De Guindos elige a dos colaboradores de FAES para controlar el crédito público en España

Dos colaboradores asiduos de la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES), el laboratorio de ideas del PP, y dos exdirectivos de Banco Santander, uno de ellos, también exalto cargo del Ministerio de Economía durante la época de Rodrigo Rato. Es el perfil elegido por el Gobierno para cubrir las cuatro vacantes que el Ejecutivo se ha sacado de la manga para tomar el control del Instituto de Crédito Oficial (ICO) más allá de la presente legislatura.

Los cuatro nuevos “consejeros independientes” elegidos para el ICO, todos hombres, son personas de confianza del ministro de Economía, Luis de Guindos, encargado de proponer su elección. Dos de ellos tienen fuertes vínculos con FAES. Los tentáculos de la fundación que preside José María Aznar llevan tiempo instalados en el seno del ICO. El 'think tank' del PP fue el anterior destino profesional del actual director general de Estrategia y Financiación del banco público, Fernando Navarrete, que hasta 2012 fue director de Economía y Políticas Públicas de FAES. Le sustituyó en ese puesto Miguel Marín, vinculado a Eneas, una consultora que ha cobrado cerca de 2 millones de euros de Gobiernos del PP por ayudarles a ahorrar.

Como ya adelantó eldiario.es el 25 de octubre, el Ministerio de Economía ha aprovechado una disposición final de una ley publicada el 2 de octubre para dejar en manos de personas ajenas al sector público las principales decisiones del ICO. Los cuatro vocales recién elegidos a propuesta de Economía tendrán un voto “doble” cuando se decidan en el consejo del ICO operaciones financieras. Esto hará de facto que las decisiones del banco público queden en sus manos, ya que el resto del consejo, incluido el presidente, solo sumaría siete votos.

En la práctica, tendrán derecho de veto sobre las decisiones que afecten al activo y pasivo de la organización, esto es, al crédito del banco público, en virtud de ese cambio legal incluido de tapadillo por el Gobierno en la recta final de la legislatura.

El ICO asegura que con estos nombramientos “se refuerza” el peso de los gestores independientes “y se consigue una mayor transparencia e independencia en el funcionamiento del Consejo para asegurar una asignación eficaz de la actividad financiera del Instituto”. “De este modo el Gobierno Corporativo de la entidad se encuentra alineado con las mejores prácticas europeas en instituciones homólogas a ICO”, añade.

Ahora, y gracias a este 'intento' de despolitización del organismo, el marchamo de FAES va a llegar hasta el Consejo General del único banco público que hay en España. La entidad está presidida desde agosto de 2014 por la exdiputada del PP Irene Garrido, primera mujer al frente del organismo desde su creación en 1971. Los cuatro profesionales “independientes” a los que, en los estertores de la legislatura, ha designado el Gobierno como nuevos consejeros, van a tener en sus manos las decisiones de calado que tome el organismo respecto a concesiones de crédito en los próximos tres años.

La nueva normativa impone como únicos requisitos para esos nombramientos que se trate de “personas de reconocido prestigio y competencia profesional en el ámbito de actividad del Instituto”, entendiendo su independencia como que el candidato en cuestión “no sea personal al servicio del Sector Público”. Sin embargo, tres de estos elegidos pertenecen al cuerpo de Técnicos Comerciales del Estado, el mismo al que pertenecen Guindos y otros ministros o altos cargos como José Manuel Soria o el secretario de Estado de Comercio y ex directivo de FAES, Jaime García-Legaz.

El pasado viernes, el Gobierno se apresuró a nombrar a los nuevos vocales mediante un acuerdo del Consejo de Ministros, sin que se haya publicado siquiera el reglamento que debe regular la “causa de cese” de estos consejeros y el régimen jurídico al que quedarán sometidos. Un Real Decreto que está pendiente de aprobación y que ya se sometió a audiencia pública, según fuentes de Economía, que añaden que su retribución será muy inferior a la de un alto cargo de la Administración: unos 1.000 euros brutos mensuales, a razón de una reunión al mes (según datos del informe de Gobierno corporativo del banco público en 2014).

Estos son los perfiles de los nuevos vocales, cuyo mandato será de tres años e irá, por tanto, mucho más allá de la presente legislatura:

Rafael Pampillón Olmedo: doctor en Ciencias Económicas por la Universidad de Barcelona y Máster por el IESE, lleva toda su vida profesional dedicado a la docencia. Ha sido profesor titular del Política Económica en la Universidad de Barcelona, catedrático de Economía Aplicada en la Universidad de Extremadura y desde 1993, catedrático de Economía Aplicada en la Universidad San Pablo-CEU y profesor de Economía en el Instituto de Empresa. A esta escuela de negocios estuvo vinculado el propio Guindos desde febrero de 2010 hasta su nombramiento como ministro. Guindos fue director del Centro PwC/IE del Sector Financiero, dedicado a analizar los retos del sector financiero ante eventuales crisis.

La referencia del Consejo de Ministros que da cuenta del nombramiento de Pampillón omite el hecho de que, desde 1996, el economista es miembro del Consejo Consultivo de Privatizaciones, un organismo creado en julio de ese año por el Gobierno de Aznar y que desde esa fecha emite dictámenes previos preceptivos sobre los procesos de venta de empresas públicas que han puesto en marcha los sucesivos gobiernos.

