Las viviendas turísticas han cambiado el modo en el que se viaja y han derivado en un aumento en el número de visitantes, a veces descontrolado, que conlleva el descontento de la población residente ante la saturación y el despegue de los precios de los alquileres. Por ello, las ciudades de todo el mundo intentan regular su actividad, con más o menos éxito.
Si se mira solo lo que está ocurriendo en la Unión Europea, los turistas cada vez apuestan más por este tipo de alojamientos. Sin embargo, algunos países acaparan la mayoría de reservas realizadas a través de plataformas como Airbnb, Booking, Tripadvisor o Expedia. Un tipo de inmuebles que, en el caso de varias poblaciones españolas, ya son casi el 20% de todo el parque de viviendas.
Los datos indican que España es el segundo país de la Unión Europea donde los viajeros hacen más reservas en viviendas turísticas y duermen más noches en ellas, según se concluye de las últimas estadísticas que publica Eurostat, que corresponden al conjunto de 2023. Unos datos que, según indica el organismo estadístico europeo, recogen esas estancias cortas y que solo contemplan casas, viviendas o apartamentos. Así, no incluyen las reservas realizadas en hoteles o campings.
Estas estadísticas reflejan que España concentra casi el 20% de las noches reservadas en vivienda turística y solo nos supera Francia, con un 22,5%. En cambio, si se mira la duración de esas estancias, estamos por detrás del país vecino y, también, de Italia. De hecho, estos tres Estados de la costa mediterránea acaparan gran parte de este tipo de turismo, porque concentran más de la mitad de las reservas y de las noches en estos alojamientos, como se ve en el siguiente gráfico.
Los datos de Eurostat se refieren únicamente a las viviendas o apartamentos ofrecidos a través de Airbnb, Booking, Tripadvisor y Expedia y, debido a posibles solapamientos, no pueden añadirse o compararse con otras estadísticas turísticas sobre alquileres vacacionales o con otros tipos de alojamiento –como hoteles o campings– disponibles a través de las estadísticas europeas, según indica Eurostat.
En cuanto a los datos en sí, cuando este organismo estadístico habla de estancias se refiere al número de reservas realizadas. Mientras, las noches reservadas indican el número de jornadas que se han contratado en el viaje para el conjunto de personas que estén en una vivienda turística. Mientras, las pernoctaciones hacen referencia al número de días que un viajero pasa ella. Es decir, un viaje de dos personas en un apartamento turístico para dormir dos noches corresponde a una reserva, dos noches reservadas y cuatro pernoctaciones.
Frenazo con la pandemia y despegue
Las viviendas turísticas frenaron en seco su actividad durante la pandemia. De hecho, parte de la oferta volvió al alquiler residencial, aunque esos pisos duraron poco en este mercado a largo plazo. Si se comparan los datos de 2023 respecto a los de 2018, el número de reservas de viviendas turísticas se ha disparado un 55% en el conjunto de la Unión Europea. Y el número de noches reservadas, un 60%, como se ve a continuación.
El crecimiento en España es ligeramente inferior, pero despega igualmente. Desde ese mismo 2018, el número de reservas de viviendas turísticas a través de plataformas se ha disparado casi un 40% y el de noches contratadas, cerca de un 50%.
Aquí, el Gobierno de coalición ha acelerado en los últimos días la apuesta por una regulación que, por un lado, controle los establecimientos que se comercializan en estas plataformas, que en muchas ocasiones no cuentan con licencia. Para ello, el Ministerio de Vivienda pondrá en marcha un registro donde deberán estar este tipo de alojamientos. En paralelo, el Ministerio de Consumo ha abierto una investigación para poner de manifiesto aquellos anuncios de viviendas que no cuentan con licencia para operar como alojamiento para turistas. Algo que es palpable en ciudades como Madrid, donde el Ayuntamiento ha reconocido que la mayoría de la oferta opera al margen de la legalidad.
Este análisis de las viviendas vacacionales en España revela que hay diferencias con otros mercados europeos. Aquí las reservas realizadas a través de portales como Airbnb o Booking las realizan, sobre todo, visitantes extranjeros. Algo que no ocurre en Alemania o Francia, por ejemplo, donde el turismo nacional es mayoritario, como se ve en esta tabla.
Además, aunque el turismo en este tipo de viviendas crece en toda Europa, no lo ha hecho con la misma intensidad. Si se ve el número de pernoctaciones –que, como se ha indicado antes recoge el número de personas que comparten una vivienda turística para todas las noches reservadas– estas han crecido más de un 100% en cinco años en países como Rumanía o Suecia; mientras que Bélgica y Polonia están cerca del 90% y Grecia y Francia rozan el 80%.
Y venimos de un año en el que se marcaron cifras récord, que si se cumplen las buenas previsiones que ha anticipado el sector turístico para este verano, podrían superarse en estos meses estivales.
En agosto del año pasado, tanto España como el conjunto de la Unión Europea marcaron las cifras de pernoctaciones más altas alcanzadas hasta el momento. En el caso español, 23 millones de pernoctaciones. Y, en conjunto de la Unión Europea, 127 millones.
De esta forma, en agosto de 2023, más del 18% de todas las reservas de vivienda turística a través de plataformas online de la UE se realizaron en España. Y, como se ve a continuación, son los dos meses de verano, julio y agosto, los que acaparan gran parte de esos alojamientos.
Eurostat también analiza cuáles son las regiones europeas que concentran más turistas en apartamentos y casas que podrían tener uso residencial. Pero aquí las estadísticas van con retraso y las publicadas hasta el momento solo recogen los tres primeros trimestres de 2023.
De nuevo, España tiene protagonismo porque tiene cuatro de las 10 regiones con más pernoctaciones en vivienda turística: Andalucía, Catalunya, Comunitat Valenciana y Canarias. El primer puesto de este ranking de regiones es para una región croata, Jadranska Hrvatska, que hasta septiembre de 2023 superó los 30,3 millones de pernoctaciones.
Andalucía es la segunda en ese ranking con más de 25 millones de pernoctaciones, en una comunidad que en las últimas semanas ha vivido protestas en ciudades como Málaga o Cádiz y donde el Gobierno de Moreno afirma que solo el 3% de todo el parque de vivienda se destina al alquiler turístico.