El coste del turismo de borrachera en Magaluf: 140.000 euros para los refuerzos policiales en la zona conflictiva
Las imágenes paradisíacas de Baleares, con aguas cristalinas y calas recónditas, se entremezclan con las estampas de turistas borrachos, drogados y haciendo balconing. El turismo de borrachera, aunque minoritario, forma parte de la oferta turística de las islas. Además de perjudicar la vida de los residentes, genera un desembolso para las administraciones públicas: policías, sanitarios y limpiadores son los tres pilares del gasto.
El Ayuntamiento de Calvià, donde está la famosa localidad de Magaluf, aumenta los refuerzos policiales en verano: 6 policías más de noche entre semana y 8 agentes más los fines de semana, para que patrullen especialmente por la calle Punta Ballena, con una longitud de apenas 600 metros, pero la más conflictiva.
Fuentes del Consistorio informan a eldiario.es que el refuerzo que hace la Policía Local solo para Punta Ballena tiene un coste aproximado de 140.000 euros. Pese a tener solo 49.000 habitantes, Calvià ha presupuestado 12 millones de euros en Seguridad Ciudadana para 2018.
“Tenemos una Policía Local con una dotación mucho mayor que la que tendría otro municipio de nuestro tamaño”, comenta el alcalde, Alfonso Rodríguez, quien también reclama más efectivos de Guardia Civil. En 2017, la Policía registró 3.866 infracciones, por varios motivos, desde el nudismo al consumo de drogas. Este año ha subido el coste de las multas y, por ejemplo, hacer botellón cuesta 500€.
Para mantener las calles y playas limpias, Calvià ha presupuestado 30,3 millones de euros en 2018. También ha aumentado en dos meses el período en que el servicio de limpieza se intensifica y ha contratado a 23 limpiadores en verano. Rodríguez reconoce que hacen un “esfuerzo presupuestario” y que tienen “una empresa de limpieza más dimensionada que otros municipios”.
Además, Calvià ha concertado un servicio de ambulancia para atender emergencias. Las peleas entre turistas son frecuentes en la localidad. Fuentes de la Conselleria de Salut han informado a eldiario.es que, en lo que va de año, han registrado 161 incidencias sanitarias, 133 de ellas por intoxicación etílica y 17 por peleas o agresiones.
Para toda Mallorca hay 27 ambulancias y, para Magaluf en concreto, 2. La Conselleria de Salut asegura que, desde junio hasta mediados de septiembre, se refuerza Magaluf con una ambulancia extra. Además, el Centro de Salud de Palma Nova cuenta con un médico durante todo el año.
Magaluf: alcohol barato y abundante
El alcalde de Calvià comenta que el municipio cuenta con 60.000 plazas hoteleras y con cinco grandes núcleos turísticos, más allá de Magaluf. “Somos el destino español con más banderas Q de calidad en nuestras playas”, recuerda Rodríguez. Sin embargo, Magaluf es una de las zonas más conocidas de Mallorca, especialmente entre los jóvenes británicos.
Por ello, desde Calvià solicitan al Govern que regule el “todo incluido” en los hoteles y que establezca un criterio para que el alcohol no sea gratuito. Además, piden que los locales de ocio no puedan establecer “ofertas agresivas”, como las “barras libres”, los 2x1 o las “happy hours”. Rodríguez comenta que Calvià “necesita más pasos para parar con los excesos”.
Jaume Alzamora, director de la Agencia d'Estratègia Turística del Govern, asegura que éste está “trabajando en la regulación del todo incluido” para poner coto a las barras libres en los hoteles, que muchos turistas contratan a través de un paquete turístico. El 40,7% de los visitantes de Baleares adquieren un paquete turístico, si bien no existe un “paquete de borrachera” como tal.
“El balconing ya no existe”
balconing“Ni las autoridades ni los hoteles se hacen responsables”, lamenta Jaume Adrover, presidente de la entidad ecologista Terraferida, quien critica que “el gasto público palia las externalidades que genera el sector privado”. “Tenemos un ejército de personal público atendiendo los efectos del turismo de borrachera”, añade.
También lamenta el uso de recursos públicos para afrontar la suciedad del turista borracho: “Llegan al hotel, les ponen una pulsera, comen y beben allí y terminan de emborracharse en los locales baratos. Dejan una cantidad de residuos espectacular y parte de la porquería siempre acaba en el mar. También pasa con las party boats, en las que lanzan cubatas y botellas”.
Por su parte, el sector privado se defiende: “Hemos hecho muchas reformas. Somos la zona de Mallorca con más porcentaje de hoteles de 4 y 5 estrellas. La inversión ha sido de 200 millones de euros en los últimos años”, comenta Juan Espina, vicepresidente de la Asociación de Hoteleros de Palmanova – Magaluf. Añade que el turismo joven ha bajado un 7% en los tres últimos años.
Aun así, defiende este tipo de turismo: “No queremos perder el turismo joven porque es un segmento del mercado demandado por el público. Si existe demanda, tiene que haber oferta”. Además, defiende que “el balconing ya no existe”, sino que hay “precipitaciones accidentales desde los balcones”. En lo que va de año, cuatro británicos han muerto en Magaluf al precipitarse al vacío.
El turista tipo: extranjeros y de mediana edad
Según un estudio del Govern, la mayoría de turistas que visitan Mallorca son personas de entre 25 y 44 años (el 40,5%), seguidos de aquellos de entre 45 y 64 (33'8%). En contra de la creencia generalizada, la isla a penas recibe turistas jóvenes: tan solo el 10% tiene entre 15 y 24 años.
El Ejecutivo asegura que, “aunque sea un tipo de turismo que mediáticamente y socialmente tenga mucha repercusión”, no dispone de datos sobre el turista de borrachera. El motivo es que es un público “minoritario” en Baleares. Jaume Alzamora reconoce que las instituciones son conscientes de que “algunos turistas son poco cívicos” y que “generan algunos problemas”.
Baleares recibió en 2017 a 16.338.906 turistas, la mayoría extranjeros (84%), principalmente de Gran Bretaña (3.738.882) y Alemania (4.833.656), según los datos del IBESTAT. Los alemanes prefieren ir a Mallorca: 4.433.454 germanos, el 92% del total de visitantes de este país, eligió como destino turístico la isla mayor.