La energía hidroeléctrica vuelve a fijar el precio de la luz en las horas más caras del día más caro de la historia

La historia se repite y la hidroeléctrica va a ser la fuente que fije el precio de la luz en las horas más caras de este jueves, cuando el mercado mayorista de electricidad va a pulverizar otro máximo histórico, el sexto en lo que va de agosto, al situarse en una media de 122,76 euros por megavatio hora (MWh), frente a los 117,29 euros/MWh del anterior récord alcanzado el pasado día 13.

Según datos del Operador del Mercado Ibérico de Electricidad (OMIE), el precio horario más alto de este jueves se va a alcanzar entre las 22 horas y las 23 horas, al situarse en 129,81 euros/MWh. A esa hora, no va a ser el gas natural, sino la hidroeléctrica, la que fije el precio de la electricidad. Lo mismo ocurrirá desde las 23 hasta la medianoche, la segunda hora más cara de este día récord, cuando se situará en 127,78 euros. 

Esas unidades, con muy bajos costes variables, utilizan un bien público como el agua en instalaciones en algunos casos centenarias que están aprovechando la actual coyuntura de mercado (gas y CO2 por las nubes y escaso viento) para presentar ofertas incluso superiores a las de las centrales de ciclo combinado (que queman gas natural, cuya cotización se ha disparado, y que además soportan el alto coste de los derechos de emisión), fijando así el precio que cobran todas las tecnologías de generación por el diseño marginalista del mercado mayorista.

Esta práctica no es una excepción. Un reciente análisis de elDiario.es mostraba que la hidroeléctrica ha marcado el precio del pool en 75 de las 100 horas más caras de este año de precios récord. Ya ocurrió con el anterior récord, cuando la generación hidráulica de bombeo fijó el precio en la hora más cara, 10 de la noche, cuando alcanzó 128,54 euros/MWh. A comienzos de esa semana, el denominado pool inició una racha de cinco récords diarios consecutivos en plena ola de calor. Ese lunes, el agua llegó a fijar el precio en 22 de las 24 horas del día. Este jueves, en cambio, los ciclos combinados van a marcar precio en 15 de las 24 horas del día. Pero será la hidroeléctrica la que mande en los momentos más caros de la jornada.

Los precios medios de este jueves para España y Portugal (que comparten mercado eléctrico) son superiores a los de los mercados mayoristas de Francia (93,2 euros/MWh), Alemania (92,6 euros/MWh) o Grecia (118,74 euros/MWh), pero inferiores a los de Italia (129,63 euros/MWh). Con respecto a hace un año, el pool será un 165% más caro que los niveles que marcaba por las mismas fechas de agosto de 2020, cuando fue de 46,25 euros/MWh. Ese mes, con la demanda todavía hundida por la pandemia, el precio medio del mercado mayorista fue de 36 euros. El pool determina el coste de la energía, que supone aproximadamente un tercio de la factura de un consumidor doméstico acogido a la tarifa regulada del precio voluntario al pequeño consumidor (PVPC).

Precios inflados

El nuevo récord de este jueves se conocía poco después de que el miércoles la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) anunciase que ha detectado que algunas comercializadoras eléctricas, a las que el organismo no identificaba, han aprovechado la entrada en vigor de las nuevas tarifas el pasado 1 de junio para elevar sus tarifas aplicando penalizaciones de hasta el 30% en el precio de la energía. 

Competencia ha analizado los precios aplicados por un total de 43 comercializadoras en el mercado libre, en el que las partes pactan los precios por contrato. Estos, según todos los expertos, son superiores a los del PVPC, en el que el coste de la energía está directamente indexado a los precios del pool y está directamente expuesto a sus vaivenes, si bien la cotización de este también acaba impactando en lo que pagan los suministros en mercado libre. La CNMC asegura que la gran mayoría de comercializadoras han trasladado adecuadamente la variación en los nuevos peajes. Pero ha detectado casos en los que no se ha hecho y está realizando un “seguimiento” de las regularizaciones de esos contratos. De momento, no hay expedientes sancionadores abiertos.

