La portada de mañana
Acceder
16 grandes ciudades no están en el sistema VioGén
El Gobierno estudia excluir a los ultraderechistas de la acusación popular
OPINIÓN | 'Este año tampoco', por Antón Losada

El Gobierno trabaja con la CNMV y BME para evitar la marcha de Ferrovial ante el rechazo de un Del Pino a la mudanza

El Gobierno insiste en que sigue “trabajando” con la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y Bolsas y Mercados Españoles (BME) para que las empresas españolas tengan “las mejores condiciones de cotización y financiación” y tratar de evitar la anunciada marcha de Ferrovial a Países Bajos, tras publicar este viernes El Confidencial que Leopoldo del Pino, cuarto accionista del grupo con un 4,25%, va a votar en contra de la mudanza en la junta del próximo 13 de abril.

Según este medio, el hermano del presidente de Ferrovial, Rafael del Pino, entiende que hay tiempo para que España adapte su marco normativo y facilite que la constructora cotice en Wall Street, una de las razones que ha expuesto la multinacional para justificar su cambio de sede.

Leopoldo del Pino, que no pertenece al consejo de administración de Ferrovial, votaría así en contra de la operación, pero nada le impediría ejercer luego (tiene de plazo hasta mayo) el derecho de separación y vender sus títulos.

Si el multimillonario vendiera sus acciones, obligaría a Ferrovial a desembolsar más de 800 millones de euros y podría comprometer la calificación de la deuda de la compañía, que ha condicionado el traslado a Países Bajos a que un máximo del 2,5% del capital contrario a la mudanza venda sus participaciones, lo que le obligaría a pagar el equivalente a 500 millones.

Fuentes del Ministerio de Asuntos Económicos insisten en que “no hay ninguna razón que justifique la decisión anunciada” y señalan que, tras un análisis realizado junto a la CNMV y BME “para identificar posibles factores diferenciales del mercado español y, en su caso, medidas, para facilitar la doble cotización a las empresas españolas, no se ha identificado ”ningún obstáculo o desventaja que impida a la compañía cotizar en la bolsa estadounidense y en la española“.

“Seguimos trabajando con el regulador y el mercado de valores y, por supuesto, con la empresa, como con todas las empresas españolas, para fomentar e impulsar el que las empresas españolas dispongan de las mejores condiciones de cotización y financiación y sigan estando entre las más competitivas”, y “lo seguiremos haciendo, con CNMV y BME, para que tengan las mejores condiciones de financiación y acceso a los mercados internacionales”, indica el ministerio.