El presidente de Bolivia, Evo Morales, inauguró hoy un aeropuerto que servirá a la ciudad sureña de Sucre, la capital constitucional del país, en reemplazo de la actual terminal aérea que operó los últimos 40 años en función de las condiciones climatológicas.
Morales estuvo acompañado en el acto por el gobernador de Chuquisaca, el oficialista Esteban Urquizo; el alcalde de Sucre, Iván Arciénega, también del partido gobernante, algunos ministros, parlamentarios y sindicalistas afines a su Ejecutivo.
Las autoridades locales resaltaron la importancia de la nueva terminal aérea para facilitar la conexión permanente de la región con el resto de Bolivia y el exterior.
Sucre, situada en la región de Chuquisaca, es la capital constitucional de Bolivia y sede del poder Judicial, mientras que el Ejecutivo y el Legislativo están en La Paz.
Los vuelos desde y hacia Sucre se realizaron hasta el pasado 14 de mayo en el aeropuerto Juana Azurduy de Padilla, cuyas operaciones se producían solamente de día y estaban supeditadas al clima, por lo que los viajes quedaban suspendidos cuando había poca visibilidad.
El aeropuerto internacional de Alcantarí fue construido en 345 hectáreas en el municipio de Yamparaez, a poco más de 30 kilómetros de Sucre, con una inversión de 52,7 millones de dólares.
Con una pista de 3.600 metros de longitud y 45 metros de ancho, la nueva terminal aérea podrá recibir aviones de tipo Boeing 747-400 precisó el ministro de Obras Públicas, Milton Claros.