Las patronales apuntan a un seguimiento “prácticamente nulo” de la huelga de autobuses

Madrid, 29 nov (EFE).- La Asociación de Transportes Púbicos Urbanos y Metropolitanos (Atuc) y la Confederación Española de Transporte en Autobús (Confebus) han apuntado a un seguimiento “prácticamente nulo y con algún incidente muy aislado” de las dos jornadas de huelga de transporte en autobús convocadas para este jueves y viernes por CCOO y CGT.

En torno a 100.000 conductores asalariados han sido llamados a secundar la huelga, convocada para reclamar la jubilación anticipada sin merma económica, que se prevé que continúe los próximos 5, 9 y 23 de diciembre, cuando se convertiría en indefinida.

Las dos patronales han destacado los datos en capitales de provincia como La Coruña, Córdoba, Cádiz o Málaga, donde los trabajadores no han secundado la huelga.

Del mismo modo, en otras capitales importantes como Bilbao, Madrid o Barcelona, el seguimiento ha sido “prácticamente nulo, con el 5 %, 7 % y 33 % respectivamente”, un caso idéntico al de Gerona, donde sólo ha secundado la huelga el 5 % de los trabajadores.

Por comunidades autónomas, destaca Asturias, donde sus dos principales ciudades, Oviedo y Gijón, apenas han registrado un 20 % y 16 % de seguimiento respectivamente, han indicado ambas patronales en un comunicado conjunto.

Para Atuc y Confebus, la jornada de este viernes “está transcurriendo incluso con un menor seguimiento que la de ayer”, mientras que, según CCOO, ése ha sido hoy incluso mayor que el jueves en algunos lugares.

Acuerdo con UGT y SLT

Inicialmente, la movilización había sido convocada por CCOO y UGT tanto en el transporte de viajeros como en el de mercancías, pero finalmente solo fueron llamados a la primera jornada de huelga, el pasado 28 de octubre, los conductores de autobuses, tras haberse alcanzado un acuerdo en el de mercancías.

La segunda jornada de huelga, prevista para el pasado 11 de noviembre, fue pospuesta por ambos sindicatos ante la situación generada por la dana en la Comunidad Valenciana y a la espera de que se recobrase una situación de normalidad en las zonas afectadas.

Tras dicha suspensión, mientras CCOO retomaba el calendario de protesta, salvo en la provincia de Valencia, y CGT registraba un preaviso de huelga tanto en el transporte de viajeros como en el de mercancías, UGT firmaba, al igual que el Sindicato Libre de Transporte (SLT), sendos acuerdos con las patronales Confebus y Atuc, dejando sin efecto su convocatoria.

Las dos patronales, que valoran el diálogo permanente con los sindicatos UGT y SLT que ha permitido atender la petición para realizar la solicitud de coeficientes reductores para acceder a la jubilación anticipada del personal de conducción, han insistido hoy en que “seguirán trabajando para evitar la huelga convocada por CCOO y CGT de cara al puente de diciembre para el transporte de viajeros por carretera”.

Al igual que ocurre con otros sectores del transporte por carretera, donde se ha conseguido el mismo compromiso, la petición se realizará con el nuevo decreto de coeficientes reductores que se pactó en el acuerdo social del pasado 31 de julio de 2024, que fue suscrito por el Gobierno, las organizaciones empresariales CEOE y CEPYME, así como por las organizaciones sindicales CCOO y UGT.

Precisamente, CCOO critica que el acuerdo no recoja una fecha para la solicitud de la aplicación de coeficientes reductores, sino que se pospone a la publicación de un decreto que establezca un nuevo procedimiento administrativo.

CCOO considera “imprescindible” que las partes se comprometan a llevar a cabo acciones concretas en un plazo determinado para que el acuerdo no quede en una mera declaración de intenciones.

Y ha recordado que, desde 2021, el sector está esperando “ese nuevo decreto, que puede no llegar nunca dada la actual aritmética parlamentaria”.

Por ello, la organización se ha mostrado este viernes “satisfecha” con el resultado de la movilización porque “se pone en lo alto de la mesa que el conflicto sigue estando muy latente”.

Por su parte, a juicio de CGT, con el acuerdo alcanzado con UGT y SLT, las patronales, junto a dichos sindicatos, han logrado “desmembrar un sector que, por primera vez en mucho tiempo, se había unido de verdad por una causa justa y necesaria”.

CGT ha reconocido que el seguimiento de la huelga está siendo irregular en distintas ciudades, lo que atribuye al boicot de sindicatos como UGT y de los intereses empresariales que representan.

Además, están negociando “a espaldas de la clase trabajadora” propuestas para compensar el incremento en las cotizaciones a la Seguridad Social derivado de los coeficientes reductores mediante una disminución en las cotizaciones por accidentes de trabajo y enfermedades profesionales, a expensas, una vez más, de si el Estado decide asumir los costes, ha denunciado.

“Esta estrategia no solo nos divide, sino que vende nuestros derechos en mesas de negociación que benefician exclusivamente a las empresas”, ha agregado el sindicato, para el cual, “solo una huelga masiva puede obligar al Gobierno a actuar y legislar a favor de una jubilación digna, como ya lo ha hecho con otros colectivos, como el de los bomberos forestales”.