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Rajoy pide a los españoles que le comprendan

Mariano Rajoy pide a los españoles que le comprendan, que se solidaricen con él y que entiendan que no hay otro remedio para salir de la crisis que los recortes y medidas puestos en práctica este año. En su opinión, eran “inevitables” por el déficit encontrado al llegar al Gobierno y de no haberlos hecho, “todo sería inmensamente peor”. Lo único que se atreve a aventurar en el balance de su primer año como presidente es que España no volverá a pasar por una situación como la actual porque sus reformas “han cambiado el rumbo” y se saldrá de la crisis “más pronto que tarde”. No hubo autocrítica porque la deja para sus “innumerables adversarios”.

Se notó que había hecho un esfuerzo por equilibrar el tono y aparecer comprensivo ante los ciudadanos ya que a su vez también pedía que le entendieran a él. Afirmó que su Gobierno sabe de la “impaciencia, el escepticismo y hasta la desesperanza por la falta de resultados”. Solo se concedió calificar su reforma laboral y la reestructuración del sector financiero como “la más ambiciosa agenda jamás emprendida”. En cuanto a las señales esperanzadoras, citó la mejor marcha de las exportaciones y de la competitividad y la menor destrucción de empleo en el sector privado.

Consciente de que su objetivo de ser un presidente previsible pronto se vio inalcanzable, Rajoy admite que ha contravenido su programa electoral varias veces y del coste que eso le ha supuesto en credibilidad por la falta de valor que tiene su palabra. Pero se escudó desde el primer momento de su comparecencia en las cifras del déficit y en que nunca había llegado a imaginar “semejante deterioro” en su desviación.

En cuanto a sus relaciones con el president Artur Mas, dijo estar dispuesto a entrevistarse con él “cuando quiera” y a hacer “todo lo que esté en su mano” para favorecer el acercamiento con Cataluña y evitar que el choque institucional sea completo. Pero explicó que no se plegará a ninguna exigencia como las que le formuló Mas en su última reunión antes de convocar elecciones: “Las cosas no son o se hace esto o, si no, hago lo que yo quiero ”. Insistió en que si se trata de hablar de mejoras de financiación o “acomodar demandas de diversidad” siempre está dispuesto a negociar avances mientras no se contradigan con la Constitución. La relajación del objetivo de déficit para Cataluña tampoco está entre sus previsiones.

Diez años más sin tocar la Constitución

La actual Constitución también se queda como está ya que, según Rajoy, “puede durar diez años más y está perfectamente preparada para el futuro”. Así, insistió en que no es una prioridad cambiarla y que solo se hará si hacerse si tiene el mismo consenso que cuando se promulgó .El jefe del Ejecutivo considera que las demandas para abordar ese debate son un “brindis al sol” y llamó a tener cuidado “porque son las reglas de convivencia y lo que nos une”.