Empresarios de la famosa Lista Falciani de presuntos defraudadores fiscales y herederos de los pioneros de la sanidad privada en España se han sumado al goteo de grandes fortunas que han decidido sacar de circulación sus sicavs. En este caso, con destino a Luxemburgo.
Este lunes, seis sicavs comunicaban el visto bueno de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) a su fusión en una institución de inversión colectiva autorizada en ese territorio en el Gran Ducado, Buy & Hold Luxembourg. La fusión fue aprobada por los consejos de administración de esas sicavs hace ya año y medio y en un mismo día (el 27 de marzo de 2019), pero el visto bueno del regulador no ha sido comunicado hasta ahora.
Entre esas sicavs, destacan por su patrimonio dos que tenían más de 22 millones de euros al cierre del primer semestre: Inversiones Lloner y Universal de Inversiones, administradas por distintas ramas de la familia Nebot, antiguos socios del grupo de hospitales privados valencianos Nisa.
Los Nebot son los herederos de los fundadores de ese grupo hospitalario creado hace más de medio siglo y que en 2017, en el frenético proceso de concentración que entonces vivía el sector de la sanidad privada en España, fue vendido al grupo Vithas, de los hermanos Gallardo, dueños de la farmacéutica Almirall que el año pasado también cerraron al menos tres de sus sicavs, incluyendo una de las mayores del país, Elitia, cuyo patrimonio superaba los 400 millones.
La operación de compra de Nisa, con la que se valoró el 100% de la empresa en unos 300 millones de euros, dio lugar a la segunda compañía de este sector en España, tras Quirónsalud (de la alemana Fresenius).
En marzo, con España recién confinada por el coronavirus, otra sicav también administrada por miembros de la familia Nebot, Rex Royal Blue, que tenía un patrimonio de 50,3 millones a cierre de 2019, ya logró el visto bueno de la CNMV a su fusión con ese vehículo luxemburgués.
Al mismo instrumento en el Gran Ducado se han sumado ahora también, entre otras, las sicavs BMS Blue Chips y BMS Cartera. Ambas atesoraban un patrimonio de más de 16 millones a cierre del primer semestre y están administradas por las herederas del fallecido cofundador de la histórica empresa de agroalimentación Frudesa y también ex accionista de la chocolatera valenciana Natra, el químico y empresario Bernardo Lafuente.
Lafuente, que hasta su muerte en 2013 presidió esas dos sicavs (le sucedieron primero su viuda y luego, una de sus hijas), estuvo vinculado junto a sus descendientes y los otros tres fundadores de Frudesa hasta al menos 2007 a una estructura de sociedades con sede en las Islas Vírgenes Británicas que disponían de cuentas en la filial suiza del banco HSBC, según avanzó en 2015 El Confidencial.
Esa estructura, en la que los creadores de Frudesa llegaron a acumular más de 15 millones de euros, se montó coincidiendo con la venta de la empresa de congelados (que hoy ya no existe como tal) a varias multinacionales.
Promesa enterrada
El número de sicavs lleva años en retroceso, tras las repetidas promesas de incrementar los controles sobre ellas. La última está recogida en el acuerdo de gobierno del PSOE y Unidas Podemos, que ambas formaciones encuadraban en el capítulo de iniciativas contra el fraude fiscal.
Tras anunciarse esa medida, que ha quedado enterrada por la emergencia económica derivada de la crisis del coronavirus, el presidente de la CNMV, Sebastián Albella, dijo que “sería una pena” que el Gobierno llevase a cabo medidas que puedan poner fin a las sicavs, porque llevaría a la deslocalización de empleos de la banca privada y disminuiría el interés en invertir en activos españoles.
Y la consejera delegada de Bankinter, Dolores Dancausa, reconocía en enero que la entidad estaba aconsejando a sus clientes que poseen sociedades de este tipo que se las llevasen a Luxemburgo para evitar la incertidumbre.
Salvo en abril, cuando hubo un parón total por la gran reclusión, el goteo de cierres de sicavs este año ha sido continuo y se aceleró con la desescalada. En lo que va de año, se han aprobado 66 operaciones de disolución, conversión en sociedad limitada o anónima o fusión transfronteriza, según los registros de la CNMV, que no recogen todas las operaciones porque muchas se comunican con meses de retraso.
Entre los últimos nombres conocidos figuran las sicavs de ex banqueros y familiares de políticos en activo como el senador de Vox y ex asesor financiero de la formación ultraderechista, Jacobo González-Robatto.