Cambio de ciclo en el sector de la telefonía. Las operadoras han arrancado el año con cambios de estrategias comerciales enfocadas a subir los precios de sus productos. La subida de costes por la inflación ha presionado a las grandes compañías a romper con años de bajadas de precios. Movistar, Orange y Vodafone han anunciado en los últimos meses un aumento de los precios de sus servicios que se comienzan a aplicar ahora, mientras que MásMóvil apuesta por elevar el coste de servicios añadidos. Solo Digi irrumpe en este tablero con una nueva bajada de precios, apretando las tuercas de la guerra comercial que han vivido las operadoras en el último lustro.
Los servicios de telefonía han sido una rara avis en los últimos tiempos en España. Ante una inflación desbocada, especialmente por los precios de los alimentos, las operadoras han vivido un recorrido en el sentido opuesto. Los datos desagregados del INE sobre los Índices de Precios al Consumo señalan en diciembre que, frente a una inflación del 5,7%, los servicios de telefonía fija estaban sin cambios, los de telefonía móvil caían un 6,4% y los de los servicios empaquetados (teléfono y fibra) retrocedían sus precios un 0,7%. No solo ha afectado a los servicios, también a los dispositivos, con una caída de precios del 6% pese a la inflación generalizada.
Este ha sido el día a día de las operadoras de telefonía desde hace casi cinco años. La irrupción de nuevos operadores en una batalla prácticamente controlada por las tres grandes compañías se hizo en base a batallas de precios. Esto ha llevado a una bajada de coste para los hogares en los productos más básicos como las líneas de móvil y la fibra y un estrechamiento de los márgenes para las grandes empresas del sector. Estas, tanto en España como en Europa, han animado a favorecer por parte de los reguladores la concentración entre operadoras que permitiera subir precios.
Ahora, la estrechez de estos márgenes y la irrupción de la subida de costes ha llevado a las tres grandes operadoras a anunciar una subida de precios generalizada en muchos de sus productos. Las grandes compañías achacan a estos costes disparados la necesidad de actualizar sus tarifas. Sin embargo, todas ellas recalcan que se trata de subidas inferiores a los niveles de inflación del conjunto de la economía. El curso cerró con una inflación media del año del 8,4%.
La primera en anunciar una subida de precios fue Vodafone. La compañía británica subirá a finales de enero 4 euros al mes de media sus tarifas, en línea con su anuncio el pasado verano de vincular sus precios con la evolución del IPC, tal y como ya realiza en otros países como Reino Unido. Esta subida es una media, ya que para aquellos que tengan contratos de solo móvil será de 2,5 euros y los planes convergentes subirán 5,5 euros. Supone un aumento del 6,5%, tomando como referencia el IPC de octubre. “Vodafone impulsa esta medida con el objetivo de frenar el impacto de la inflación en los costes, energía y proveedores y hacer frente al ritmo de inversión en infraestructuras de red”, apuntan desde la compañía.
Movistar, por su parte, ha comenzado a aplicar a mediados de mes su propia subida, que deja fuera a su marca de bajo coste O2. En el caso de la filial de Telefónica, se ha aprobado una subida del 6,8% de media, que difiere en función de los servicios que lleven aparejados los paquetes contratados.
Orange ha sido la tercera en anunciar un movimiento en este sentido. En su caso, no se aplicará hasta el mes de marzo, dos meses más tarde que sus competidores. La subida anunciada por la francesa supone incrementar en dos euros los precios de los servicios que no tengan el fútbol contratado y de cinco euros al mes en el caso de contar con las retransmisiones de este deporte en el paquete televisivo. Tanto Orange como sus rivales llevan semanas avisando a sus clientes del cambio en las tarifas.
MásMóvil, uno de los actores principales en la guerra de precios del último lustro, ha apostado por una situación intermedia. No ha hecho una subida de precios generalizada y los paquetes de servicios contratados mantendrán su mismo coste. Sin embargo, sí ha elevado el precio de los productos complementarios a estos paquetes, como las líneas extra y otros servicios añadidos.
El comparador de precios Kelisto señala, además, que se está produciendo un encarecimiento en las ofertas que durante un primer año ofrecen precios rebajados. “El resultado de las subidas directas e indirectas –a través de la retirada de planes baratos y promociones- se traduce en un escenario de precios más altos, sobre todo si revisamos los costes de contratación durante el primer año, que son los que en muchos casos han perdido su rebaja inicial”, señalaba en un reciente análisis de los cambios en el sector de las telecomunicaciones.
Sin embargo, una operadora ha anunciado la batalla en el sentido contrario. Digi, una compañía rumana de bajo coste, se ha convertido en los últimos años en la principal operadora en captación de nuevos clientes y es ya la quinta mayor compañía en España. La operadora ha anunciado una rebaja en los precios de algunos servicios. El operador rebajará así en uno o dos euros la contratación de líneas móviles junto a sus paquetes de fibra óptica y su fibra Pro-Digi rebajará su precio desde los 30 a los 25 euros, según un comunicado emitido esta semana. El grupo cuenta actualmente con algo más de 4 millones de clientes.
Aunque en el sector se conoce la política de precios habitual en Digi, algunas fuentes no niegan su sorpresa ante el anuncio realizado esta semana por la firma rumana. Ha llamado la atención que opte por ser más agresivo en un contexto de aumento de costes que afecta a todas las compañías por igual y hay quien pone en duda que se pueda sostener esta política en el tiempo.
Digi ha sido, junto con otras marcas como Finetwork o Avatel, las que más han dinamizado el sector en el último ejercicio. El tamaño de estas compañías hace que la CNMC no desagregue por cada una de ellas los datos de número de clientes, englobando a todas ellas bajo el término Operador Móvil Virtual. Este segmento ha ganado entre enero y octubre del pasado año, último mes con datos de la CNMC, 726.000 clientes. MásMóvil ha ganado 502.000, frente a los 271.000 de Vodafone, los 94.000 de Orange o la pérdida de 34.000 clientes de Telefónica. El pasado curso ya ha dado síntomas de un enfriamiento en la guerra de precios de los últimos años, reduciendo el ritmo de los cambios entre compañías.
Las compañías de telecomunicaciones arrancan 2023 con subidas de precios en un ejercicio que está llamado a generar un importante cambio en la configuración del sector en España. El pasado curso, MásMóvil y Orange anunciaron un acuerdo para fusionar sus negocios en España, convirtiéndose en un gigante que supera en algunos negocios a Telefónica, hasta ahora líder indiscutible. El acuerdo sigue cumpliendo hitos, a la espera de que en los próximos meses Bruselas analice el impacto regulatorio y en la competencia que tendría esta fusión. Una vez concluida, Orange y Movistar encabezarían con creces el sector, con Vodafone como tercera operadora del mercado y Digi, en la cuarta posición. Hasta el 97% de algunos negocios quedarán en manos de tres únicas compañías.
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