Madrid, 20 oct (EFE).- El consejero madrileño de Economía, Empleo y Competitividad, Manuel Giménez (Cs) ha señalado que ante la cercanía de la campaña de navidad y su impacto en la economía es momento de reflexionar la conveniencia de un “paréntesis” de paro de la actividad en vez de seguir “a medio gas”, lo que está “estrangulando” a la economía.
En declaraciones en Capital Radio Giménez ha indicado que en los últimos meses, con la actividad “a medio gas”, hay sectores, como el textil, que están facturando un 41 % menos de media que otros años, y sectores que incluso llegan a facturar solo un 9 %. “Con eso no se puede sobrevivir”.
De ahí que haya planteado “reflexionar” sobre si es mejor seguir “de forma permanente” con la actividad “a medio gas” o si se debe “hacer un paréntesis”, con un parón de la actividad que permita reducir la cifra de contagios a lo que exige la Unión Europea, y así llegar a la campaña de navidad -entre noviembre y Reyes- con “la mayor normalidad posible” y sin restricciones.
“No sé si somos lo suficientemente conscientes, pero desde finales de noviembre a principios de enero el sector comercial de la Comunidad de Madrid factura entre el 40 y el 50 % de todo el año”, ha especificado, cifras muy similares para el caso de la hostelería y que incluso van más allá en sectores como el textil, que entre el Black Friday y el 6 de enero vende el 50 % de todo el año, o jugueterías o perfumerías, que en este periodo facturan el 60 % de todo el año.
Algo similar ocurre con los empleos, según el consejero, que ha recordado que entre diciembre y enero del año pasados se firmaron en Madrid casi medio millón de contratos, “uno de la cada cuatro contratos de todo el año”.
Por eso, ha seguido diciendo, es tan importante “salvar la campaña navideña” y llegar a noviembre “en las mejores condiciones, con las menos restricciones posibles”.
Giménez ha recalcado que no es su Consejería sino la de Sanidad la que debe decidir con qué medidas se pueden lograr los objetivos de contagios que marca la UE, pero ha pedido que las restricciones que se terminen adoptando sean “desde el consenso y el diálogo”, porque “no hay nada que dañe más a la economía y al empleo que la incertidumbre”.