“Hay que aprovechar cada gota de agua”, ha afirmado el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, quien, como viene insistiendo en los últimos meses, ha recalcado este jueves en la jornada sobre los fondos europeos de recuperación de elDiario.es que las prioridades del Proyecto estratégico para la recuperación y transformación económica (Perte) agroalimentario son “el regadío sostenible” y la digitalización e innovación.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció este miércoles que este Perte será ampliado en 800 millones de euros, hasta 1.800 millones, y Planas ha incidido en que es crucial “llegar al conjunto del sector agroalimentario y no solo a las grandes empresas”.
“El Perte ha tenido éxito desde antes de ser lanzado”, ha explicado el ministro, quien, ahora, admite que su primera preocupación es “cómo llegar a todo del territorio nacional, y no solo a las grandes empresas que conocen mejor el acceso a las ayudas, sino al conjunto del sector”.
“Sostenibilidad competetiva”
Entre los principales enfoques del Perte está “el regadío sostenible” para atender a la transición ecológica, pero entendiendo una “sostenibilidad competitiva”, ya que, según Planas, “aquello que no es rentable, no es sostenible”.
El ministro del sector primario ha recordado que se cumplen 60 años de una las primeras y más importantes políticas comunes en Europa, la Política agraria común (PAC), y que en el momento se está viviendo una segunda “revolución verde”, aunque en un entorno mundial complicado.
Así, otra prioridad del Perte es la digitalización, con el objetivo de financiar iniciativas de agricultura o ganadería de precisión. “Los drones pueden medir las necesidades de fertilizantes y otras”, hasta llegar, por ejemplo, “al cuaderno digital de campo”, el que se pueda anotar todo lo relacionado a la explotación “para que que no haya declaraciones de PAC sino que se confirme un borrador”, ha adelantado Planas.
Más girasol como consecuencia de la guerra
Ante el complejo escenario provocado por la guerra en Ucrania, Planas ha insistido en que no amenaza la alimentación en España ni en el resto de la UE, pero ha advertido que sí que supone un incremento de los costes energéticos y de los insumos (por ejemplo los fertilizantes o aquellos que tienen que ver con la ganadería), y que se traslada a los precios.
Por eso, “el Gobierno aprobó un Plan de choque, de ayudas directas, para el sector primario de 430 milllones de euros y ”hemos liberado el 5% de obligación de barbecho en las explotaciones agrarias“.
Una acción que, junto a las consecuencias mundiales “de la invasión ilegal de Rusia”, va a favorecer que se incremente la producción de girasol, “porque necesita menos agua y menos fertilizante, con lo que cual sufre menos el incremento de los costes, ”y de cereales, como el maíz“, según ha reconocido.