En plena escalada del recibo de la luz, el consejo de administración del operador del mercado eléctrico (Omel) se reúne este miércoles para debatir el cese de su presidente, Ignacio Grangel, según confirman a eldiario.es fuentes próximas a su máximo órgano de gestión.
En la reunión, que todavía no ha concluido, consta como único punto del orden del día el cese de Grangel, un abogado del Estado que fue colocado en el puesto a finales del año pasado por el entonces ministro de Energía, Álvaro Nadal, con un sueldo que ronda el medio millón de euros. Su cese, paralelo a la espiral inflacionista que vive el mercado mayorista de electricidad (el denominado pool), se enmarca en un mandato en el que no ha logrado el consenso de los accionistas de Omel.
En el sector se especulaba con la salida de Grangel desde la llegada de Pedro Sánchez a Moncloa. Las empresas eléctricas van a proponer el nombramiento como presidenta de Carmen Becerril, antigua directiva de Acciona con una amplísima experiencia en el sector. Becerril, que fue directora general del Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético (IDAE) y directora general de Política Energética y Minas con José María Aznar, preside desde enero pasado la comercializadora Fortia Energía.
A finales de julio, Grangel ya se quedó en minoría en el consejo tras intentar poner en marcha la criba de varios directivos de la empresa para colocar a más afines. Sus planteamientos, que no llegaron a concretarse en propuestas concretas por la falta de apoyos, encontraron especial rechazo entre los accionistas portugueses, cuestión no menor en una empresa lusa al 50% y en la que la presidencia es rotatoria entre los dos países.
En lo que ha durado su mandato, Grangel, que desde este año es también consejero “independiente” en Enagás, ha colocado en Omel a su sucesor como jefe de gabinete de la Secretaría de Energía y se ha topado con el rechazo mayoritario del consejo de administración de la compañía a algunas de sus propuestas.
Grangel está considerado uno de los artífices de la reforma energética de José Manuel Soria. Fue director de gabinete de los dos primeros secretarios de Energía de Mariano Rajoy (el segundo de ellos fue Alberto Nadal, hermano gemelo de Álvaro). Tras un breve paso por Red Eléctrica (que le creó un puesto directivo a medida), recaló en Omel a instancias del entonces ministro. El nombramiento ya despertó entonces recelos de parte del consejo.
Omel gestiona el mercado diario e intradiario de electricidad con el que se fijan los precios de la luz en España y Portugal. No tiene participación del Estado pero está fuertemente regulada por la Secretaría de Estado de Energía, ahora adscrita al Ministerio para la Transición Ecológica. La sociedad es de capital privado (una veintena de accionistas: empresas del sector energético y bancos, fundamentalmente) y se financia con los peajes eléctricos (parte regulada del recibo) que pagan los usuarios.