España es el país europeo con mayor despliegue de fibra óptica y uno de los primeros del mundo, ha afirmado hoy el presidente de Telefónica España, Luis Miguel Gilpérez, en la ponencia inaugural del curso “Industria 4.0 y su repercusión socioeconómica” de la Universidad de Extremadura.
“Algo que me resulta bastante impresionante es que si sumamos las conexiones de fibra que tienen ingleses, italianos, franceses y alemanes, la cifra está por debajo de las que tenemos en España”, ha agregado.
Este liderazgo se debe en buena medida, ha resaltado Gilpérez, al esfuerzo de la compañía Telefónica, que ha sentado las bases de la digitalización en España “cubriendo el país con la mejor red de ultrabanda ancha y ofreciendo servicios digitales a ciudadanos, empresas y Administraciones públicas”.
Este compromiso no solo se mantiene sino que “se refuerza, a pesar de la reciente revisión del marco regulatorio que obliga a Telefónica a compartir su infraestructura en las zonas menos competitivas”.
El esfuerzo inversor, sumado a la transformación de la red y a los servicios que sobre ella se prestan, dará como resultado que 2016 sea el primer año que se cierre con un número mayor de clientes de fibra que de cobre en el mercado residencial, ha apuntado.
La compañía, en lo que se refiere a despliegue de fibra óptica, se plantea llegar a 25 millones de hogares en los próximos cuatro años, lo que supone “la práctica totalidad de los que existen en España”, ha apostillado Gilpérez.
“Telefónica cubrirá con su red de banda ancha ultrarrápida la práctica totalidad de los hogares españoles”, incluyendo las poblaciones de menos de 1.000 habitantes, “convirtiendo a España en el país más conectado de Europa y uno de los más conectados del mundo con banda ancha ultrarrápida, sólo por detrás de Japón y Corea del Sur”, ha afirmado.