embargo, el sindicato recibió también el mensaje de que “había que dar un paso más”, explica la sindicalista gallega, tras el “rearme de la derecha reaccionaria” y la inacción en los gobiernos estatal y de la Xunta. “Nos llegaba que en algunos centros de trabajo había cierres patronales y cierto conchabeo de los empresarios”, apunta Corral, “así que, a sabiendas de que esta convocatoria puede no tener los resultados que nos gustarían, queríamos hacer un uso responsable de lo que significa una convocatoria de huelga, que es un instrumento de lucha, revolucionario”.
En el Sindicato Andaluz de Trabajadores/as (SAT) repiten la convocatoria de toda la jornada de 2018, “es lo mínimo, hay que significarse, no valen medias tintas”, afirma Óscar Reina, su secretario general. Respecto a los paros parciales, el SAT cree que hay más posibilidades de “esquiloraje dirigido, los empresarios pueden modificar la jornada o hacer que esas dos horas se recuperen después de algún modo”. Reina considera que no se puede hablar de “fracaso” de las convocatorias de huelga de 24 horas del pasado año: “Quién nos iba a decir hace dos años lo que vivimos el 8M, fue brutal. Creo que las grandes centrales sindicales no están teniendo la valentía que está demostrando ahora mismo el feminismo”.
Varios sindicatos sectoriales no convocan
Los sindicatos mayoritarios han expresado cómo desde algunos sectores más feminizados han pedido a las direcciones que la convocatoria de huelga abarque toda la jornada, como ocurre en la Educación. Si embargo, varios sindicatos sectoriales consultados por este medio con fuerte presencia de mujeres entre sus trabajadores no se han oficializado estas convocatorias de huelga.
Es el caso de ANPE (Asociación Nacional de Profesionales de la Enseñanza). “No vamos a convocar huelga. En la educación pública se accede por igualdad de méritos y capacidades, así que entendemos que no existe esa desigualdad que puede existir en otros trabajos”, explica Sonia García, secretaria de Comunicación del sindicato. “Lo que sí reivindicaremos ese día es la educación en igualdad, seguir insistiendo que la igualdad debe estar presente en los currículos”, añade.
En FSIE (Sindicato Independiente de Enseñanza y de Atención a la Discapacidad), con presencia en la escuela concertada y privada, respetan el llamamiento a la huelga pero explican que no se pueden adherir al manifiesto del movimiento feminista ni convocar estos paros porque “se defiende una educación única, pública y laica excluyendo a las más de 200.000 mujeres y hombres que componen nuestro sector y cuyos intereses representamos”.
Tampoco convocan huelga en el sindicato de Enfermería SATSE, una profesión con gran presencia de mujeres. La organización llevará a cabo “acciones informativas y de sensibilización social”, para luchar por la conciliación y los derechos vinculados a la maternidad, así como denunciar “la imagen sexista y el reconocimiento profesional de la labor de la Enfermería y Fisioterapia”, pero no llama a sus trabajadoras a dejar sus puestos.
Desde el sindicato explican que “apoyan y respetan la libertad individual y personal” de los trabajadoras que quieran participar en las acciones que promueven otros colectivos u organizaciones, pero como sindicato profesional, “organiza y convoca todo tipo de acciones de movilización centradas en la defensa de los intereses laborales y profesionales de las enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas”.