El precio medio de la luz en el mercado mayorista de electricidad vuelve a subir para este miércoles y se sitúa, según datos provisionales de OMIE, en 94,63 euros por megavatio hora (MWh), 3,68 euros por encima del precio medio del martes y apenas 36 céntimos por debajo del pico de 94,99 euros alcanzado el pasado 8 de enero, en vísperas de la llegada de la borrasca Filomena y una ola de frío y nieve.
El pool, que este martes ya superó los 90 euros por MWh por primera vez desde enero, continúa así su escalada y marca para este miércoles uno de los precios más elevados de la historia. Según datos recopilados por EFE, los únicos dos precios diarios más elevados se dieron el 8 de enero, con Filomena (los citados 94,99 euros/MWh), y el 11 de enero de 2002 (103,76 euros).
Esta espiral alcista se ha agudizado tras la entrada en vigor, el 1 de junio, de la nueva factura que penaliza las horas más caras y en pleno pulso del Gobierno con las eléctricas para tratar de recortar los denominados “beneficios caídos del cielo” que reciben la tecnología hidroeléctrica y la nuclear por el encarecimiento del CO2.
El precio de la energía tiene un peso cercano en la factura de en torno al 24%, mientras que alrededor del 50-55% corresponde a los peajes -el coste de las redes de transporte y distribución- y cargos -los costes asociados al fomento de las renovables, a las extrapeninsulares y las anualidades del déficit de tarifa- y algo más del 21% a los impuestos.
Solo en los quince primeros días de junio, el recibo de la luz de un usuario medio se ha disparado un 45,4% en la primera quincena de junio, frente al mismo periodo del año pasado, según Facua. La asociación de consumidores estima que, si se extrapolan a un mes completo los precios aplicados del 1 al 15 de junio, el recibo del usuario medio sufriría una subida interanual de 27,53 euros. Se situaría en 88,11 euros (impuestos incluidos), la segunda factura más cara de toda la historia, tras los 88,66 euros del primer trimestre de 2012, “aunque sospechamos que puede haber más subidas a lo largo del mes”, ha apuntado en una rueda de prensa telemática el secretario general de Facua, Rubén Sánchez.
El incremento interanual de estos quince días representa para el usuario medio, según Facua, un 45,4% más con respecto a junio de 2020, cuando el recibo mensual se situó en 60,58 euros. La factura del usuario medio del pasado mayo fue de 82,13 euros. El usuario medio utilizado por Facua en sus análisis tiene una potencia contratada de 4,4 kilovatios (kW) y un consumo de 366 kilovatios hora (kWh) mensuales.
En cuanto a los porcentajes de consumo en los tres tramos horarios del nuevo sistema de facturación, la asociación ha tomado como referencia el actual perfil de usuario medio sin discriminación horaria publicado por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMC), que consume el 45% de la electricidad en el horario 'valle', el 29% en el horario 'punta' y el 26% en el horario 'llano'.
En junio de 2020, el precio medio sin discriminación horaria fue de 11,31 céntimos, y un año antes, en junio de 2019, de 13,78 céntimos. En cuanto a la media del pasado mayo, fue de 17,20 céntimos.
Con independencia de los picos diarios que se han alcanzado en determinados momentos, el recibo mensual más elevado de la historia se dio durante todo el primer trimestre de 2012, según Facua, cuando el kWh se situó en 20,85 céntimos.
Soluciones ante los “brutales incrementos”
En un comunicado, la asociación ha reclamado al Gobierno soluciones ante “los brutales incrementos tarifarios” que continúan aplicando las eléctricas y un cambio en el nuevo sistema de facturación por tramos horarios, “que representa por sí solo un incremento en el precio de la energía consumida para un altísimo porcentaje de consumidores y perjudica especialmente a las economías más desfavorecidas”.
Asimismo, considera que la bajada media del 14,2% en el precio del término fijo de la factura resulta “absolutamente insuficiente, máxime teniendo en cuenta que durante los gobiernos de Mariano Rajoy se incrementó en un 103%” y lamenta que la vicepresidenta cuarta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, “no haya manifestado públicamente que la CNMC debe modificar los horarios, con el adelanto del periodo 'valle' a las 22.00 horas de lunes a viernes” que reclama Facua.
La CNMC ha señalado ya que es precipitado hacerlo tras pedirlo dos ministros de Unidas Podemos, aunque el Gobierno tiene la potestad de actuar sobre la parte regulada del recibo que controla, los cargos.
Facua valora “positivamente” la propuesta de recorte de 1.000 millones de euros anuales en las sobrerretribuciones a las eléctricas por la no emisión de CO2 en hidráulicas y nucleares. Además, exige “una reforma de calado” del bono social para que sean muchas más familias las que puedan acogerse a él y una bajada del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) en la factura de los consumidores domésticos.