Nueva iniciativa contra la reforma de las pensiones del Gobierno en 2013. El PDeCAT presentará entre hoy y mañana una proposición no de ley contra el denominado 'factor de sostenibilidad' de las pensiones, uno de los elementos clave de la reforma del Ejecutivo de Rajoy que aún no ha entrado en vigor. Lo hará en enero de 2019, por lo que el partido catalán pretende volver a llevar el debate sobre este factor “al pleno del Congreso y la Comisión de Empleo y Seguridad Social para paralizarlo y debatir sobre otro factor de sostenibilidad”, explica el diputado Carles Campuzano.
La PNL busca la derogación de este factor, que vinculará el cálculo de la pensión a la esperanza de vida para las personas que se jubilen a partir del próximo año. Con revisiones cada cinco años, la pensión de entrada se modificará en función de qué esperanza de vida haya en ese momento.
Como explicaba recientemente a este medio la única mujer que formó parte del grupo de 12 expertos que asesoró al Gobierno en la reforma de 2013, Mercedes Ayuso, catedrática de Estadística Actuarial de la Universidad de Barcelona y miembro del grupo Riskcenter-IREA, este factor busca acabar con las desigualdades entre generaciones: “Lo que se hizo es modificar la pensión de entrada comparando la esperanza de vida para las siguientes generaciones”. Para que, a iguales contribuciones al sistema, los pensionistas cobren lo mismo: como cada vez viven más, esa cuantía debe expandirse a lo largo de más años (y, por tanto, se reduce en cada ejercicio).
Además de este factor, el índice de revalorización de las pensiones (IRP) fue el segundo elemento más importante de la reforma de del PP y este sí está en vigor. Este índice desindexó las prestaciones por jubilación del IPC y estableció por ley una subida mínima del 0,25%, dependiendo de la situación de las cuentas de la Seguridad Social. Además del mínimo de 0,25%, se marcó un máximo: el IPC más un 0,50%. Ante la situación de déficit de las cuentas de la Seguridad Social, las pensiones han subido el mínimo en los últimos cinco años, lo que ha ocasionado una pérdida de poder adquisitivo de los pensionistas en los últimos dos años.
Los cálculos de sindicatos y expertos auguran que la combinación de los dos elementos provocarán una caída de las pensiones en los próximos años. Según explicó un experto de la OCDE en una presentación este mes en Madrid, la tasa de sustitución –lo que supone en la pensión el salario medio– podría bajar de un 82% a un 72% en 2061. Si también tenemos en cuenta el índice de revalorización, esta tasa podría desplomarse hasta el 46% en el peor de los casos.
Aunque otras proposiciones -no de ley del PSOE, y de ley de Unidos Podemos-, han atacado la reforma de Rajoy en su totalidad, esta PNL exige solo la derogación del factor de sostenibilidad. “La pretensión es centrar el debate en el factor de sostenibilidad, que es injusto tal y como lo redactó el PP. Pero nosotros somos favorables a la reforma de 2011 que dijo que era necesario un factor”, explica Campuzano. El diputado catalán cree que es más probable que la PNL se debata antes en la Comisión de Empleo, “en marzo o abril”, calcula.