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El Gobierno, convencido de que Bruselas celebrará el plan de reformas y mejorará sus previsiones de déficit

Europa Press

Madrid —

El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, se ha mostrado convencido de que Bruselas valorará positivamente el plan de reformas aprobado el pasado viernes por el Consejo de Ministros y mejorará sus previsiones de déficit para España cuando lo haga.

“Se reducirá sin dudas”, ha señalado De Guindos en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, donde ha negado que se vayan a aprobar nuevos ajustes a cambio de los dos años adicionales que se han concedido a España para situar el déficit por debajo del 3%. “No hay nuevos ajustes, sino que tenemos dos años más para llegar al 3% y el déficit público en lugar de ser el 4,5% es el 6,3%, entre 18.000 y 20.000 millones más de margen”, ha dicho.

El titular de la cartera de Economía ha recordado que el Fondo Monetario Internacional (FMI) ya dio la bienvenida al plan nacional el mismo viernes y se ha mostrado convencido de que la Comisión hará lo mismo. A su parecer, al analizar el conjunto de reformas que se han puesto en marcha en España, se observa que “no existe parangón” en las últimas décadas ni en el ritmo de las mismas ni en la magnitud de los cambios.

En concreto, ha resaltado las medidas para hacer frente a la consolidación fiscal, la “revolución” que supone la reforma financiera, los avances en transparencia y la fexibilización del mercado de bienes y servicios, entre otras cosas. De hecho, se ha referido expresamente a la Ley de Estabilidad, que obliga a tener unas cuentas equilibradas y a dar transparencia a los datos, haciendo frente así a una de las fuentes fundamentales de preocupación de los inversores internacionales.

De Guindos ha asegurado que todos estos avances se están reconociendo fuera de España, y ha pedido a la oposición que analice la evolución de los costes de financiación del país, que se financia a diez años a un tipo inferior al 4%, cuando hace meses lo hacía por encima del 7%. La situación que se vivió en el pasado, a su parecer, demostraba que los mercados apostaban por un “rescate inmediato” de la economía española, una idea que ahora ha desaparecido y envía la “mejor señal” de que las circunstancias económicas están en un “momento de giro”.

Sobre las cifras concretas, De Guindos ha dicho que la caída del 1,5% que plantea Bruselas para este año no supone una gran diferencia respecto al 1,3% que ha previsto el Gobierno, mientras que la recuperación prevista para el año que viene sí que es más intensa (0,9% previsto por Bruselas frente al 0,5% previsto por el Gobierno). Para el ministro, la gran divergencia entre unas cifras y otras está en el empleo, ya que la Comisión cree que España será capaz de generar puestos de trabajo el año que viene, lo que supone una “modificación sustancial” respecto a lo que se pensaba hasta ahora.

Crear empleo creciendo un 1%

En este sentido, De Guindos ha recordado que antes se decía que España no era capaz de crear empleo si no crecía a una tasa superior al 2%, mientras que ahora, tras la reforma laboral, se ve que con ritmos “más moderados” de crecimiento --próximos al 1%-- el país deja de destruir puestos de trabajo y los empieza a generar.

En cualquier caso, ha asegurado que no es necesario quedarse con unas previsiones o con otras, puesto que el Gobierno y la Comisión cumplen funciones diferentes. Así, el Gobierno pretende ser “muy creíble” con las nuevas cifras y generar “mucha confianza”, por lo que planta datos “extremadamente prudentes”, mientras que la Comisión Europea intenta, fundamentalmente, determinar la evolución macroeconómica en los próximos dos años.

Además, ha recordado que Bruselas, a pesar de las cifras, ha puesto de manifiesto la “enorme corrección” de desequilibrios que ha hecho el país tanto desde el punto de vista de la inflación como del déficit exterior. “Más allá de las cifras concretas y específicas, se indica que la economía es capaz de crear empleo con menos crecimiento y que los desequilibrios se han ido corrigiendo”, ha señalado.

“Cifras pruedentes y conservadoras”

Por su parte, la vicepresidenta y portavoz del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha calificado de “prudentes y conservadoras” las previsiones españolas, y ha explicado que su objetivo es ganar credibilidad y no engordar las cifras de crecimiento, como en años anteriores.

De hecho, ha asegurado que son “especialmente conservadoras” para los años 2014 y 2015, cuando Bruselas ve ya mucho más crecimiento y creación de empleo. En este sentido, ha explicado que el Ejecutivo ha extremado la prudencia para trabajar con cifras “creíbles” que permitan luchar contra el cumplimiento de las previsiones.

En cualquier caso, ha asegurado que el Gobierno no cejará en liderar un plan de reformas que saque al país de la crisis, algo que no es “muy común” en el conjunto de países del entorno y que parte de la corrección de desequilibrios de la economía española.

Se bajarán los impuestos cuando se pueda

Por otro lado, Santamaría ha vuelto a reiterar que el Gobierno llevará a cabo “la eliminación de algunas de las subidas” de impuestos que ha aprobado, “en la medida de lo posible y cuando lo permitan las nuevas necesidades de financiación”.

Sáenz de Santamaría justificó la subida de impuestos para avanzar en la consolidación fiscal, y destacó que la reducción del déficit en 2012 se ha debido en un 62% al recorte de los gastos, especialmente de los administrativos, y el 32% restante a la subida de los impuestos.

En este sentido, recordó que en 2012 y lo que va de 2013 se han perdido 300.000 empleos en las administraciones públicas, lo que, a su juicio, demuestra el “ajuste estructural” que se está llevando a cabo en el sector público. “Se han acometido muchas reformas y quedan dos muy importantes, la reforma de la administración local, que ahorrará 8.000 millones durante los primeros dos años, y la reforma del conjunto de las administraciones públicas”, añadió.

En la misma línea, De Guindos indicó que el esfuerzo de consolidación fiscal se ha tenido que realizar a través de los instrumentos disponibles, con un recorte del gasto que ha supuesto dos tercios del esfuerzo y el tercio restante por la subida de impuestos. “Cuando la situación se vaya normalizando, la subida de impuestos se irá revirtiendo”, subrayó.