Tras defender anoche la reforma laboral, el líder de la patronal recula unas horas después. “Nosotros pediremos un respeto y los defenderemos. Lo firmado, firmado está”, dijo Antonio Garamendi ayer lunes por la noche sobre el acuerdo alcanzado con los sindicatos sobre la reforma laboral. Este martes, el presidente de los empresarios ha precisado que la regulación “se puede retocar”, “como ha dicho el señor Feijóo”, ha afirmado a los medios de comunicación.
El discurso de Garamendi ha variado bastante en las últimas horas. “Los pactos son para ser estables en el tiempo y tienen que ir hasta el final. Nosotros pediremos un respeto y los defenderemos. Lo firmado, firmado está”, sostuvo este lunes por la noche el presidente de la CEOE durante unas jornadas con motivo del 45º Aniversario de Cinco Días.
El líder de la principal organización empresarial española y los de los sindicatos mayoritarios, Unai Sordo (CCOO) y Pepe Álvarez (UGT), defendieron los numerosos acuerdos del diálogo social en los últimos años, tanto en la pandemia como en numerosas legislaciones como la reforma laboral, la de pensiones, la ley rider o la de teletrabajo, que han convertido a España en una referencia internacional.
Tanto para el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, como para el secretario general de Comisiones Obreras, Unai Sordo, y el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, los pactos a dos y tres bandas que se han logrado en esta legislatura son “garantía de paz social”, por lo que deben ser respetados a “largo plazo” y responder al “interés de la sociedad”.
Unas horas después: “Se puede retocar”
Las palabras de Garamendi en defensa de la reforma laboral suponían un mensaje muy relevante para el principal líder de la oposición, el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, que había anunciado su voluntad de modificar algunos aspectos de la legislación laboral.
Pero este martes el discurso de Garamendi ha cambiado notablemente. “Los acuerdos son a largo plazo. Eso no significa que haya puntos, como ha dicho el señor Feijóo, que se pudieran retocar. Eso es lo que yo he dicho. Yo defiendo los acuerdos (...), que lógicamente son los que marcan y tienen que marcar el futuro, pero evidentemente, como todo en la vida, podrá cambiarse o no cambiarse”, ha afirmado el presidente de la CEOE a los medios de comunicación en un acto, recoge Europa Press.
De hecho, Garamendi ha añadido algunas modificaciones concretas. “Habrá cosas que habrá que cambiar”, como el artículo 51 del Estatuto de los Trabajadores, referido al despido colectivo, ha dicho el líder de la patronal. El empresario vasco ha afirmado que “el Gobierno ha cambiado sin consultar” este artículo, por el acuerdo en el Parlamento con EH Bildu para que la Inspección de Trabajo controle más las causas de los ERE, y que la CEOE pedirá modificar, ha afirmado.
Otro tema que se puede abordar, ha dicho Garamendi, es la posibilidad de las empresas de trabajo temporal (ETT) de firmar contratos fijos discontinuos. “Hay muchos temas que se pueden hablar y que están abiertos (...) Hemos llegado a un acuerdo, que ese acuerdo lógicamente está para cumplirse, pero que evidentemente si se abren espacios después, hablaremos”, ha precisado el presidente de los empresarios.
Feijóo no ha sido claro sobre sus planes respecto a la reforma laboral, aunque está abanderando una futura “derogación del Sanchismo”. Los sindicatos ya habían defendido la normativa por el consenso y sus resultados de reducción de la temporalidad, se sumaba ahora la patronal, y además España se arriesgaría a multas millonarias si derogara este hito incluido en el Plan europeo de Recuperación tras la pandemia.
Peligro del diálogo social ante la extrema derecha
Con la vista puesta en los próximos comicios generales del 23 de julio, patronal y sindicatos reivindicaron que se mantenga la relevancia del diálogo social, como recoge la Constitución. En este punto, los sindicatos han señalado el peligro de la extrema derecha de Vox, que ya está debilitando la concertación social en Castilla y León.
“Tiene a los sindicatos en el eje de sus iras, es evidente que es para temer por el diálogo social y por muchas más cosas”, afirmó Unai Sordo, con la prueba de lo que ya está haciendo el partido liderado por Santiago Abascal en le gobierno de Castilla y León, donde han intentado acabar con el servicio de mediación regional (SERLA). Acciones que han generado la preocupación de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Pepe Álvarez sostuvo que quien quiera actuar fuera de este contexto deberá explicarlo, ya que a la ciudadanía “no se le puede tomar el pelo”.
Por su partes, Antonio Garamendi advirtió de que “también hay populismos muy de izquierdas metiéndose con las empresas y los empresarios permanentemente de forma insoportable”. “Y aquí estoy”, añadió.
Los tres protagonistas de los agentes sociales emplazaron a no salirse de este marco del diálogo social en el futuro. Según Garamendi, aunque queden “muchos pelos en la gatera”, un pacto “llega mucho más lejos” que algo sin pactar y en los últimos años se ha llegado a importantes acuerdos que dan tranquilidad y estabilidad a la ciudadanía y las empresas. El líder de los empresarios también destacó la negociación colectiva, bipartita entre sindicatos y patronal sin el Gobierno, y que dio lugar recientemente al acuerdo para subir los salarios en los próximos años.
“El diálogo social es una fórmula de compromiso que nos permite avanzar menos de lo que todos queremos o podemos, pero con mucha más firmeza”, añadió por su parte Álvarez.