Pepe Álvarez (Belmonte de Miranda, Asturias, 1956) ha sido reelegido este miércoles como líder del sindicato UGT para un tercer y último mandato, siendo el único candidato para el cargo de secretario general, con casi el 80% de votos a favor. Con el lema 'Más y mejor sindicato', Álvarez ha defendido seguir avanzando en nuevos derechos, como la reducción de jornada de trabajo, y ha reivindicado que se apruebe una mayor retribución de los sindicatos por parte del Estado por su labor de agentes sociales.
UGT cierra este miércoles su 44 Congreso Confederal, que se ha celebrado por tercera vez en sus más de 130 años de historia en Barcelona, ciudad que vio nacer al sindicato. Antes de dirigir la organización a nivel estatal (desde 2016), cuando tomó el relevo de Cándido Méndez, Pepe Álvarez fue líder del sindicato en Catalunya, donde fraguó su carrera desde el sector del metal.
Este será el tercer y último mandato de Pepe Álvarez al frente de UGT, hasta 2028, durante cuatro años más en los que ha defendido la necesidad de “Más y mejor sindicato”, el lema de este congreso confederal. “Más sindicatos son más derechos. Más sindicato es más democracia. Más sindicato es rebajar la jornada de trabajo. Más sindicato es poner el pie a la extrema derecho, es la libertad con mayúscula”, ha afirmado el reelegido líder del sindicato.
El Congreso Confederal celebrado estos días es el órgano supremo de UGT a nivel estatal, del que ha surgido una nueva dirección (Comisión Ejecutiva), que ha renovado varios de sus cargos y que ha obtenido un respaldo del 79,44% de los votos. Estas jornadas de proceso interno han tenido como objetivos marcar las líneas generales de la política del sindicato, analizar la gestión de los órganos confederales hasta el momento y también establecer sus normas de funcionamiento y retos para el futuro, entre otras.
En estos tres días de congreso, han asistido multitud de representantes del mundo político, sindical, empresarial e institucional. Desde el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, a la más polémica intervención y asistencia del líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, y a su homólogo en CCOO, Unai Sordo, o el presidente de la patronal CEOE, Antonio Garamendi, entre otros.
Hacia nuevos derechos: reducir la jornada
Álvarez ha subrayado la dirección del sindicato en los últimos años, especialmente en el último mandato en el que ha subrayado el gran avance de derechos laborales clave. Por ejemplo, el gran aumento del salario mínimo interprofesional, la aprobación de la reforma laboral y de pensiones, pactadas en el diálogo social, así como la Ley Rider y toda la gestión laboral de la pandemia, en la que los sindicatos fueron un engranaje clave al proponer y negociar los ERTE.
El líder de UGT ha lanzado la mirada al futuro para reivindicar la necesidad de seguir avanzando en nuevos derechos para los trabajadores y trabajadoras. En el horizonte se sitúa principalmente uno, la reducción de la jornada de trabajo, que para Pepe Álvarez debe ir más lejos de las 37 horas y media que pretende aprobar el Gobierno de coalición.
Pese a que hace unas semanas el líder de UGT urgía al Gobierno a reducir la jornada “sin hacer concesiones” a la patronal, por su negativa a pactar la medida, este miércoles Pepe Álvarez ha afirmado que todavía existe “la oportunidad” de un acuerdo con la CEOE. Ayer, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pidió a los empresarios se sentaran a negociar, pese a que el Ministerio de Trabajo ya ha dado por cerrada esta mesa de diálogo tras el 'no' de la CEOE.
“Quiero decir que tenemos la oportunidad de hacerlo [reducir la jornada], negociado y acordado con las organizaciones patronales. Depende en buena parte de ellos. Depende si quieren y aceptan este avance absolutamente imprescindible”, ha afirmado Pepe Álvarez este miércoles.
El sindicato está además centrando sus esfuerzos en impulsar una reforma legal del despido y de las horas extraordinarias, para lo que ya inició en el pasado mandato una estrategia de denuncias a nivel internacional contra España, a través del Comité Europeo de Derechos Sociales. Este miércoles, justo ha habido novedades que respaldan al sindicato, con una petición del Consejo de Europa a España para que reforme la indemnización por despido.
Pagar la labor de los sindicatos
Otra de las reivindicaciones que Pepe Álvarez ha llevado a primera línea en este Congreso Confederal ha sido la petición de una mayor retribución de los sindicatos por parte del Estado. Más allá de las actuales subvenciones públicas, Álvarez ha reclamado que el Estado pague por el papel que realizan las organizaciones de trabajadores mayoritarias como agentes sociales. “Ser sindicalista cuesta dinero a los propios sindicalistas”, ha afirmado Álvarez.
Por ejemplo, al negociar y pactar los planes de igualdad en las empresas, los convenios colectivos, así como otras regulaciones laborales que luego se transforman en derechos para el conjunto de la población trabajadora. En otros países, recordó Álvarez, las condiciones que pactan los sindicatos solo benefician a sus afiliados, pero en España se extienden a todos los asalariados de la empresa o sector en cuestión.
Pepe Álvarez también ha insistido en la necesidad de abordar uno de los principales problemas de la ciudadanía en la actualidad, el acceso a la vivienda, así como seguir avanzando en las subidas del salario mínimo interprofesional (SMI), mejorar las condiciones de los becarios, y seguir dando pasos en favor de la igualdad de género, entre otras reivindicaciones.
En rueda de prensa, el vicesecretario general de Organización, Rafael Espartero, defendió que “el sindicato debe crecer en número y debe crecer en calidad, debe afrontar los nuevos tiempos, debe de enfrentarse a una nueva forma de producir que tiene que ver con el teletrabajo”.