Para la asociación de consumidores Facua, es “intolerable la falta de transparencia de la CNMC, que oculta los nombres de las compañías eléctricas que han incurrido en esta ilegalidad, hecho que dificulta la reclamación por parte de los afectados de las cuantías cobradas de más en sus recibos y por tanto, la devolución del dinero”. Esta asociación se ha dirigido al organismo para que aclare qué eléctricas “han inflado ilegalmente el precio de la energía a los usuarios aprovechando la adaptación de las facturas a los nuevos tramos horarios”.

Por su parte, la OCU exige a la CNMC que, “en primer lugar, haga público el nombre de las empresas que han cometido las irregularidades que recoge este informe y que en segundo lugar sancione de forma ejemplar estas prácticas contrarias a la normativa de protección de consumidores”. También reclama al Ministerio de Consumo “que modifique la normativa para introducir más transparencia y garantías en la actuación de las compañías comercializadoras del mercado libre”.

Bronca política

La espiral de subidas del recibo, la bronca política generada, las tensiones en el seno del Ejecutivo de coalición y la retribución excesiva que, según muchos observadores del sector, otorga la subasta diaria del mercado mayorista a la hidroeléctrica, han llevado al Gobierno a abrir la puerta por primera vez a que una empresa pública gestione las concesiones hidroeléctricas caducadas. Además, esta semana Unidas Podemos ha trasladado al Ministerio para la Transición Ecológica una propuesta para abaratar la factura de la luz que pasaría por limitar el precio de la energía nuclear e hidroeléctrica mediante decreto ley. 

La propuesta de Podemos pasa por establecer un precio fijo para la energía nuclear, “tal y como ya hace Francia”, para que las comercializadoras puedan adquirir la energía de las plantas atómicas a ese precio de referencia, y de un “máximo” para la hidroeléctrica. Esta propuesta es adicional al proyecto de ley planteado por el Gobierno para drenar el exceso de retribución de hidráulica y nuclear por el encarecimiento del mercado de CO2. Esta es, junto al futuro fondo para sacar del recibo el coste de las primas a las renovables, la gran apuesta de Transición Ecológica para abaratar el recibo, aunque tardará meses en entrar en vigor y la escalada no parece tener fin.

Las propias nucleares han pedido una retribución “razonable” a su producción mediante un precio fijo que el presidente del Foro Nuclear, Ignacio Araluce, cifraba hace unos meses en unos 57 euros por megavatio hora. Este precio, inferior a los casi 68 euros que registra ya de media el pool en este año extraordinariamente caro, es muy similar a los cálculos de costes de generación de la nuclear aportados por Endesa a la Agencia Internacional Internacional de la Energía (AIE) en una reciente visita de sus técnicos a España. Sin embargo, es muy superior a los 42 euros de un mecanismo similar en Francia.

La portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, indicó el martes que esa propuesta de Unidas Podemos se va a estudiar, aunque el Ministerio para la Transición Ecológica duda que sea compatible con la normativa europea. Por su parte, UGT calificaba este miércoles esta escalada de récords “insostenible y fraudulenta”, y exigía medidas urgentes del Gobierno, al que reclama que priorice la lucha contra la pobreza energética.

Está previsto que la vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, comparezca en el Congreso el próximo lunes para explicar las medidas de su departamento para atajar la espectacular subida de la luz, que ya se ha comido la rebaja del IVA del recibo y la suspensión temporal del impuesto a la generación que aprobó el Gobierno de urgencia en junio.

La comparecencia de Ribera fue acordada este miércoles por la mesa del Congreso. Este órgano ha rechazado admitir a trámite una petición presentada por Esquerra Republicana y EH-Bildu para que el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, acudiese a la Cámara a informar del vaciado de embalses explotados por esta compañía energética, líder hidroeléctrico nacional, con el fin de maximizar su generación de electricidad, una práctica que Transición Ecológica está investigando y que la propia Ribera calificaba hace unos días de “escandalosa”.