El paro baja en 72.800 personas gracias a la temporalidad y a que menos gente busca empleo
El verano suele ser favorable para el empleo y 2013 no ha sido la excepción: el paro cayó en 72.800 personas entre junio y septiembre, hasta un total de 5.904.700 de parados, y la tasa de desempleo se redujo en 28 centésimas, y se sitúa en el 25,9%, según la última Encuesta de Población Activa (EPA). La última vez que la tasa de paro bajó del 26% fue precisamente hace una año. La temporalidad y la caída de las personas que buscan un empleo (la población activa) están detrás de la bajada.
¿De dónde procede la reducción del desempleo? El paro baja en 72.800 personas, sin embargo, el número de empleos creados está por debajo de esa cifra: el trimestre pasado las personas con trabajo (ocupadas) crecieron en 39.500. El resto de la reducción -33.300 personas- corresponde a la caída de la población activa: es decir el número de personas que buscan empleo ha caído, bien porque emigran, se jubilan, o abandonan el mercado laboral por el efecto desesánimo.
Por sexos, el paro baja más entre las mujeres (68.700) que entre los hombres (4.100). No obstante, la mayoría de nuevos empleos fueron ocupados por hombres (24.700) y, en menor medida, por mujeres (14.800). Esto quiere decir que la reducción del desempleo femenino procede sobre todo de la caída de la población activa y no de que las mujeres estén encontrando puestos de trabajo con más facilidad.
Desde el segundo trimestre de 2011, la economía española no ha dejado de perder población activa: si en los primeros tres años de crisis el número de personas que se incorporaba a la búsqueda de empleo creció en varios cientos de miles de personas; conforme ha avanzado la recesión la tendencia ha sido justo la inversa. En los dos últimos años, España ha perdido algo más de 400.000 personas activas.
Precariedad
El empleo que se crea es escaso y es, además, precario. En el tercer trimestre, las personas con contrato indefinido han bajado en 146.300, mientras que los contratos temporales aumentaron en 169.500. Si comparamos con el mismo trimestre del año anterior, la evolución es negativa en ambos casos, pero mucho peor para los indefinidos: en el último año el empleo estable ha perdido 406.000 trabajadores, mientras que el precario solo 70.000.
Solo el sector servicios creó puestos de trabajo, lo que refuerza la idea de que el alivio del desempleo procede más de una mejora puntual debida al verano, la temporada turística y la contratación eventual, que de una recuperación consistente de la economía. Tanto la agricultura, como la industria y la construcción destruyeron empleos.
En el último año, los números hablan de un mercado laboral cada vez más precario: hay 487.600 contratos indefinidos a tiempo completo menos, y también caen los contratos estables a tiempo parcial, aunque en mucha menor medida, en 81.400. Los temporales, sin embargo, crecen: hay 163.000 contratos eventuales más, 81.400 a tiempo parcial y 121.300 a tiempo completo.
El sector público sigue destruyendo empleo
Con este, el sector público encadena ya ocho trimestres de destrucción de empleo y a un ritmo mayor de lo que lo hace el sector privado. En verano, el empleo público se redujo un 5,3%, mientras que el privado lo hizo a un 2,3%.
La plantilla de la administración pública asciende actualmente a 2.830.600 personas (incluyendo el personal de las administraciones públicas), el mismo nivel que hace nueve años, en 2004. El sindicato CSIF denuncia que esto se traduce en un deterioro de los servicios públicos, “dada la evolución al alza de la población española”.
Hogares
Hay 1.807.700 hogares donde todos sus miembros activos están en paro, 13.400 menos que en el trimestre anterior. Sin embargo, respecto al año anterior las familias donde todos están en desempleo crecen en 69.800.