Una diputada del PP multiplica sus negocios en República Dominicana sin declararlos al Congreso

La empresaria y diputada del PP Carmen Álvarez-Arenas ha encontrado otro filón en República Dominicana, uno de los territorios que ha elegido para su expansión internacional Genser SL, empresa de limpieza que controla junto a su familia y de la que es consejera delegada. Su filial Genser Dominicana SRL ganó el año pasado 173.090 euros, nueve veces más que en 2015. Esta empresa no figura en la declaración de Bienes de Álvarez-Arenas, vocal de la Comisión de Exteriores del Congreso desde febrero de 2016.

El 100% de Genser Dominicana SRL pertenece a Genser SL y el año pasado fue, de largo, su filial más rentable, según las cuentas de esa sociedad española recientemente depositadas en el Registro Mercantil. Constituida en 2013, desde ese año siempre ha obtenido beneficios.

Genser Dominicana es una de las dos filiales extranjeras de Genser. La otra, portuguesa, es Renigoring, Unipessoal LDA. Nunca ha dado beneficios y fue constituida en Lisboa en julio de 2013 por Álvarez-Arenas con un capital de 3.000 euros, según datos del Registro Mercantil luso. Tampoco figura en la declaración de bienes y rentas de la diputada, a diferencia de las españolas Genser Levante, Genser Centro Especial de Empleo y Centro Especial de Empleo Genser Canarias, de las que Genser SL es socio mayoritario o al 100%.

Preguntada por este asunto, Álvarez-Arenas dice que “no recuerda” si incluyó esas sociedades extranjeras en su declaración. En todo caso, “no hay ninguna situación de engaño”, asegura.

De la mano de Globalia

Respecto a Genser Dominicana, señala que es lógico el aumento de su negocio, ya que “está limpiando en cuatro hoteles, que es muchísimo personal”. Lo hace prestando servicio a Globalia, el mayor grupo turístico español, con el que Genser tiene una estrecha relación. El domicilio de su filial dominicana está ubicado en las oficinas de Globalia en ese país, en la quinta planta del número 158 de la Avenida Roberto Pastoriza de la capital, Santo Domingo.

En España, Genser también trabaja para el grupo de la familia Hidalgo. Proporciona camareras de pisos para su cadena Be Live Hotels. Ambas empresas tienen a sus espaldas varias condenas judiciales por cesión ilegal de trabajadores. La más reciente, en noviembre pasado, es de la Sala Social del Tribunal Supremo. “No hay ninguna condena en firme, hasta donde yo sé. Seguimos allí trabajando”, indicaba el pasado jueves Álvarez-Arenas en conversación telefónica desde “el extranjero”.

Respecto a su sociedad portuguesa, explica que “está cerrada hace cuatro años. No estuvimos ni siquiera tres meses trabajando”. En el Registro Mercantil luso figura como activa y sus últimas cuentas (de 2014) fueron depositadas el 7 de julio de 2015. Ella insiste en que “no tiene actividad desde el año 2013”, cuando se creó.

Subvenciones ocultas

Álvarez-Arenas, que tiene autorizada la compatibilidad del Congreso para ejercer cargos en sus empresas en España, ya ocultó durante tres años en su declaración de intereses (hasta junio de 2014) que sus dos centros especiales de empleo (empresas de limpieza en las que al menos un 70% de la plantilla está compuesta por personas con una discapacidad superior al 33%) cobraban subvenciones públicas.

Aseguraba entonces que no tenían “ninguna relación con el sector público”, pero no era cierto. Después rectificó su declaración para señalar que recibe “subvenciones regladas de aplicación automática de la normativa vigente”.

Como informó eldiario.es en diciembre de 2015, durante la primera legislatura de Mariano Rajoy y mientras era portavoz de Empleo del PP en el Congreso, la política y empresaria fue ponente en la redacción de la ley de Lucha contra el empleo irregular y el fraude a la Seguridad Social, que benefició a los centros especiales de empleo, como los suyos, al quintuplicar las sanciones por incumplir una normativa de la que dependen directamente para cobrar esas subvenciones.

Según dijo entonces Álvarez-Arenas, no existió “ninguna incompatibilidad” en esa circunstancia, ni cuando, siendo alto cargo de la Comunidad de Madrid (entre 2005 y 2008), sus empresas cobraban subvenciones del Gobierno de Esperanza Aguirre.

En 2016, el beneficio de Genser SL bajó un 67,5%, hasta 93.013,66 euros, tras recortar su facturación un 16,6%, hasta 3.698.813,92 euros. Fundada en 1982 y con 125 empleados, la empresa estuvo gestionada por el marido de la diputada, Ricardo Sánchez, hasta su fallecimiento en 2010. Actualmente la administran ella y sus seis hijos.

Carmen Álvarez-Arenas Cisneros es hija del militar Félix Álvarez-Arenas y Pacheco, capitán general con el dictador Francisco Franco y ministro del Ejército durante la Transición. Lleva 30 años en política, “sirviendo a España”, como proclama en su biografía en su cuenta de Twitter. En el Congreso desde 2008, fue diputada de la Asamblea de Madrid entre 1987 y 2008; secretaria de la Mesa del parlamento regional (entre 2003 y 2005), viceconsejera de Empleo y Mujer con Esperanza Aguirre, viceconsejera de Presidencia de Madrid con Alberto Ruiz-Gallardón (1995-1999) y senadora por Madrid (1999-2003).

En las elecciones generales de diciembre de 2015 y junio de 2016, concurrió en el número 9 de la lista del PP por Madrid. En esta legislatura, ha dejado la Comisión de Empleo del Congreso y, entre otros cargos, es vicepresidenta Primera de la Comisión de Defensa, vocal de la de Exteriores y miembro titular de la Delegación Española en la Asamblea Parlamentaria de la OTAN.

Según datos de la web del Congreso, en la presente legislatura Álvarez-Arenas no ha presentado ninguna iniciativa parlamentaria. Entre sus escasas intervenciones se cuenta la defensa de una Proposición No de Ley (PNL) sobre la conmemoración del 300 aniversario de la Real Compañía de Guardiamarinas, el pasado abril.