El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, defendió hoy en la OCDE el paquete de reformas estructurales lanzado con su llegada al Gobierno en 2012 y resumió en diez claves las lecciones que se desprenden de su implementación.
El mandatario destacó que la aplicación debe lanzarse lo más pronto posible dentro de la legislatura y apuntó que no debe ponerse un límite al número de cambios que quieran llevarse a cabo de forma simultánea.
En su discurso de más de una hora sobre el llamado Pacto por México, en el que repasó la reforma financiera, la educativa o la energética, que se han convertido en bandera de su gestión, subrayó igualmente la necesidad de rodearse de un equipo calificado y de cuidar todos los detalles técnicos.
“La última palabra la tienen los tribunales, de ahí la importancia de la solidez técnica”, añadió el presidente, que antes de su intervención se reunió con el secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), el también mexicano Ángel Gurría.
Peña Nieto recalcó que el resultado logrado es una recompensa pese a las discrepancias y las dificultades experimentadas, y advirtió ante los miembros del organismo de la importancia de pensar bien el orden previsto de las modificaciones, para empezar por las que gozan de mayor consenso.
En México, señaló, era necesario invertir en infraestructura y en educación, fortalecer el Estado de derecho o generar un sistema tributario “más justo, simple y transparente”, un diagnóstico en el que participó la OCDE y que fue corregido con el plan diseñado con la ayuda del organismo.
“Cuando uno ve el resultado se aprecia lo profundo que fue el cambio”, sostuvo el dirigente, quien destacó que gracias a la apertura de la competencia, los precios de los servicios de telecomunicaciones móviles han caído “hasta un 75 %” y en 5 años el número de usuarios de internet ha aumentado en 50 millones de personas, hasta los 75 millones.
Gurría, que hoy le entregó el “legado” de las reformas implementadas y el resumen del trabajo conjunto, recordó que el paquete de reformas mexicano ha sido el más ambicioso efectuado por un país de la OCDE recientemente.
La reforma energética “abrió el sector a la inversión privada” y la fiscal “redujo la informalidad”, resumió Gurría, quien no obvió que el país afronta todavía “muchos desafíos”, como la lucha contra la pobreza o la mejora de la sanidad, y apuntó que su organismo seguirá colaborando para superarlos.
La intervención de Peña Nieto de hoy precedió a su participación mañana en la cumbre sobre el clima organizada por Francia, en la que la comunidad internacional buscará acelerar el flujo de financiación hacia proyectos de desarrollo sostenible y en favor de una economía baja en combustibles fósiles.