La empresa española del taller de Bangladesh denuncia estar sometida a “escarnio mediático”

David Mayor, el empresario de Reus que conecta directamente la tragedia del edificio obrero de Bangladesh con España, está a punto de dar explicaciones. Mientras tanto, su madre, Rosario Rico, ha asegurado en declaraciones a eldiario.es que su hijo “está en España” y que “es el primer interesado” en ofrecer todas las “explicaciones” para esclarecer los hechos. “Está siendo sometido a un escarnio” por parte de los medios, ha subrayado.

Según las últimas cuentas presentadas por la empresa Phantom Tac, que hasta abril de 2012 se llamaba Textil Audit, Rosario Rico era la presidenta y secretaria de la Junta de Accionista. Las cuentas, que se encuentran en el registro mercantil de Tarragona, también dicen que Rico fue la primera administradora de la sociedad en el año 2004.

A partir de 2005, su hijo aparece como administrador único y no hay ninguna otra vinculación societaria de la empresa. Aunque se dice que la empresa participa al 50% con Phantom Apparels en la propiedad del edificio derrumbado, estos datos no aparecen en la información mercantil registrada por el BORME español. Si no declara estos conceptos en las cuentas, habrá que ver si los declara con efectos tributarios en el territorio español.

La pata catalana de la tragedia de Bangladesh tiene unas cuentas tan modestas que ha presentado los resultados del ejercicio con la modalidad de pyme. Su capital social apenas supera los 3.000 euros obligados por ley y el objeto de la empresa es “Servicios técnicos de ingeniería y otras actividades relacionadas con el asesoramiento técnico” y alquiler de bienes inmuebles.

En la web de la compañía aparece David Mayor como director general, junto a un socio local (Aminul Islam) que era el presidente y que sí ha sido detenido. Según las cuentas depositadas en el registro mercantil, la empresa no tuvo actividad en 2011, y en 2010 tuvo unas pérdidas de 830,48 euros.

Según la información recabada por Europa Press, la Policía Nacional no ha recibido ninguna orden internacional de captura contra mayor. En declaraciones recogidas por la agencia francesa France Press, Mayor aseguraba participar en un centro de educación para mujeres en Dacca, la capital del país, pero sentenciaba con rotundidad sobre sus negocios: “Somos una fábrica. Cada céntimo cuenta. No somos una ONG pero también tenemos preocupaciones sociales”.

Por ahora, el recuento de víctimas en la tragedia alcanza ya los 381 fallecidos. Marcas como Primark o El Corte Inglés utilizaban los talleres en el edificio para manufacturar algunas de sus prendas.