La ministra de Economía y Empresa, Nadia Calviño, ha anunciado este martes que durante la semana convocará al Comité de Estabilidad Financiera para retomar “definitivamente” la creación de la autoridad macroprudencial en España. Este organismo sirve para alertar en caso de que haya desequilibrios que sean antesala de una crisis económica.
Durante la comparecencia en el Congreso para explicar las líneas general de la política que seguirá su ministerio, Calviño ha recordado que el Comité de Estabilidad Financiera, donde participa el Ministerio de Economía junto al Banco de España y la Comisión Nacional del Mercado de Valores, no se reúne desde 2013.
La ministra también ha mencionado que España es uno de los pocos países europeos que aún no cuenta con una institución que analice los parámetros económicos y sirva para avanzar “alertas tempranas” que permitan a un país adoptar las medidas para evitar una recesión. Calviño ha argumentado que esta institución se centrará en “analizar los riesgos financieros” y permitirá que no se vuelva a caer en el error de anteriores crisis cuando “cada institución solo mira la letra pequeña de su parcela”.
Si esta institución hubiera existido en 2008 tendría que haber alertado sobre el desequilibrio que la actividad inmobiliaria suponía en el balance de los bancos, un aspecto que en el análisis de la crisis que se ha seguido en una comisión del Congreso se ha demostrado que no hicieron ni el Banco de España ni la Comisión Nacional del Mercado de Valores.
Trasposiciones
Entre los objetivos inmediatos de su departamento también ha mencionado la urgencia por trasponer 14 directivas a la mayor urgencia. “Les recuerdo que la gran mayoría de estas normas europeas debían estar recogidas en nuestro ordenamiento nacional desde hace años, y que por el retraso en la trasposición pesan sobre nosotros amenazas de sanciones cuantiosas”, ha avisado la ministra.
Entre estas medidas están el anteproyecto de ley de Mercado de Valores, cuyo dictamen del Consejo de Estado ya se está analizando por el ministerio, además de el anteproyecto de ley de Prevención de blanqueo de capitales, que traspone tres directivas; el anteproyecto de ley de Servicios de pago y sobre el anteproyecto de ley de Planes y fondos de pensiones, sobre los que Economía ha solicitado informes con el objetivo de “llevarlos a segunda ronda en el Consejo de Ministros lo antes posible”.
Calviño ha explicado que el pasado viernes se abrió la fase de audiencia pública para la orden ministerial del Reglamento de Desarrollo del Real Decreto-ley de Cuentas de pago básicas y también la consulta pública para el real decreto que regulará el acceso para el colectivo más desfavorecido.
Además de estas trasposiciones la ministra de Economía ha anunciado otras siete directivas que ya están recogidas en diferentes proyectos de ley que se encuentran en fase de tramitación parlamentaria. Por ello, el ministerio “ya ha solicitado la habilitación del mes de julio para que la Comisión de Economía y Empresa del Congreso pueda tramitar el Proyecto de Ley de Crédito Inmobiliario y el Proyecto de Ley de Información no Financiera. También se ha puesto en marcha el proceso para solicitar el trámite urgente en el Senado de estos dos proyectos de ley”.
Líneas generales de la política
A la hora de definir las políticas generales del Ministerio de Economía, Calviño ha subrayado el “inequívoco compromiso con la estabilidad presupuestaria” para “continuar avanzando en la senda de reducción del déficit público y del peso de la deuda sobre el PIB”. La ministra ha apuntado que de esta manera “se trata de evitar que el previsible aumento de tipos reduzca aún más nuestros márgenes para financiar los objetivos sociales prioritarios del Gobierno, por ejemplo en Sanidad o en Educación”.
Calviño no ha dudado en ensalzar los buenos datos macroeconómicos que permitirán a España crecer este año un 2,7% y un 2,4% en 2019, pero también ha señalado que “estos datos positivos se han beneficiado de importantes vientos de cola como, por ejemplo, un crecimiento significativo en nuestros principales mercados de exportación, un precio del petróleo moderado, una política monetaria expansiva y un fuerte dinamismo del sector turístico en el contexto de las tensiones geopolíticas en algunos de nuestros principales competidores”.
“Este crecimiento económico está principalmente impulsado por el aumento del consumo interno y la inversión, si bien el sector exterior ha seguido teniendo un impacto positivo”, ha abundado la ministra.
La ministra ha explicado que “la profunda crisis nos ha dejado una herencia importante que se manifiesta en ámbitos como un mercado laboral con importantes disfunciones, una elevada deuda pública y privada, el incremento de la desigualdad y el estancamiento de nuestro crecimiento potencial”, aunque ha destacado que “el desequilibrio más claro de nuestra economía viene dado por la tasa de desempleo, que sigue en niveles intolerablemente altos y muy lejanos todavía a los de antes de la crisis”. Por este motivo, Calviño ha puntualizado que “la generación de empleo continuará siendo el principal objetivo del Gobierno”.