“Nuestro sueño era digitalizar las catas para llevar nuestro vino a todo el mundo, y lo estamos haciendo”, dice un bodeguero que ha recibido 12.000 euros del “Kit digital” del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, en un vídeo publicitario del Gobierno. La digitalización de las empresas y el desarrollo de nuevas actividades en los sectores tecnológicos de mayor valor añadido están entre los principales objetivos del programa de fondos europeos (conocido como Next Generation) que la UE diseñó en 2021 como respuesta a la pandemia, junto a “la transición ecológica”.
Distintas estadísticas de la economía de España están dejando ver brotes de esa trasformación digital que se busca. En primer lugar, se puede observar en la importante creación de empleos relacionados con las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) y con la investigación y el desarrollo (I+D). También, en las cifras de inversión en “propiedad intelectual” que recoge la Contabilidad Nacional del INE (Instituto Nacional de Estadística). Y, por último, la misma evidencia se obtiene del fuerte crecimiento de las ventas de “equipo y software” de las empresas de nuestro país, según los datos de la Agencia Tributaria.
Esta última estadística cuenta una historia de auténtica transformación de la economía de España. Los ingresos de los sectores más innovadores, relacionados con la informática, la ciencia o los servicios técnicos y de información, se han disparado en los dos últimos años. Concretamente, el índice de inversión en “equipo y software” ha escalado hasta máximos históricos, superando en 30 puntos el nivel previo a la pandemia, tomando como referencia diciembre de 2019, y con datos hasta el cierre de 2023.
Más en detalle, los fabricantes de productos informáticos, electrónicos y ópticos han incrementado su resultado bruto de explotación (una forma contabilizar los beneficios) un 9% en 2023 respecto a 2019. Las compañías de programación, consultoría y otras actividades relacionadas con la informática lo han hecho un 24%. Las empresas de servicios de información, un 4%.
Estos números se han trasladado al mercado de trabajo. El empleo creció en 2023 en la gran mayoría de actividades económicas, aunque con diferencias. Los que más puestos de trabajo generaron el año pasado están encabezados por las actividades profesionales, científicas y técnicas, con 165.000 trabajadores más (+15%), algo muy relevante al tratarse de un sector con alto valor añadido y en general mejores condiciones, lo que aleja a España del típico retrato de “un país de camareros”.
Esta evolución no se puede explicar sin el Plan de Recuperación. Este mismo jueves, el centro de análisis BBVA Research publicó un informe que concluye desde el inicio del programa Next Generation EU y hasta finales de 2023 “se habrían licitado contratos y convocado subvenciones financiadas con los fondos europeos por un importe superior a 70.000 millones de euros, lo que supone más del 88% del total planificado inicialmente y en las transferencias de la Adenda [la ampliación del Plan]”.
“Por otro lado, se habrían resuelto, y por tanto es dinero que ya está a disposición de familias y empresas, más de 33.500 millones de euros, que equivalen a un 42% del total del Plan”, continúan los expertos de BBVA Research. “Estas cifras están en línea con lo publicado por el Gobierno en su último Informe sobre la ejecución del Plan de Recuperación (diciembre de 2023)”, añaden.
Visto de otra manera, se estima que hasta 2023 los fondos estarían financiando más de 12.500 contratos con empresas y familias. Por su parte, casi 500.000 empresas y familias habrían sido beneficiarias de las subvenciones que cuelgan del mismo Plan.
“A diferencia de otros fondos europeos, [en esta ocasión] el beneficiario es el Estado. De esta forma, las inversiones, proyectos y reformas las deciden y diseñan los gobiernos centrales, a través de sus Planes de Recuperación y Resiliencia (planes que ascienden a 79.870 millones de euros)”, explica el centro de análisis. El resto es un paquete de préstamos de hasta 83.000 millones a condiciones favorables, aunque su despliegue dependerá de la demanda.
“En España, al ser un país descentralizado, las comunidades autónomas y las entidades locales participan en la ejecución del Plan para el desarrollo de las inversiones y reformas que recaen sobre sus competencias. En este sentido, las haciendas territoriales recibirán fondos condicionados por importe de 31.200 millones de euros para la ejecución de los programas de gasto que les corresponden. Adicionalmente, el Estado estaría canalizando 29.400 millones de euros a través de otros organismos y entes públicos dependientes”, prosigue.
El Plan se estaría destinando principalmente a favorecer la transición ecológica –un 40% del total de lo planificado- y a la transformación digital –un 30%-. Uno de los programas específicos para este último objetivo es el “Kit digital”. Su puesta en marcha fue la primera medida adoptada del Plan de digitalización de las pymes 2021-2025.
Este programa tiene como objetivo promover la digitalización de pequeñas empresas, microempresas y autónomos. El programa está dotado con un presupuesto de 3.067 millones de euros, y se han lanzado ya cuatro convocatorias por un importe de 1.700 millones de euros. “Hasta mediados de febrero de 2024 más de 298.000 empresas y autónomos se habrían beneficiado del programa, con una inversión en torno a 1.380 millones de euros”, concluye BBVA Research.
En un momento convulso para las noticias de economía, es más importante que nunca estar bien informado. Las repercusiones de cada movimiento de empresas, de la política económica de los gobiernos y su impacto en los ciudadanos, explicadas desde un punto de vista riguroso y diferente.