España pide una “respuesta” para “la realidad específica de la isla energética” de la Península Ibérica. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha afirmado a su llegada al Consejo Europeo en Bruselas, este jueves, que “la Península Ibérica sólo tiene un 2,8% de interconexiones con el mercado energético europeo, hay unas particularidades concretas que dañan el alza del precio del gas”. Según Sánchez, “es innegable que hay una realidad muy específica de una parte de Europa, que es la Península Ibérica, una isla energética con solo un 2,8% de interconexiones con el mercado energético europeo. La Península Ibérica merece una consideración específica. Sin vulnerar el mercado energético ni la política común, hay que dar una respuesta específica”.
Sánchez ha recordado, en todo caso, que el 29 de marzo el gobierno presentará un plan de actuación ante las consecuencias de la crisis por la invasión de Ucrania: “Vamos a dar una respuesta concreta y también global al problema de la energía en nuestro país. Pero, evidentemente, lo haríamos de manera mucho más eficaz y mucho más contundente si diéramos una respuesta europea a este problema”.
“Muchas propuestas son de España y asumidas por la Comisión Europea, pero ahora es importante encontrar una fórmula que se adecue a la realidad de la isla energética de la Península Ibérica. Somos una isla energética, pero todas las reglas europeas se aplican sobre España, lo que nos daña doblemente”, ha dicho Sánchez: “Tanto Portugal como España hemos planteado una propuesta rigurosa que no pone en cuestión el funcionamiento del mercado energético europeo y que nos podría dar la capacidad para responder de manera mucho más contundente a este precio del gas y a su traslación al precio de la electricidad”.
Sánchez reconoce que “hay países con dudas. Lo importante es cuadrar este sudoku. Lo relevante es que tenemos que actuar como con la pandemia, unidos. La energía es algo que afecta al día a día de los ciudadanos, y los políticos tenemos que ofrecer herramientas para amortiguar esta realidad”.
El presidente del Gobierno ha insistido: “Queremos una solución para toda Europa e incorporar un tope a los precios del gas. Esto puede llevar unas semanas, y por eso proponemos responder a la particularidad de la Península Ibérica. Nosotros hablamos de tres pasos: el primero, son medidas urgentes más alineadas con la realidad geográfica de la Península Ibérica y su conectividad energética; la segunda, lo que viene proponiendo España junto con Italia, Grecia, Bélgica, Portugal y Rumanía, que es ver cómo podemos negociar conjuntamente la compra de gas y cómo podemos afectar y controlar ese precio del gas; y en tercer lugar, ir a una reforma estructural del mercado energético”.