La realidad virtual como estrategia de venta comienza a imponerse en el sector inmobiliario de la mano de iniciativas que permiten no sólo la visualización en 3D de los inmuebles, sino también su reforma y decoración virtual.
Esta tendencia, que lleva un par de años en auge, ha supuesto un ahorro de tiempo y dinero considerable para las inmobiliarias, según fuentes del sector.
La visualización virtual permite al cliente descartar los inmuebles que no le gustan y visitar únicamente los que realmente pueden interesarle.
Entre las empresas que han incorporado las visitas virtuales en sus modelos de negocio se encuentra Aliseda Inmobiliaria, del Banco Popular, que ofrece la visualización de fotografías interactivas de los inmuebles, así como una recreación de las reformas que podrían hacerse e incluso de su decoración.
Para ello, Aliseda ha lanzado una campaña junto a Espaciodeco -dedicada a la decoración y venta de muebles- para facilitar a sus clientes la llamada decoración virtual, un concepto que acorta sustancialmente los plazos de venta de los inmuebles.
“Con una imagen de decoración virtual el número de visitas al anuncio de internet se multiplica por tres” y el inmueble recibe el doble de contactos y visitas, afirma la consejera delegada de Espaciodeco, María José González-Barros.
Otro ejemplo de compañía inmobiliaria que ya hace un año se subió al carro de las nuevas tecnologías es la consultora inmobiliaria Oi Realtor. Esta firma deja a un lado la decoración, pero posibilita visitas de los inmuebles de 360 grados en 3D, a través de unas gafas o de un catálogo virtual.
El consejero delegado de Oi Realtor, Luis Gualtieri, asegura a EFE que la inversión en este campo es “grande” y se hace más necesaria que nunca.
El 17 % de los ingresos de Oi Realtor van destinados a I+D, departamento que incluye la partida para la realidad virtual. “Solo en realidad virtual invertimos unos 96.000 euros de media al año, unos 9.000 euros al mes”, añade.
Además, el directivo destacó que utilizan un software propio, “que permite ofrecer información a través de pantallas interactivas a pie de calle, en cualquiera de las oficinas”, las 24 horas del día.
Por su parte, Club Notegés -una asociación de agentes inmobiliarios que cuenta con más de 200 agencias en España- tiene en su catálogo más de 10.000 inmuebles recreados virtualmente, de una cartera de unos 50.000, para que sus clientes puedan consultarlos con comodidad desde casa o desde sus oficinas.
El director de marketing y tecnología de Club Notegés, Rafael Valdés, asegura que no se compra un piso viéndolo de forma virtual, pero sí pueden descartarse muchos e ir a visitar solamente los que interesan.
“Se molesta menos al propietario y se ahorra mucho tiempo”, añade Valdés.
Asimismo, el 'smartphone' también está cobrando protagonismo en el sector inmobiliario con el lanzamiento de iniciativas como Vitro, una nueva aplicación que permite comprar, vender o alquilar inmuebles desde el propio móvil.
Esta “app” se convierte asimismo en una red social, donde el cliente “puede compartir sus espacios favoritos e ideas de decoración mediante fotografía esférica” en 360 grados, según sus creadores.