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El Euríbor abaratará apenas unos euros algunas hipotecas que se actualicen en abril al seguir estancado en el 3,72%

Daniel Yebra

27 de marzo de 2024 09:45 h

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El Euríbor abaratará apenas unos euros algunas hipotecas que se actualicen en abril al quedarse estancado cerca del 3,72% de media en marzo, desde el 3,67% de febrero. Tras el pequeño salto que ha vuelto a dar, el índice de referencia para los préstamos es algo superior al de marzo de 2023, cuando ascendió al 3,65%. Es decir, las hipotecas variables a 12 meses que se revisen en abril lo harán con un Euríbor unas décimas más alto.

El alivio será solo para los préstamos que se actualizan cada 6 meses, ya que en la segunda parte del año pasado, el Euríbor se mantuvo por encima del 4%, hasta diciembre, cuando promedió un 3,68%. Aún así, las bajadas de las cuotas de las hipotecas a las que hacen frente las familias cada mes son escasas. Sobre todo, comparadas con las importantes subidas de 2022 y de la mayor parte de 2023.

Estos aumentos fueron de cientos de euros de golpe para las hipotecas a tipo de interés variable (el 70% de las concedidas en España), que normalmente se calculan respecto a un fijo de 1 punto porcentual aproximadamente más el Euríbor. Las rebajas ahora son de unos 50 euros para un préstamo medio, a 6 meses. Las hipotecas a 12 meses volverán a encarecerse.

El Banco Central Europeo (BCE) decidió iniciar en julio de 2022 un ciclo de aumentos de los tipos de interés de referencia desde el 0% hasta dejarlo en el otoño de 2023 en el 4,5%, un máximo de 2008, para luchar contra la inflación.

El Euríbor se ha movido acorde a esta austeridad monetaria en todo este ciclo. Desde otoño, el Consejo de Gobierno del BCE esperó hasta su última reunión, en marzo, para admitir que empezará a bajar los tipos de interés oficiales en junio. Esta austeridad monetaria busca ahogar a las familias y a las empresas con el encarecimiento del crédito. Una estrategia que eleva directamente los beneficios de la banca.

Sin embargo, solo unos días después (el 20 de marzo), la presidenta de la institución, Christine Lagarde, echó un jarro de agua fría a los hipotecados y también a las familias o empresas que necesitan financiación, más barata, actualmente. Lagarde avisó de que no puede asegurar más bajadas de los tipos de interés oficiales después de un primer recorte en junio.

Esta es la razón por la que el Euríbor está estancado desde diciembre, pese a la moderación de la inflación en la eurozona, que debería anticipar las bajadas de los tipos de interés del BCE.

“Tras la primera bajada de tipos, no podremos comprometernos con una senda concreta de [recortes]”, explicó Lagarde en su última intervención pública. Las informaciones internas a las que tuvo acceso elDiario.es apuntaban a una hoja de ruta que contemplaba hasta 4 recortes de los tipos de interés oficiales en 2024 desde junio.

“Antes del final de junio contaremos con nuevas proyecciones que confirmarán si la senda de inflación [de moderación de las subidas de precios exactamente] prevista en nuestra actualización de marzo sigue siendo válida. Estas proyecciones también proporcionarán, implícitamente, más información sobre la trayectoria de la inflación subyacente [que excluye de su cálculo la energía]. Tendremos una visión más clara de la fortaleza de la recuperación y de la posible la evolución del mercado laboral y, por tanto, de las consecuencias para los salarios, los beneficios y la productividad”, expuso Lagarde.

Entonces, con estos datos adelantando una inflación media del 2,3% en el conjunto de la eurozona en 2024 y del 2% en 2025, según la previsión de marzo, o inferior, “podremos pasar a la fase de 'reversión' de nuestro ciclo de política monetaria y suavizar la orientación restrictiva”, añadió.

Efectivamente, la moderación de la inflación es ya un hecho irrefutable (en febrero bajó al 2,6% en el conjunto de la eurozona, y al 2,8% en España) y el riesgo empieza a ser un crecimiento económico débil en el medio plazo, con la excepción destacada de nuestro país.