Madrid, 27 jul (EFE).- Los impagos de los alquileres de viviendas se han triplicado durante los meses de confinamiento como consecuencia de la covid-19, hasta situarse entorno al 15 %, según la Asociación de Propietarios de Vivienda en Alquiler (ASVAL), que reclama un fondo de 700 millones de euros para ayudar a 350.000 familias.
ASVAL ha explicado en un comunicado que, en este periodo, la morosidad ha pasado de un 5 % a un 15 % y prevé que siga incrementándose en los próximos meses si no se toman medidas efectivas.
En su opinión, las ayudas propuestas por las administraciones públicas “no están siendo efectivas para paliar las dificultades de los inquilinos más vulnerables en el pago del alquiler”, lo que perjudica “a millones de propietarios particulares”.
Desde ASVAL han explicado que solo un 1,3 % de los inquilinos de viviendas que pertenecen a la asociación han mostrado interés en solicitar préstamos con garantía pública como medida para hacer frente a la imposibilidad de pago de las rentas, lo que “confirma la escasa utilidad que está teniendo esta medida entre las familias con mayores dificultades económicas”.
Además, ha señalado que, en el caso de las ayudas directas para el pago del alquiler de las Comunidades Autónomas, la dotación presupuestaria es insuficiente debido a la alta demanda por parte de los inquilinos.
Así, ASVAL ha reclamado a la Administración un paquete de medidas de apoyo directo para los inquilinos en situación de vulnerabilidad a través de la creación de un fondo de más de 700 millones de euros.
El fondo podría ayudar a 350.000 familias en situación de vulnerabilidad para reducir la tasa de esfuerzo en el pago de la renta del 48 % al 30 % de sus ingresos mediante una ayuda pública de 2.000 euros anuales por unidad familiar.
La asociación también ha solicitado que se incremente la seguridad jurídica tanto en materia de ocupación como de las últimas iniciativas relacionadas con el control de los precios del alquiler.
La directora general de ASVAL, Beatriz Toribio, ha señalado que el control de precios “no es la solución para los problemas del mercado del alquiler” porque “necesitamos favorecer la oferta, no contraerla”.