Miles de personas han salido hoy a la calle en más de 50 ciudades secundando las reivindicaciones de la Cumbre Social, auspiciada por CCOO y UGT, que ha dejado “en manos del Gobierno” la convocatoria de una huelga general en noviembre si los recortes no se someten a consulta popular.
Las marchas se han repetido este mediodía en todo el territorio nacional para protestar contra la política económica del Gobierno y contra el proyecto de presupuestos generales del Estado para 2013 que, según la plataforma, “está al servicio de la banca”.
La manifestación de Madrid ha discurrido entre la plaza de Legazpi y Atocha y a ella se han sumado, según los convocantes, 72.000 personas, aunque la Delegación del Gobierno no ha facilitado datos de asistencia.
En una rueda de prensa previa a la marcha, los secretarios generales de CCOO y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, han resaltado que la convocatoria de un paro general depende del Ejecutivo, porque es quien tiene en su mano sacar adelante los presupuestos generales del Estado.
Méndez ha indicado que los sindicatos “insistirán hasta la saciedad” para que se consulte a la ciudadanía sobre “el camino” escogido para salir de la crisis que, en su opinión, es “un camino de perdición”.
Además, ha asegurado que “aunque el Gobierno no lo diga, todo el mundo sabe que las pensiones se van a tocar”, puesto que no se revalorizarán tal y como establece la ley de la Seguridad Social.
Toxo ha exigido que se convoque un referéndum sobre los recortes antes de que la situación social se vuelva “explosiva e insostenible”.
Asimismo, ha dicho que los sindicatos españoles propondrán a la Confederación Europea de Sindicatos una “jornada de acción europea” en la reunión que del próximo día 16.
Las manifestaciones de hoy han coincidido con la Jornada Mundial por el Trabajo Decente, que este año tenía el lema: “Juventud sin empleo, sociedad sin futuro”.
En Barcelona, 1.500 personas según la Guardia Urbana y 20.000, según los organizadores, se han manifestado en una jornada que los sindicatos catalanes consideran como un avance de una protesta unitaria en el sur de Europa contra las políticas de austeridad.
En Castilla y León, miles de personas se han movilizado en las ocho capitales de provincia contra los recortes del Gobierno, al tiempo que han aprovechado las protestas para reclamar una huelga general en noviembre.
La marcha de Murcia ha congregado a unas 5.000 personas, muchas de ellas familias con hijos, mientras que en Zaragoza se han podido ver pancartas que criticaban unos recortes “que dejan a la juventud sin futuro”.
En Vitoria y Bilbao, cientos de personas han marchado por el centro de la ciudad coreando consignas como “Contra los recortes huelga general” o “¿Dónde están? no se ven los empleos del PP”.
A la convocatoria de Pamplona se han unido colectivos como el sindicato de Estudiantes o el Consejo de la Juventud, que en su manifiesto ha emplazado a modificar de forma “profunda” las políticas económicas.
En Palma de Mallorca, unas 400 personas han recorrido el centro urbano denunciando unos presupuestos “injustos” que comportan “más paro, recortes y menos protección social” mientras que las dos capitales canarias han reunido a unas 800 que han exigido “un giro radical” a los ajustes del Gobierno.
La marcha de Gijón, en Asturias, ha finalizado con la lectura de un manifiesto en el que se denuncia la “falta de transparencia” y el “ocultismo deliberado” en las medidas del Ejecutivo.
Las capitales andaluzas han sido también el escenario de protestas que han congregado a miles de personas contra los presupuestos generales.
En Galicia, las manifestaciones serán mañana aunque, según ha explicado Toxo, las delegaciones provinciales del Gobierno en Pontevedra y Orense “han prohibido” las movilizaciones en su territorio alegando que coinciden con la campaña electoral.
Además de CCOO y UGT, la Cumbre Social integra más de 150 organizaciones, como el sindicato de funcionarios CSI-F, la Unión Sindical Obrera (USO) o asociaciones de educación, sanidad e inmigración.