La reforma del IRPF presentada por el Gobierno supondrá una merma en la recaudación de 5.441 millones de euros en 2015. Este es el cálculo que ha hecho el servicio de estudios de las Cajas de Ahorros (Funcas) que cree que el 27,21% de esta merma de ingresos se deberá al ahorro que suponen los cambios para las rentas de más de 42.551 euros (y que engloban al 10% de la población que declara rentas más altas). Es decir, el 10% que más renta tiene cuesta algo más de uno de cada cuatro euros de la reforma.
Los otros tramos de renta que más recaudación drenarán al Estado son las escalas intermedias (el cuarto y quinto nivel de renta si se divide en tramos del 10% las declaraciones) que van desde rentas de 12.615 euros hasta 17.772 euros. Estas rentas absorben otro 30% de la merma de recaudación.
Funcas ha simulado además el efecto en miles de contribuyentes de la reforma. Concluye que hay casi 13 millones de contribuyentes que ganan con los cambios (es decir, que pagarán menos impuesto de la renta), más de 600.000 que perderán y 5,7 millones a los que les dejará igual que estaban. Entre los que ganan la media se ahorra 435 euros, y los que pierden abonarán 310 euros más.
Los que menos ganan se quedan igual
La distribución de estos ganadores y perdedores también es muy reveladora. En general, los perdedores son los que están afectados por las modificaciones en los impuestos que gravan el ahorro y que han sufrido recortes, como la limitación a las aportaciones de los planes de pensiones o la supresión de la exención de los primeros 1.500 euros que se cobran como dividendos. Esto provoca que la mayor parte de los perdedores se encuentren en las franjas de rentas desde 21.000 euros para arriba.
Cabe recordar que las bajas rentas que se cobran en España hacen que si se trocea a los contribuyentes en diez partes, el 10% que más renta declara lo hace con más de 42.521 euros. El 10% más bajo no llega al los 7.000 euros. La mitad de los declarantes tienen una renta inferior a los 17.723 euros. Esto hace que los que tienen más de 42.521 euros de renta bruta se tengan que considerar 'ricos' en contraposición al resto del sistema.
Con diferencia, el grueso de los contribuyentes a los que la reforma deja igual (un tercio) son las rentas más bajas. El 80% de los contribuyentes a los que no les afecta la reforma (más de 4 millones) tienen una renta inferior a 12.600 euros, lo que reafirma a los expertos que habían augurado que la bajada del tipo marginal en las rentas más bajas (que pasa del 24,75% actual al 19%), tendría un efecto muy escaso a este colectivo.
Otra conclusión a la que llega Funcas con el uso de su simulador es que el ahorro para las familias relacionado con las subidas de los mínimos exentos por hijos, no es tal. Así, un matrimonio con dos hijos pagará hasta un 7% más de impuestos si se tienen en cuenta los cambios asociados a estos mínimos exentos. Paradójicamente, solo un soltero se verá realmente beneficiado por la mejora de los mínimos personales. En síntesis, no se puede decir que la reforma propugnada por el Gobierno de Rajoy apoye a las familias y los ahorros de los que se beneficiarán vendrán por los cambios en los tipos marginales, no por las supuestas ayudas directas de este tipo de medidas, tal y como ha vendido el Ejecutivo.
Con todo, esta simulación no tiene encuenta los llamados “impuestos negativos”, esto es, los 1.200 euros que se dan como cheque fiscal a madres trabajadoras y otras circunstancias especiales. Para los autores del informe, el impacto de estos cheques es “mínimo”.
Impacto en la recaudación
Con todo, cabe resaltar que estos 5.441 millones de euros de menos que se recaudarán son el impacto “mecánico” de la reforma. Esto es, sin tener en cuenta ni el impacto del ciclo del ciclo económico ni los efectos derivados de bajar los tipos del IRPF y que pueden llevar a recaudar más, lo que se conoce como el efecto de Laffer. Si se tienen en cuenta todos estos efectos, la factura fiscal para el Estado se reduce en 2015 a 1.416 millones de euros. Así, Funcas cree que la mejora en la economía mejorará en 2.039 millones de euros la recaudación, sin que tengan nada que ver con la reforma fiscal. También cree que el efecto Laffer (este sí consecuencia directa de la reforma) mejorará en 1.737 millones de euros la recaudación y también se recaudarán otros 250 millones de euros en impuestos como el IVA, gracias a que los que mejoren su renta disponible consumirán más. Todos estos efectos combinados (y sumados a la caída de 5.441 millones de euros de menor recaudación) hacen que el Estado 'solo' pierda 1.416 millones de euros en 2015 como resultado de la bajada de impuestos.
En conjunto, el tipo medio efectivo que pagarán los contribuyentes caerá un 8% en 2015. Así, de media los contribuyentes pagarán un 13,5% de sus ingresos en forma de tributos, frente al 14,5% actual. El tipo medio efectivo se hace de la media de los tipos marginales que se aplican en cada tramo y de los mínimos que afectan a los contribuyentes.
Los expertos no han analizado los efectos de la reforma en 2016 (se implementará en dos años) porque creen que la incertidumbre del año electoral es suficiente para presagiar que puede no llegar a tomar cuerpo. Tampoco han analizado si con la reforma se revierte la subida del IRPF que se llevó a cabo en 2011 pero realizarán esta simulación en las próximas semanas.