Pampillón es colaborador habitual de FAES, para la que ha dirigido diversos cursos y que incluso le editó un libro sobre recursos pesqueros publicado en 1996. Más recientemente (en julio del año pasado), coescribió dos capítulos incluidos en el estudio 'Reflexiones sobre el mercado de trabajo: continuar la reforma'. El economista es uno de los muchos autores a los que ha copiado textos el director del Instituto de Estudios Fiscales (IEF), José Antonio Martínez Álvarez, íntimo amigo del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro. En un libro editado en 2010, Martínez Álvarez, más conocido como 'el plagiador de Hacienda' (ministerio del que es alto cargo), fusiló parte de un artículo de Pampillón. No consta que este se haya quejado por ello.

Jaime Requeijo González: doctor en Ciencias Económicas y Licenciado en Derecho, y perteneciente al Cuerpo de Técnicos Comerciales y Economistas del Estado, ha sido director general de Política Arancelaria e Importación del Ministerio de Comercio, consejero delegado de Caja Postal, consejero del Banco Zaragozano, director del Colegio Universitario de Estudios Financieros (CUNEF) y consejero del Banco de España. Actualmente es director académico del Grado de Administración y Dirección de Empresas del Instituto de Estudios Bursátiles, y, como Pampillón, vocal del Consejo Consultivo de Privatizaciones desde su creación.

Requeijo fue propuesto como consejero del Banco de España por Rodrigo Rato en 1998 y formó parte del máximo órgano de gestión del organismo supervisor hasta su jubilación en 2004. Durante años, fue un fijo en el denominado “Observatorio Económico” de FAES, en el que, junto a otros economistas de la órbita del PP, entre ellos el propio Guindos, nutría periódicamente de recetas a la fundación. En marzo de 2013, fue nombrado consejero de la extinta NCG a propuesta del FROB, el fondo de rescate de la banca, que depende del propio Guindos. El cargo le duró unos meses, porque banco fue vendido poco después al banco venezolano Banesco.

José Manuel Reyero García: licenciado en Ciencias Económicas por la Universidad Complutense y perteneciente al Cuerpo de Técnicos Comerciales y Economistas del Estado, Reyero fue compañero de gabinete de Guindos en la anterior etapa del actual ministro en el Gobierno. En concreto, fue máximo responsable del Instituto de Comercio Exterior (Icex), adscrito al Ministerio de Economía, desde 1998 hasta 2004.

Reyero, que antes de incorporarse al Icex fue subdirector general adjunto de Banco Santander, responsable de la financiación internacional, coincidió con Guindos en Economía en un periodo en el que, sucesivamente, el hoy ministro fue asesor del ministerio, secretario general y secretario de Estado. En aquella época, entre 2000 y 2002, el propio Guindos fue vocal del ICO por su condición de secretario General de Política Económica y Defensa de la Competencia.

Tras la llegada del PSOE de José Luis Rodríguez Zapatero al poder, la entonces presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, creó para Reyero una empresa a su medida, Promomadrid, con el objetivo de tratar de atraer inversiones extranjeras a la capital. De ese periodo (2004 y 2005) data su participación en varios seminarios en FAES. Reyero estuvo al frente de Promomadrid hasta su cese como consejero delegado en 2007. Entonces, se incorporó como consejero económico y comercial a la Embajada de España en Marruecos.

José María Espí: directivo de Santander durante tres décadas, hasta su jubilación este mismo año (el banco comunicó su cese como director de Control y Valoración Interna de Riesgos el pasado 30 de junio), Espí es Doctor en Ciencias Económicas y Empresariales y profesor titular en la Universidad Autónoma de Madrid. Se incorporó al Santander en 1985 tras ocupar, entre otros cargos públicos, la secretaría general del Ministerio de la Presidencia con Leopoldo Calvo Sotelo en el último gobierno de UCD.

Espí fue durante décadas uno de los directivos de confianza del fallecido presidente del Santander, Emilio Botín. Estuvo imputado, junto a él y otros siete directivos del Santander, por presuntos delitos contra la Hacienda Pública y apropiación indebida relacionados con un plan de incentivos concedido por Banesto a su cúpula entre 1994 y 1998. La Audiencia Provincial de Cantabria archivó el procedimiento en febrero de 2007.

Sin vínculos evidentes con FAES, la conexión de Espí con el actual equipo de Economía le viene por vía familiar. Una de sus hijas, Cristina Espí, técnico comercial como él, es asesora del ministerio desde 2009. Desde marzo de 2013 hasta marzo pasado, la hija del nuevo consejero del ICO ha sido asesora de política financiera en la Dirección General de Análisis Macroeconómico y Economía Internacional del ministerio. Desde este año, es vocal en la Dirección General de Comercio Internacional e Inversiones de la Secretaría de Estado de Comercio, también dependiente de Economía. Espí y su hija administran, junto a otros miembros de su familia, una Sicav, Garozco 2000, que actualmente atesora un patrimonio de 4,386 millones de euros, según los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).