El gestor de navegación aérea en España (Enaire) y la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA) han firmado esta tarde el preacuerdo que pone fin al conflicto laboral, con un aumento del 21% de la plantilla hasta 2025, y que tendrá que ser ratificado por el Gobierno y por las asambleas del sindicato, según informa EFE.
Las direcciones de Enaire y USCA han sellado el preacuerdo tras seis días de reuniones, que dan por finalizadas, y han vinculado las reclamaciones del centro de control aéreo de Barcelona-Gavá al pacto estatal, con una cláusula por la que decae el aviso de huelga en ese centro con la ratificación del acuerdo.
Una ratificación que tendrá que hacer la asamblea de la USCA en Barcelona este viernes, así como las de los demás centros y la nacional del sindicato en un plazo de dos semanas, al tiempo que también tendrán que dar el visto bueno definitivo los ministerios de Fomento y Hacienda.
El acuerdo sienta además las bases para la negociación del tercer convenio colectivo, que ambas partes quieren adelantar a mediados de 2019, cuando el actual está vigente hasta diciembre de 2020.
El presidente de USCA, Pedro Gragera, ha indicado que con el acuerdo alcanzado ahora dan por ya negociada “la parte más importante del convenio, la de personal”, y que esperan que quede sellado el 30 de junio del año que viene.
Gragera ha explicado que el aumento en al menos el 21% de la plantilla dará respuesta al aumento del tráfico aéreo previsto para los próximos años, ya que Enaire se ha comprometido a incorporar un mínimo de 420 controladores aéreos hasta 2025, al margen de la reposición por jubilaciones, que implica otros 400 puestos.
En el centro de Gavá se crearán 96 plazas nuevas de controlador aéreo antes de 2023, según el preacuerdo firmado esta tarde en la sede madrileña de Enaire, en presencia de un miembro de USCA de Barcelona, quien trasladará el texto a sus compañeros de la asamblea barcelonesa este viernes para la ratificación.
Una cláusula del preacuerdo incluye el cese del aviso de huelga en Gavá, con el fin de ligar las reclamaciones de ese centro al acuerdo estatal, y para lograr la paz social hasta 2025, según han explicado fuentes de Enaire.